Blogia
Antón Castro

LA GRAN NOCHE DE LUIS ALEGRE Y DAVID TRUEBA (ESPERO...)

LA GRAN NOCHE DE LUIS ALEGRE Y DAVID TRUEBA (ESPERO...) La silla de Fernando” de Luis Alegre y David Trueba es candidata al mejor documental en los próximos premios Goya. Se trata de un documental-entrevista donde Fernando Fernán Gómez habla de lo divino y lo humano, de la alegría, del amor, del arte de vivir.

[Reproduzco aquí un diálogo con Luis Alegre sobre este proyecto; el texto se publicó en “Heraldo” con motivo de su presentación en el Festival de San Sebastián. Javier Navarrete (Teruel, 1956) también es candidato al Goya por la banda sonora de "El laberinto del fauno" de Guillermo del Toro,que también optará al Oscar en marzo]  

CONVERSACIÓN CON LUIS ALEGRE

Fernando Fernán Gómez decidió jugar a un “experimento”. Dos de sus amigos, Luis Alegre y David Trueba, aquellos dos chicos que se colaron en su fiesta de cumpleaños y que fueron presentados por dos cantantes callejeros de Zaragoza, iban a tirarle de la lengua. Le someterían a diversas preguntas, le invitarían a abordar distintos temas y a hablar a la cámara. El resultado de más de 20 horas de grabación es la película-conversación “La silla de Fernando” que se proyectó en el cine Príncipe, dentro del Festival de Cine de San Sebastián.        

Luis Alegre explicaba desde la ciudad donostiarra que “esta película nace de la fascinación absoluta que sentimos David Trueba y yo por Fernando Fernán Gómez: por su personalidad, por su manera de ver la vida, y por la expresar ambas cosas hablando. Fernando es un fuera de serie, en primer lugar, por su aportación cultural al siglo XX. Es el hombre que sintetiza muchas artes: la literatura, el cine, el teatro, la televisión. Pero además es un fuera de serie contando lo que ha vivido, lo que ha pensado”. Dice Luis Alegre que no es un documental al uso, “si la división es documental o ficción, es un documental”, porque no se hace un exhaustivo recorrido por su vida y su obra, sino que es una obra que “registra lo que cuenta y sobre todo cómo lo cuenta. No he visto nunca un discurso tan seductor, tan magnético, tan explosivo y tan artístico como el de Fernando Fernán Gómez. Quien lo admire ya por su vastísima y plural obra, descubrirá una faceta humana. En cierto modo, ‘La silla de Fernando’ es una reivindicación de hasta qué punto la palabra puede ser bella y hermosa cuando la dice alguien como él”. Luis Alegre insiste en algo que ya ha expresado en otras ocasiones: “Fernando posee la mente más libre y genial que he conocido en mi vida”.

¿Qué cuenta en realidad esta película-conversación? Luis Alegre dice que casi le da apuro contar una anécdota específica porque teme romper la magia. “Fernando Fernán Gómez habla, por ejemplo, de la fascinación infantil y del enamoramiento que sintió siempre hacia Marlene Dietrich; del día que vio a Ava Gardner; de la bohemia y de su relación con el alcohol. De tan sincero, resulta políticamente incorrecto. Nunca es convencional ni previsible. Es un hombre desprejuiciado. Parece misógino, y dice cosas que constituyen un gran homenaje a las mujeres. Una anécdota magnífica que narra es aquella en que el director Luis Lucía le dice: ‘Fernando, acompáñame a un bar que tengo ganas de pegarme con alguien’. Fernando no recurre a lugares comunes, su inteligencia no se basa en un diccionario de ideas recibidas, piensa por sí mismo sin resultar pedante ni arrogante”.

La película presenta a Fernando Fernán Gómez siempre sentado en una silla, en “la misma silla”, en un clima de máxima intimidad. La grabación de 85 minutos también incluye imágenes de películas “muy significativas”, fotografías de su vida y de los personajes que evoca, y también un espectáculo de 1992, “el último que hizo en el teatro”. Recuerda Luis Alegre que fue un espectáculo dirigido por Mario Gas, del que sólo se hicieron dos funciones: una en Madrid y otra en Barcelona, donde Fernando salía recitando anuncios clasificados por palabras. “Es tan gracioso eso que hemos decidido arrancar así. Pero además hay algo muy emocionante: Bebo Valdés y Enrique Morente nos han regalado una versión estupenda del tango ‘Caminito’. Al principio, suena sólo al piano de Bebo Valdés, y al final Morente canta. Es algo inolvidable, un regalo que nos han hecho por amistad y admiración hacia Fernando”. Luis Alegre recalca una sensación, una búsqueda de los directores: “Ni a David ni a mí se nos ve; sólo se nos oye alguna vez, las risas claro. Queríamos que el espectador percibiese que Fernando le habla directamente a él”.


0 comentarios