Blogia
Antón Castro

ASÍ PIENSA Y FOTOGRAFÍA LAUREN GREENFIELD

ASÍ PIENSA Y FOTOGRAFÍA LAUREN GREENFIELD

Espejito, espejito…


por Lauren Greenfield

La cultura de las chicas (Girl Culture) ha sido mi diario como fotógrafa, como observadora de la cultura, como parte de los medios de comunicación, como crítica de los medios, como mujer y como una chica.

Estas fotografías son a la vez personales y publicas. Reflejan lo privado y lo público y dónde radica la línea que divide estos ámbitos, cuando ésta existe. Muestran la cultura popular que compartimos y la forma en que esta cultura marca a los individuos tanto en sus momentos más públicos como en los más privados. Las fotografías hablan de las chicas a quienes fotografié. También hablan de mí. Estaba inmersa en la cultura de las chicas antes de ser fotógrafa y estaba haciendo fotografías sobre la cultura de las chicas antes de darme cuenta de que estaba trabajando en La cultura de las chicas (Girl Culture).

En este trabajo fui arrastrada hacia lo patológico en la vida diaria. Estoy interesada en la tiranía de las chicas delgadas y populares sobre aquellas que no entran en el mismo molde. Estoy interesada en la competencia que existe entre las chicas populares y su sensación de que ser popular no es tan satisfactorio como parecía. Estoy interesada en los rituales de belleza, costosos en términos de tiempo y dinero, que forman parte integral de la vida diaria. Estoy interesada en el hecho de que aquellas que no poseen un cuerpo ideal son las parias de la vida moderna. Me interesa también saber cómo los sentimientos de frustración, enojo y tristeza son expresados en forma física y autodestructiva como por ejemplo: controlando la comida que ingieren, haciéndose cortadas en el cuerpo, siendo sexualmente promiscuas. Y lo que más me interesa son los elementos de interpretación y exhibicionismo que parecen definir la experiencia contemporánea de ser una joven.

Estos intereses, mis propios recuerdos y un amor genuino por las jóvenes, el chisme, los lazos afectivos que unen a las mujeres y la idiosincrasia de los rituales que forman la cultura de las chicas, han motivado este viaje fotográfico a lo largo de cinco años.

Hay jovencitas y mujeres en mis fotografías que pueden ser consideradas marginales o cuyas vidas pueden parecer extremas a los ojos de quienes las miren. En efecto, la cultura popular ha ocasionado que lo común se halle inextricablemente entretejido con lo que, para muchos parece ser extraordinario. Muchas jóvenes están familiarizadas con experiencias “marginales” que ven o escuchan en la televisión, las revistas y la música. Una adolescente de un suburbio comenta que le gustaría convertirse en bailarina exótica. Una niña pre-púber imita los movimientos sexuales y el uso de ropa atrevida que ve en MTV. Entender la dialéctica entre el extremo y lo normal—la anoréxica y la que hace dieta, la stripper (desnudista) o la adolescente que desnuda su torso o usa tanga—es esencial para entender la identidad femenina actual.

El cuerpo se ha convertido en el lienzo principal en el cual las chicas expresan sus identidades, inseguridades, ambiciones y luchas. Se ha convertido en el palimpsesto en dónde muchos de los mensajes culturales contradictorios acerca de la feminidad son escritos y re-escritos.

La fotografía es el medio ideal con el cual explorar el rol de la imagen en nuestra cultura. La cámara ofrece la ilusión de la representación objetiva, justo como lo hace un espejo. Pero como toda mujer sabe, un espejo proporciona información que, al ser filtrada por nuestra mente y nuestro estado de ánimo está sujeta a interpretaciones muy variadas. Este proyecto ha sido mi espejo y mi intento por de-construir las ilusiones creadas por nuestra realidad.

Lauren Greenfield

*Sheena, de quince años, se mira al espejo mientras la observa su amiga Ambler. Foto de Lauren Greenfield.

 

0 comentarios