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Antón Castro

EL 'PAÍS DE PAISAJES' DE BERNARD PLOSSU

EL 'PAÍS DE PAISAJES' DE BERNARD PLOSSU

Hace algunos meses, el pasado noviembre, escribí:

 

Las fotos de Bernard Plossu tienen una atmósfera de intemporalidad. Concentran una mirada peculiar, un detalle, un laberinto de matices, un fogonazo desdibujado de contrastes. Me ocurrió algo precioso: me hizo varias fotos, cinco o seis, casi como fotos robadas, yo hablaba y hablaba, y él buscaba. A veces, la velocidad era relativamente rápida, otras oías el clic y pensaba que esa foto saldría o movida o borrosa, como si emergiese en el papel desde una cabeza borradora. Hablamos de todo un poco: de su libro de Albarracín, realmente deslumbrante e íntimo, Plossu renuncia a toda espectacularidad, de fotógrafos a los que admira como Nacho López y Héctor García, de su colega Luis Baylón, y hablamos, sobre todo, de la gran exposición que se le va a hacer en el CDAN para abril con un libro-catálogo espectador.

 

Hoy he estado en Huesca en el CDAN, en la inauguración de la exposición ‘Bernard Plossu. País de paisajes’, que recoge un total de 370 fotos, distribuidas en dos formatos: 7 x 11 y 17 x 23, que resumen sus más de dos años de expediciones por la sierra de Guara en compañía de amigos como Antonio Ansón, Paco Grasa (ha escrito un bello e intenso poemario ‘Duerme la caliza’), alumnos de la Escuela de Arte de Huesca, etc. Plossu, en la multitudinaria apertura de la muestra, rindió homenaje a todo el mundo y rompió el protocolo para recordar que entre el público estaba su gran amigo, admirado y conocido en Europa, el fotógrafo Rafael Navarro. Antes, Bernard Plossu tuvo dos magníficos detalles: apareció con un caja llena de fotos de sus amigos oscenses y zaragozanos (a mí me regaló dos fotos nocturnas que me hizo el pasado noviembre en la calle Manifestación) y confesó que estaba enamorado de la sierra de Huesca. De Guara, en concreto.

 

Me pareció enternecedor un detalle de Plossu: casado con una española de Almería, lleva debajo de su chaqueta de pana marrón una suerte de bolsa o zurrón azul, cruzado desde el hombro a la cadera. Le dije si se la sacaba para la entrevista en ‘Borradores’ y dijo que de ninguna manera. Dijo que allí viajaban sus tesoros: usa cámaras de usar y tirar, sus documentos y las fotos de su mujer y de sus hijos. En la muestra hay un vídeo que tiene algo de grabación casera: se ve a Plossu viajando en tranvía, asoma la cabeza por la ventana una y otra vez, y saca fotos. Fotos de coches, de un paisaje de playa, de viandantes.

 

Plossu sigue fotografiando con su Nikkormatt de hace 30 años con un único objetivo de 50 mm. Mientras Yolanda Liesa y la operadora Cristina ajustaban los planos, le preguntaba si le tentaba la fotografía digital. Dijo: “No, en absoluto. Me gusta. Está muy bien, pero yo no pienso hacerla. Me gusta lo que hago: mi fotografía es un documento fiel a la realidad”.

 

1 comentario

Jesús Irigalba Salvador -

Antón total mente de acuardo un Fotografo genial