Blogia
Antón Castro

VIDA, OBRA Y MITO DE PILAR BAYONA

VIDA, OBRA Y MITO DE PILAR BAYONA

[Antonio Bayona y Julián Gómez, arquitecto y bibliotecario, acaban de publicar en las PUZ el libro ’Pilar Bayona. Biografía de una pianista’, una bio-cronología de una mujer fascinante, una virtuosa entre hombres, que sedujo a Camón Aznar, Luis Buñuel, Luis García-Abrines y a muchos otros por su capacidad para tocar el piano, por la variedad de sus programas, por su carisma y porque fue una de las grandes mujeres del 27. En es diálogo, Antonio y Julián cuentan su libro y exploran la personalidad, la vida y la carrera de una mujer absolutamente singular, nacida en 1897 y fallecida, tras ser atropellada por un automóvil, en 1979.]

 

 -A mediados de los 90, o así, recibís el Archivo Pilar Bayona: ¿cómo estaba y qué contenía?

En 1996 muere Carmen Bayona y heredamos el legado familiar. Contenía programas, prensa (críticas y artículos), partituras, fotografías, correspondencia, carteles, dibujos, retratos, títulos, etc. Esta parte documental se quedó al cuidado nuestro (Antonio y Julián). Excepto las críticas y artículos, que especialmente Carmen tenía conservados y pegados en álbumes, el resto eran lotes que hubo que ordenar y organizar.

Obviamente había objetos y muebles que se repartieron entre los tres sobrinos: retratos de Pilar, de antepasados, obra plástica y objetos varios. Esa parte sigue repartida por lo cual algunos retratos son propiedad particular de los otros dos hermanos y no están en el Archivo.

-¿Ya tenía todos los materiales que conserváis o habéis seguido rastreando cosas, buscando nuevos documentos, publicaciones, etc.?

Cuando comenzamos nuestra catalogación y realización de bases de datos de todo el legado, el interés de completar el archivo, o de seguir lo que se publicara sobre Pilar o su entorno, nos hizo rastrear y adquirir algunos materiales. Sobre todo bibliografía sobre su figura, seguimiento de prensa y Concurso Internacional de piano Pilar Bayona -mientras duró-. Luego algunas circunstancias nos hicieron poder hacernos con el original en escayola del busto obra de Rallo, alguna correspondencia de ella a otros en distintas bibliotecas, fotografías que no estuvieran en el archivo, etc., y finalmente obras plásticas que pintores actuales han realizado de ella: Lina Vila, José Luis Cano, Josema Carrasco, etc.

Actualmente la situación económica no nos permite adquirir todo lo que vemos (en Internet o en comercio).

-¿Fue Pilar ordenada, meticulosa, un poco fetichista de lo suyo?

Creemos que fetichista no. Sus padres empezaron a recoger y guardar la prensa y programas, y más tarde entre ella y su hermana Carmen siguieron guardando todo lo relacionado con su carrera. Sin embargo no creemos que ella persiguiera o pretendiera conseguir todo lo relacionado con ella. Guardaron mucho pero con un orden que solo contemplaba la homogeneidad de los documentos.

 

Dicho esto: vayamos con el libro. ¿Qué habéis querido hacer, por qué esa novedad de construir una cronología extendida?

Nuestro intento no contemplaba "estilo" en un principio. Queríamos hacer una biografía seria, veraz y con rigor, y al final ese rigor se manifiesta quizá más en la cronología, que en vez de ocultarla, hemos querido que sirva de guía. Queremos que el libro sirva de consulta para los músicos e investigadores, que se pueda saber cuándo y dónde sucedió algo de su vida, un estreno, un concierto, seguir su repertorio y ampliación de autores, eso sí, rodeado esta vez de su familia, amigos, relaciones, diversiones, etc., que definen su transitar por las 3/4 primeras partes del siglo XX

 

 ¿En qué medida fue Pilar una niña prodigio y cómo impactó en sus primeros años en Zaragoza?

Aunque solo sea por la edad de sus comienzos es indudable que Pilar fue una niña prodigio. Ella no se sintió nunca especialmente preocupada por esa denominación, quizá porque no se quedó en niña prodigio, sino que siguió de adolescente y joven hasta la madurez cosechando los mismos éxitos que en los inicios.

Es obvio que en Zaragoza sí impactó su precocidad y la prensa se hizo eco inmediato de sus comienzos y carrera.

 

Un detalle muy especial fue su memoria: ¿poseía esa memoria prodigiosa que tantas veces se dice? ¿Cuánto le podía costar asimilar y aprenderse un programa?

Sí poseía esa memoria prodigiosa para lo musical. Realmente sus dotes para la música fueron claras desde un principio. Su inquietud le llevaba a leer y estudiar toda obra pianística que se pusiera a su alcance, y más tarde tenía la facilidad de retener en la memoria (de la cabeza y de los dedos) todo. Obviamente la obra de los clásicos la conocía toda, aunque en caso de concierto estudiara más concretamente pasajes o partes complicadas, o difíciles de mantener en la memoria (como la obra de Esplá, que ella tocaba mucho y es particularmente difícil de memorizar).

Recordemos que ella misma decía que, por ejemplo en 1936 en su estancia en Madrid, se pasaba la tarde tocando y tocaba todo lo que le pedían. Lo mismo sucedía en sus veladas en casa de Urgoiti, y después de sus conciertos, si la ocasión se daba.

No podemos contestar lo que le costaba preparar un programa, pues posiblemente en él introducía cosas ya sabidas con otras más recientes o nuevas.

 

¿Cómo podemos evaluar su primera época, hasta que va a Madrid, qué cosas merecen destacarse?

Aunque era muy niña o joven su primera época quizá pueda evaluarse como de aprendizaje y estudio, de obediencia a los hermanos Sirvent, sus profesores, pero también de apertura ante toda ocasión que se le brindaba: Tomás Bretón, Usandizaga, Fernández Arbós, Ricardo Villa, le proporcionaron ocasiones de tocar en Madrid, San Sebastián, etc.

 

Pilar tuvo un don y algunos maestros. ¿De quién aprendió en realidad?

Como ya se sabe fueron los Hermanos Sirvent, primero don José (pedagogo y músico) y luego Ángeles, que era más pianista, los únicos profesores que tuvo. No fue a ningún conservatorio o academia. Es de suponer que aprendería de todo lo que oyera o le dijeran estos amigos músicos importantes u otros que pasaran por Zaragoza, pero en aquellos tiempos las grabaciones eran escasas, y no cabe duda que puede llamarse autodidacta.

 

¿Por qué, pensáis vosotros, ejerció tanta fascinación sobre tantos hombres?

Era una mujer que no se presentaba como las otras. De entrada era una profesional reconocida, su trato con músicos varones era abierto y de igual a igual. No cabe duda que su físico era atractivo -era cuidadosa con su estética- y tenía también cierto magnetismo y tenía una mirada clara y penetrante.

No podemos hablar directamente de la primera mitad de su vida, pero de los años sesenta en adelante era una mujer abierta, simpática, activa, pero también directa, "y no toleraba la mezquindad ni la estulticia" como escribía Luis Horno.

 

 

Más allá del mito y de los lugares comunes, ¿quiénes de verdad perdieron la cabeza por ella? Lo digo porque algunos le propusieron matrimonio.

Documentalmente se sabe del amor nunca declarado a ella de Luis Buñuel, de la proposición de noviazgo de José Camón Aznar, y del impetuoso enamoramiento de Ernesto Quesada (director de casa Daniel). Por supuesto también su novio Manuel Casanova.

Según su prima de México, Concha de la Torre Bayona, Luis García-Abrines llegó a proponerle matrimonio, pero no hemos encontrado documento o carta con alguna referencia. Luis la adoró, pero por su diferencia de edad puede que no llegara a proponerle algo, ni creemos que Pilar pensara en él como un enamorado o pretendiente.

 

¿Cómo son sus epistolarios con sus enamorados?

No se conserva borrador o copia de las respuestas de Pilar a las cartas de los enamorados. El enamoramiento de L. Buñuel se conoce por sus propias declaraciones a Max Aub; la carta de Camón es un prodigio de fineza, elegancia y educación, y las de Ernesto Quesada en 1915 son una declaración pasional de enamoramiento, incluyendo proposición matrimonial. En sus segundas o terceras cartas Quesada ya ha recibido lo que debió ser una clara negativa, y se resiente de ello y se retira.

Hay una correspondencia muy íntima y personal de Carlos Baena, violonchelista, en la que se aprecia intimidad con Pilar, pero no hay obviedad de sentimientos amorosos. Más equívoca es la correspondencia de Bernardino Gálvez Bellido, también violonchelista, en la que hay distanciamientos temporales y frases más confusas.

 

Conmueve, por ejemplo, la relación con Usandizaga. Parece un enamorado clarísimo, ¿no?

Eso deducía Sopeña de sus cartas. Realmente son muy tiernas y cariñosas, pero siempre mantienen la corrección de la época, y no podemos decir si Usandizaga realmente tuvo algún tipo de enamoramiento. Cuando fallece José M.ª Usandizaga su hermano Ramón continúa en contacto con Pilar y le envía partituras de su hermano y le dice lo que José M.ª la admiraba.

 

¿Cómo fueron sus giras por Alemania? ¿Dio ahí la medida de su ambición?

Fueron un hito, pero no creemos que para su carrera. Vistos ahora son claramente la demostración de un camino personal, un interés por enseñar la última música española, a pesar de una posible pérdida de éxito.

Por otra parte, el viaje para ella fue una gran ocasión, conectó con varios músicos, y sabemos que lo pasó muy bien.

 

¿Qué tipo de pianista fue Pilar Bayona, a quién la podríamos comparar, entre los actuales o sus contemporáneos, cómo podríamos definir su repertorio?

Creemos, y coincidimos con ello, que ella estaría más o menos de acuerdo si la comparamos con Rubinstein. Era una pianista de gran técnica que parecía no esforzarse, y de una interpretación sentida y acorde con cada autor, pero poco gestual en el escenario.

Pilar tenía un gran repertorio, memoria y facilidad, y era muy intuitiva. Prevalecía su interpretación, su idea de la obra, sobre el cuidado o dificultad . Pueyo era un gran pianista, estudioso, analítico y concienzudo en su interpretación, y un gran maestro y profesor. Galve era un pianista elegante, ágil, limpio, quizá con menos repertorio.

El repertorio de Pilar estaba basado en la interpretación de los grandes, mezclada con todas las novedades que le gustaban. Dio a conocer la música francesa y la española de su época, en cierto modo continuadora de la labor de Ricardo Viñes.

 

¿Qué relación tuvo con García Lorca?

Hemos buscado mucho, pero parece ser que no se conocieron en persona hasta 1936, aunque Federico frecuentaba los mismos ámbitos y amigos que Pilar (Salazar y Sánchez Ventura, por ejemplo). Era también amigo de José Ignacio Mantecón y Concha de la Torre, prima de Pilar, y parece raro no coincidieran en algún sitio.

Por los recuerdos y comentarios de Pilar, en esa estancia de unos meses en Madrid en 1936, debieron verse con frecuencia. La dedicatoria de "Llanto.." demuestra que Lorca la conocía ya bastante, al menos como pianista, y los textos que se conservan de aquella época informan de una costumbre habitual de acudir a la Residencia a escucharla, y solicitarle distintas interpretaciones, entre ellas alguna de Federico. Pilar también comentaba el atractivo, capacidad de emoción, viveza, del trato del poeta. Se conoce también la asistencia de ambos a conciertos.

 

Me ha sorprendido que en 1938 firme su contrato con Radio Zaragoza. Era algo más que la pianista, era la directora de la programación musical, en buena parte.

En efecto, Luis Aula era el encargado de la música Sinfónica y Pilar de la de cámara y piano solista.

¿Qué significaron para ella los viajes a Marruecos?

Creemos que los hacía con bastante placer. Llegó a hacer amistad con los directivos de las sociedades musicales y dio recitales muy interesantes, incluyendo conciertos con orquesta. Tenía también el aliciente de encontrarse con su amiga Julia Echenique, su marido el General Galera, y sus hijos que eran casi sobrinos para ella.

 

¿Y el grupo Sansueña?

Se creó como una filial de la Filarmónica para ofrecer música moderna, infrecuente o de cámara, que no entraba en los habituales programas de esa sociedad. Los mismos fundadores decían que su alma era Pilar, y ella colaboró con varios conciertos, todos interesantes.

¿Por qué se conformó, en los últimos tiempos, en ser esencialmente una pianista zaragozana? ¿Le faltó vuelo, ambición?

Quizá. A ella le importaba su música, seguir tocando (como le decía a Horno en 1947), y se encontraba cómoda viviendo en su ciudad, con su hermana, en contacto con su familia y amigos. Aunque nosotros mismos titulamos su última década "Siempre en Zaragoza" hay que aclarar que lo decimos en ese sentido de fidelidad a su tierra, pero no porque no siguiera con sus giras, a pesar de la edad, pues desde 1970 hasta 1979, cuando fallece, ofreció conciertos en 28 ciudades distintas, sin contar repeticiones.

 

¿Cuál es la lección definitiva de Pilar Bayona, por qué es importante acercarse a su biografía?

Para conocerla. Hace 36 años que falleció y el público actual ya no conoce su vida y hechos. Los libros sobre ella y discos están descatalogados y casi no se encuentran excepto en compras on line en webs especializadas. Obviamente tiene interés para los jóvenes músicos zaragozanos o aragoneses, que cuando han venido al archivo se han emocionado oyendo alguna grabación o viendo su documentación y programas. También tiene interés para investigadores que deseen saber de su entorno o estudien alguno de los personajes relacionados con ella.

 

¿Qué pensáis que era lo mejor que tocaba?

Debussy, Ravel, Franck, Albéniz, Falla, Esplá... sin olvidar su Schumann, Brahms y muchos otros

¿Qué se sabe leyendo el libro de lo que no se sabía nada o muy poco?

Hay que comprarlo y leerlo. Hay bastantes cosas poco sabidas, unas con interés artístico o personal, y otras quizá con menos trascendencia pero que demuestran el humor, la viveza, la actividad que Pilar desarrollaba en su vida.

 

Me ha parecido que Carmen Bayona, su hermana, es una mujer muy especial y enigmática. ¿Qué significó para Pilar?

Mucho. Su compenetración y convivencia durante tantos años les daba una mutua seguridad y apoyo. Carmen, que vivió desde pequeña la carrera de su hermana y las vivencias de la familia, de su hermano Julio también, era una gran música, no especialmente intérprete, aunque tocaba piano y guitarra, y su conocimiento y apoyo era importantísimo. Si no fuera por lo difícil que es siempre una convivencia continuada (sea la relación que sea), sin sus lógicos enfados y tropiezos esporádicos, podría decirse que Carmen veneraba a Pilar. Por otra parte Carmen era tan independiente y activa como Pilar y resolvió su vida laboral desde muy pronto, lo que les daba una autonomía propia.

 

*Pilar Bayona vista por Gustavo Freudenthal.

 

0 comentarios