YA SÓLO LLORAN LOS NIÑOS. Por LUIS ALEGRE
Se ha presentado, por fin, “Cuentos a patadas. Historias del Real Zaragoza”, un libro donde 21 escritores y 21 ilustradores rinden, cada uno a su manera, un tributo al Zaragoza. El volumen, una preciosidad total, ha sido coordinado por Félix Romeo y arropado por Antón Castro, el director de la ya clásica exposición “Los años magníficos”. Digo que se presentó por fin porque el libro salió del horno hace ya cuatro meses pero aún no le había llegado el momento. Cuando al consejero José Luis Melero, impulsor clave de la iniciativa, yo le preguntaba en marzo, abril o mayo por la presentación siempre me decía: “Lo mejor es esperar a que aseguremos la permanencia”. No parecía muy oportuno celebrar la puesta de largo de un libro así en tiempos de tanta zozobra. La idea era, en realidad, festejar las dos cosas a la vez: la alegría del libro envuelta en la alegría de haber sobrevivido en Primera. Así que, como se puede sospechar, la presentación del otro día, aunque bonita, estuvo marcada por una cierta melancolía, por un sordo suspiro por lo que pudo ser y no fue. El consejero Fernando Zamora me confesaba cómo sus hijas aún no se habían repuesto del berrinche. Y, entonces, me acordé de las dos noches de mi infancia en las que no hice más que llorar por los dos descensos del Zaragoza de los 70. Y reparé en que ni en 2002 ni en 2008 había derramado una sola lágrima. Y pensé en lo hermoso que sería recuperar a veces esa manera de llorar que sólo tienen los niños.
*Este artículo de Luis Alegre aparecía el martes en su columna semanal de As, cuya edición aragonesa dirige Pedro Luis Ferrer. La ilustración es de Chema Lera para el cuento de Javier Tomeo.
1 comentario
Blanca -
Qué grande fue la tarde de la presentación. Cuanto talento junto!!! :)