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Antón Castro

UN AMOR TRAS LA ODISEA

UN AMOR TRAS LA ODISEA

Hoy he entrevistado a un tipo extraordinario, Víctor, que era marino en el petrolero Urquiola que explotó en A Coruña hace casi 30 años. Antes de llegar al puerto, sólo pensaba en una cosa: tras 68 días de navegación ininterrumpida, sólo deseaba encontrarse con una joven madrileña que le parecía tan guapa como Rita Hayworth. Encuentro esta foto tan marina, tan sugerente, y la pongo aquí para los admiradores de esta magnífica actriz, cosida aquí al timón de la vida.

3 comentarios

Manuel Segura -

Querido Antón:

Es un placer abrir cada mañana tu blog y leer cosas como la que escribiste ayer.
También contemplar las fotos que insertas con tanto gusto y delicadeza.

Te sigo.

Un fuerte abrazo desde Murcia.

javier delgado -

Queridísimo Antón: es lamentable que la chiquilla esa que se ha colado en la foto dificulte la visión del bonito timón marino, inculo tape descarada y seguramene ignorantemente uno de sus bien torneados radios. ¡Y encima se permite tocar con sus manos, en impropias posturas que no llevan a nada, lo que no debe. Al Capitán Acab no le haría ninguna gracia. La arponearía sin fijarse mucho y seguiría tras la pista de la ballena blanca que ésa sí que ssabe lo que es un barco y un timón y la vida dura de los marineros de verdad. Decididamente, la chica esa es un mal ejemplo. Te aprovechas demasiado de la libertad de expresión que ya ese otro gallego (además del otro gallego) nos regaló magnánimamente. Pero todo tiene su ya lo sabes tú. No es un aviso pero como si no lo fuera. Besos espumosos.

Toni -

Las circunstancias te siguen llevando a las bellezas del cine clásico, jejeje. Precioso tu anterior post. Muchas madres pasan auténticas odiseas y todavía hay quien las olvida o ignora.

Un abrazo