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Antón Castro

JOSÉ MARÍA PÉREZ COLLADOS LEE Y COMENTA A JORDI CANAL

[Jordi Canal tiene una doble actuación hoy en Zaragoza. A las 17.00 da una conferencia sobre Cataluña en la Facultad de Letras y a las 19.30, en la librería Cálamo, presenta su nuevo libro: 'Historia mínima de Cataluña' (Turner) en compañía de José-Carlos Mainer, Pedro Rújula y Antón Castro. La pasada semana 'Artes & Letras' publicaba esta reseña del profesor, editor y escritor José María Pérez Collados.]

 

CATALUÑA: CONTAR SU HISTORIA CON NORMALIDAD

 

Por José María PÉREZ COLLADOS

 

Jordi Canal, Historia Mínima de Cataluña, Turner, Madrid, 2015.



Podría parecer fácil contar lo que pasó, pero no lo es. Quizás porque la Historia se parece mucho más a la literatura de lo que habitualmente se piensa.

En demasiadas ocasiones, la Historia que leemos tiene mucho que ver con la nostalgia. Y eso no es bueno porque, aunque duela reconocerlo, en el fondo todos sabemos que aquello que recordamos con nostalgia no se parece mucho a lo que verdaderamente sucedió. Eso que perdimos con dolor termina por sublimarse en nuestro recuerdo, acaba convirtiéndose en un mito, en una leyenda de nosotros mismos. En algo que hubiéramos debido ser, que nos hubiera gustado ser, que no aceptamos no haber sido. Por eso la Historia nostálgica consuela, porque nos devuelve nuestras frustraciones cumplidas.

De alguna manera, estas consideraciones podrían describir a la historiografía sobre Cataluña de los últimos tiempos. Ello es así hasta el punto de que un conocido historiador (García Cárcel) ha llegado a afirmar, certeramente, que este país está, literalmente, enfermo de pasado.

La Historia mínima de Cataluña del profesor Jordi Canal rompe con esta tendencia. Excelentemente bien escrito, su libro pretende y consigue narrar la historia de Cataluña con rigor y en no más de trescientas páginas: comenzando por una Cataluña que aún no era (un territorio paleolítico) y hasta el año 2014. El texto no elude ningún asunto relevante para los catalanes de hoy, la senyera (bandera de Cataluña), els segadors (el himno), la lengua catalana, la relación política de Cataluña con el reino de Aragón o con la Monarquía Hispánica, la Diada (fiesta nacional de Cataluña), el significado político de la Guerra de Sucesión, el nacionalismo catalán durante el siglo XIX, la figura del President Companys, la Cataluña de la Guerra Civil y del Franquismo, o la Cataluña de la Transición y la creación de su régimen autonómico.

Si un historiador se presentase con la intención de desvelar la verdad lo consideraríamos un ingenuo (o algo mucho peor). No lo es el profesor Canal. Lo que él pretende (y consigue de largo), son dos cosas: la primera, escribir un libro que se lea con interés, con curiosidad creciente, con satisfacción por lo que aporta. Lamentablemente, todavía hay hoy en día historiadores que parten de la base de que sus textos, para ser científicos, deben ser difíciles, poco menos que inexpugnables (de ahí que suelan estar tan mal escritos).

Lo segundo que pretende el profesor Canal no tiene que ver tanto con lo que se dice (los hechos históricos que analiza), sino desde dónde se dice. Y me explico. Canal se sitúa al margen de proyectos políticos, comprometido con el oficio de historiar, consciente de que esta profesión tiene sus límites, pero también de que contiene unas enormes posibilidades para generar consensos sociales. Y en ese momento, cuando le toca decidir la posición desde la que narrar Cataluña se fija, sobre todo, en un maestro, Agustí Calvet (Gaziel), un hombre que supo aunar el oficio de historiador, de periodista y de escritor, un intelectual que resultaría incómodo tanto para el nacionalismo catalán como para el franquismo de su tiempo, un liberal que dejaría inédita en vida su consideración histórica sobre Cataluña, Quina mena de gent som. Quatre assaigs sobre Catalunya i els catalans (Qué clase de gente somos. Un ensayo sobre Cataluña y los catalanes), un escritor complejo, inclasificable, honesto.

Son otros tantos los autores a los que Canal acude a lo largo de su andadura, Vicens Vives, Chaves Nogales, Jacques Le Goff. Acude a estos y otros maestros buscando un lugar desde el que mirar, porque la perspectiva es un condicionante, la objetividad no existe. Pero el mirador de Canal es siempre inteligente y humanamente complejo, nunca patriótico ni sometido a uno u otro interés político.

Especialmente arriesgados son los epígrafes finales del libro porque son páginas de evaluación de unos tiempos que nos alcanzan, que nos atañen, y el autor no huye del riesgo, no se esconde, y expone su opinión.

A mí me han resultado muy interesantes las páginas en las que describe las líneas maestras de la cultura catalana de los últimos cincuenta o sesenta años: la nova canço, la rumba catalana, la poesía, los novelistas, los articulistas…, y ello sin eludir, en ningún caso, detalladas listas de nombres que llevan aparejadas (no puede ser de otra manera), listas de excluidos de la cita… .

De entre este cúmulo de nombres y obras fundamentales que apunta Jordi Canal, yo destacaría tres: la memorable novela de Joan Sales que narra la crisis de la República y la Guerra Civil, Incerta Glòria; el inolvidable maestro de la rumba catalana: Gato Pérez. Y un poeta, Martí i Pol, del que no me resisto a copiar un verso que, por lo que sea, prefiero no traducir:

Distant com ets, i ja irrecuperable, no deixaràs d'acompanyar-me sempre





José María Pérez Collados

1 comentario

Pablo Rodríguez -

Anton, soy Pablo de IDEAL. Nos conocimos en el último Planeta. No pude despedirme de usted al final, pero quiero decirle que es lo mejor que me ha dejado el premio. Si algún día baja por Granada, tiene mi correo. Avíseme. Le mando un fuerte abrazo.