JAVIER QUIÑONES Y SU 'POÉTICA DEL BLOG'
Seguramente, si nos viéramos ahora ni nos conoceríamos porque hace mucho tiempo que Javier Quiñones no nos vemos. Javier Quiñones es un estupendo escritor, buen conocedor del universo de la Guerra Civil y uno de los estudiosos de la vida y la obra de José Ruiz Borau, más conocido por José Ramón Arana, que nació aquí en Garrapinillos. Sigo a Javier con atención y hace días que quería invitar a los lectores a conocer su pulcro y elaborado blog: http://jquinyonesblog.blogspot.com. Acabo de leerlo de nuevo y veo que en portada tiene un texto que se titula ‘Poética del blog’. Lo cuelgo aquí, lo link con todo mi afecto y mi admiración, y le cambio la foto, aunque la suya, estupenda, sea del Moncayo.
POÉTICA DEL BLOG
Por Javier QUIÑONES
Si saber callar a tiempo parece para los tiempos que corren la única poética razonable, el blog es el silencio y también la soledad. En las páginas del blog, siempre volanderas y virtuales, no hay más editor que el autor mismo. Es este quien da forma, cuerpo, entidad y diseño a las entradas que lo conforman: las clasifica y etiqueta, las ordena y las retoca, las ilustra y las publica cuando le viene en gana; el blog se convierte así en un espacio idóneo para ejercer la libertad personal. El blog se va conviertiendo, a medida que se desarrolla y cobra densidad, en una manifestación de la personalidad de su autor. No pocas veces se tiene la impresión de que las entradas de un blog se parecen cada vez más a las páginas de un diario personal. El blog es un género en sí mismo y como todos los géneros posee unos límites difusos y sus fronteras son permeables e imprecisas.
¿Qué clase de género es la del blog? Se trata de un género ambiguo, de difícil clasificación. Es un género híbrido, ya que combina la palabra y la imagen. El blog es capaz de albergar tipologías textuales diversas: desde textos argumentativos hasta descriptivos, dialogados, informativos, narrativos... Al blog parece sentarle bien la brevedad, textos que se puedan leer en una visita rápida, como suelen serlo la mayoría de las que se hacen, porque hay muchos blogs interesantes y no es cuestión de demorarse demasiado en uno y dejar de visitar los demás. En ese sentido, el género breve tiene buena acogida en el blog: el poema en prosa, el microrrelato, los aforismos, las fábulas, la poesía, etc., que se convierten así en subgéneros del blog, que los englobaría a todos. Del mismo modo, el blog se presta bien a acoger las entradas de los dietarios personales, siempre que el autor esté dispuesto a compartirlas con los lectores que decidan visitar su bitácora. Las fotografías, dibujos, grabados y otras imágenes que ilustran las entradas facilitan, o deberían hacerlo, la lectura; en cualquier caso, hacen más atractiva su presentación.
¿Por qué y para qué se crea un blog? Existen múltiples razones, pero creo que la principal es porque alguien sienta la necesidad de hacerlo. El blog se crea para mostrar lo que se escribe y para comunicarse con los demás, con aquellos navegantes de la red que decidan libremente visitar la bitácora y detenerse un espacio de tiempo en ella, si es posible con un viento sosegado y una mar en calma. Cuando el blog es de autor, no deja de ser una forma de edición electrónica (virtual, por tanto) de lo que se escribe y se crea. El blog literario es, pues, una nueva forma de difusión de la creación literaria. El carácter misceláneo del género, dar cabida a muy diferentes acentos creativos, es una de sus notas distintivas, tal vez su principal seña de identidad. El blog, por último, debería ser comunicación, esto es, estar abierto a entablar diálogo con quien a las páginas que lo conforman quiera asomarse y dejar su comentario. El blog supone un contacto directo e inmediato entre autor y lector y esa facilidad que da el medio no debería desaprovecharse ni malbaratarse con usos espurios e inadecuados.
El blog, en definitiva, es lo que uno quiere que sea. (Este es un dibujo original de Patti Smith).
3 comentarios
Javier Quiñones -
carmen -
Tomás Rodríguez -