POEMAS DE EDUARDO MARTÍNEZ CARNICER; FOTO: GABRIELA HERMAN
El poeta Eduardo Martínez Carnicer me envía algunos de sus poemas inéditos. Martínez Carnicer fue el ganador del premio de poesía de Benasque de 2010. Alterna la poesía y el verso y posee una personalidad acentuada: construye, posee un mundo, y a menudo es trangresor. Reside en Huesca. Las fotos son de Gabriela Herman.
Autorretrato de Gabriela.
PERFUMES
Aperece y desaparece
lejos de mi memoria
como una sirena errante.
Se esconde de mi lujuria
cual pez en celo.
Las páginas que desvela
son cachalotes de hielo
perfumes, pijamas, susurros
vientos del olvido.
La llave se la guarda
la cerradura se abre
en mis pesadillas
en su deseo frío
en países sin mapa
en la verdad de las mentiras.
VOCES
En las derrotas dulces
en perder por goleada
está el aprendizaje
el aroma de la vida.
Los hay que no aprenden
que se quedan en el patio
que fracasan en el intento.
En las derrotas dulces
saboreas la fruta madura
la voz de la experiencia
los dientes de azúcar.
BOLSILLOS
El cielo cerrado, los paraguas sin abrir
Un mendigo bosteza en un banco
Los atletas apuran las horas
En el parque una joven habla por el móvil
Imagina que por un día no sonaran los móviles
Imagina que nadie hablara solo por la calle
Dicen los psiquiatras que hablar solo no es de locos
Que sólo por hablar solo no estás loco
Se sabe que la locura se disimula
Un día sin móviles es un día de abstinencia
Un día con las manos en los bolsillos
Un día sin risas de una joven que pasea con el móvil
Un atardecer de primavera con el viento adormecido
Como el mendigo que bosteza en el banco
Con los paraguas cerrados, como los móviles
Un atardecer anodino y cansino
Con la lluvia demorada
De un mayo raro, susurrante
Sin móviles, con las manos en los bolsillos.
CRECER
La felicidad es un traje prestado
Una sombra alargada
Una gota para el sediento
La camisa azul y el vaquero desteñido
El bikini rosa de mi memoria
Una mano que se aproxima
Un pinchazo en la rutina
Una caricia a destiempo
Un susurro potente
Un beso inesperado
La página menos leída
La voz que me guía
Manantial de somníferos
Amapola ondulada que crece
Nenúfares
Recuerdos.
SU DINERO, GRACIAS
Les sienta mal el cajero
A los pobres
A las prisas
¿A los poetas?
Cuando tecleas el Pin
La cámara te vigila
Flotas como un astronauta
Desconfías del pestillo
Los segundos se alargan
Espere, por favor
No olvide su tarjeta
No olvide su dinero
Vuelva cuando quiera
Deseas arrugar los billetes
Te apetece contestarle al cajero
Dejar tu voz donde duermen los mendigos.
DIENTES DE AZÚCAR
Despierto entre susurros, rodeado de sombras. Las voces que me acompañan proceden del pasado, de un tiempo no vivido. Escenas poliédricas, capítulos por desvelar. En un bosque sinuoso se refleja mi trasunto, los fantasmas que me pueblan. Caricaturas del futuro, esfinges. Prismas sin aristas, esferas irreales, monstruos por descubrir. Destellos de luz en un espacio opresivo. Un niño juega en el patio. Un patio oscuro, la aurora de un día nublado. Una primavera de tormenta, un salón de lámparas fundidas, un beso robado, la estufa apagada, la tele gigante. Dolor de dientes, la anestesia, las pastillas, el flemón, la beldad del dolor. El bosque me espera. La noche está por llegar.
4 comentarios
Isabel -
Eduardo! -
si no es molestia tambien tengo un blog con mis poemas!
http://poemaseduardomartinez.blogspot.com/
no lo hago con la intencion de quitarte prestigio ni nada! pero como bien sabes los artistas vivimos del publico!
Eduardo -
Sí me gustó la portada de mi hermana.
gonzalo villar -