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TALLER DE TV CON COPI EN DIRECTO

Esta mañana en Buenos Aires ocurrio algo muy hermoso. Impartia un taller sobre la realización de un programa de televisión inspirado en nuestro trabajo en Borradores, de Aragon Television. En la primera sesión, en la que participaron mas de una veintena de alumnos –periodistas, escritores, profesores como Ana da Costa que ha editado una entrevista con Hector Tizon, editores, profesionales de la tele…- hablamos de las claves de nuestro programa, de cómo se produce, del concepto general, mostramos varios videos, uno de Lila Downs, otro de Fernando Trueba, otro de un programa general con actuaciones, etc. Esta mañana, pasamos el viaje al taller de Isidro Ferrer, que digirió Yolanda Liesa, pasamos el reportaje sobre Maria Pilar Martinez Barca y algunas otras cosas. Y luego realizamos un programa en directo. Una alumna, Margarita, trajo su cámara, y contamos con un invitado especial, Copi. Realizamos una entrevista, recorrimos su trayectoria –sus años en Infanticos del Pilar, la relación con sus padres y el descubrimiento de la música, el paso al rock, su colaboración con Heroes del Silencio, la década de trabajo y viajes y experiencias con Enrique Bunbury…-, y los alumnos disfrutaron de manera increíble. Fue un acto verdaderamente mágico. Copi recordó al equipo de Borradores, especialmente elogio el trabajo de realización de Teresa Lazaro, el clima de cariño y complicidad y respeto de todo el conjunto, y estuvo sembrado. Fue cercano, apasionado, sincero, incluso se comprometió en asuntos sociales, como su visión de la política o de algunos temas polemicos como la religión.
Algunos alumnos le hicieron varias preguntas. Copi cerro la entrevista, mas de una hora, bellamente grabada y muy bien recogida por micrófonos de ambiente por el equipo de sonido del Centro Cultural de Espana en Buenos Aires, con una sorpresa. Canto a pelo, con esa pasión y hondura que le caracterizan, un tango de Discepolo. Los compañeros no se lo creían. Fue un momento extraordinario, pleno de emoción, de sensibilidad, de fuerza y de integracion de un artista español con Argentina. Pasamos una parte de la entrevista y la canción, y volvimos a vivir ese regalo del azar y del talento. Cambiamos un poco el programa, pero el instante había valido la pena.
Copi es asi. Buenos Aires es asi y huele, tras la tormenta, a Paris. Copi, por cierto, tenia esta tarde una reunión porque va a hacer un programa quincenal de música de una hora y media, y esta rabiosamente feliz.
Mil gracias muy de veras a toda la gente tan acogedora de Buenos Aires, con Ricardo Ramon a la cabeza, con Mercedes Alvarez, con Jose Gomez, el bibliotecario, con Nara, con Guillermo Piro, con Sebas el conductor que oye opera… La lista se haría interminable. Uno de los detalles mas curiosos sucedió ayer en la charla de por la tarde sobre la literatura del mar. Maite, una profesora de La Plata, tomo el autobús y vino porque había leído un articulo mio sobre Manuel Vicent que se había publicado en un cuadernillo del ciclo Invitacion a la Lectura, que dirige Ramon Acin, y acaba de publicar una monografía completa sobre la obra del escritor y periodista valenciano. Le correspondi con una revelación que ella no tenia porque saber. Me dedico al periodismo fascinado por un libro de Vicent, aquella seria de Inventario de otoño que apareció en El Pais.
Acabo de llegar a Lima, desde donde partimos mañana hacia Espana. Y aquí también hemos sido muy bien acogidos por May Rivas, por Miguel Angel, por los taxistas, por el Hotel Antigua, por los alumnos del taller. Al llegar al hotel, teníamos varias regalos del Miguel Angel, jefe de prensa y periodista de radio y televisión durante anos, y también excelente fotógrafo. Me ha dejado un libro sobre un cementerio, con estupendas fotos, pero de eso hablaremos mas tarde, mañana.
-En este ordenador se descontrolan los acentos. Los que aparecen los inserta automáticamente el ordenador, porque yo no se como colocarlos. Javier Corellano, Copi, se llama asi porque uno de sus siete hermanos, eran ocho en total, recibio de regalo una bicicleta y en Borja lo llamaban Copi, como el campeon italiano Fausto Coppi, que nacio en 1919 y murio, en misteriosas circunstancias, en 1960, tras haber ganado dos Tour y cinco Giros. El nombre del hermano acabo siendo el apodo y el nombre artistico de Javier Corellano.
CECILIA DE VAL: CONTAR CON LA LUZ

Cecilia de Val ha irrumpido en la fotografía casi como una aparición deslumbrante. El pasado verano exhibía en la Casa de la Mujer la serie ‘Nunca te prometí un jardín de rosas’, que ella misma protagonizaba. Sus fotos, de gran formato y elaborada puesta en escena, abordaban la búsqueda de la identidad. Todas tenían un aire de cuento de hadas, con una pulsión inquietante de misterio, fatalidad y poesía. Esa muestra no pasó inadvertida: poco después Cecilia de Val, que también es cantante de rock and roll con su compañero Yann Leto, ganaba el premio ‘Isabel de Portugal’, con un trabajo que invocaba el bosque, Caperucita Roja y la región de los sueños. Fue reclamada de Madrid e incrementó la variedad y la hondura de sus series. Ahora, en Spectrum Sotos, la zaragozana ofrece ‘El otro reino’, una exposición espectacular de grandes formatos sobre la relación entre los seres humanos, la naturaleza y los animales. Cecilia de Val usa mando a distancia y temporizador y tiene alma de actriz. Ella misma, en la mayoría de las fotos, vuelve a ser la protagonista de un conjunto de imágenes simbólicas, de gran belleza e impacto, que tratan temas eternos: el miedo, la vacilación, la soledad, la muerte, el enigma. Sus obras son rotundas, sugerentes, invitan a soñar, estremecen el ojo al primer golpe de vista, y hacen pensar en los mundos fantásticos de Lewis Carroll, de Borges, de Cortázar, de Poe o de Kafka. Y en el poeta y pintor William Blake, soñador de tigres al acecho. Hacen pensar en los bestiarios. Su estética ofrece parentescos con Jeff Wall, Gregory Crewdson o Ellen Kooi, cuya galería ya le ha invitado a exponer. Hacía tiempo que en Spectrum no se veía algo así. Julio Álvarez ha elegido una fotógrafa poderosa y distinta, un mundo, una sensibilidad para celebrar sus treinta años de pasión por la luz: Cecilia de Val.
JOAQUÍN BERGES: UNA ENTREVISTA CON EL NARRADOR

¿De dónde sale el escritor Joaquín Berges?
De un joven que comenzó los estudios de ingeniería y a los 4 meses de acudir a clase diariamente se dio cuenta de que se había equivocado completamente de orientación. Al año siguiente comenzó a estudiar Filología Hispánica y comprendió que la vocación, en este caso literaria, es un poderoso embrujo muy difícil de evitar.
¿Cómo lo llevabas tan en secreto? Me han dicho que solo tu mujer, que además es tu primera lectora, lo sabía…
Lo sabía mi mujer, mi hermana y algún amig@ cercan@. No he querido crear falsas expectativas a mi alrededor. No he querido comprometerme. He preferido concentrar mi esfuerzo en mi labor literaria. Ese secretismo me ha conducido a una operación "salida del armario" que se ha completado esta misma semana.
Además de mi primera lectora, mi mujer ha sido mi correctora y mi crítica más implacable. Su colaboración ha sido determinante. Es una gran lectora y tiene mucho criterio tanto literario como lingüístico.
Cómo surgió ‘El club de los estrellados’
Como la reivindicación de unos personajes habitualmente secundarios que aspiraban a ser protagonistas. Quería contar la historia de dos perdedores que perseguían dos sueños aparentemente distintos, que al final resultan ser el mismo. Me interesaba la vida de dos noctámbulos, desparejados, solitarios y silenciosos personajes que se embarcan en dos aventuras para ellos trepidantes, en los bajos fondos urbanos uno y en un hospital el otro, guiados por el faro que alumbra todas las aventuras trepidantes: el deseo.
¿Por qué la mandaste a Tusquets precisamente?
No puedo ocultar mi admiración por esta editorial. Sigo con entusiasmo la obra de Almudena Grandes y Luis Landero, entre otros autores nacionales. De sus autores traducidos me gustan Murakami, Irving, Grunberg... Creo que es una editorial con un catálogo de mucho prestigio.
Te vinculan con David Lodge y se da la casualidad de que lo conoces, que te escribes con él. ¿Cuál es el influjo real que tiene en ti y qué relación tenéis?
David es amigo mío -electrónicamente hablando- desde hace más de 10 años. Jamás nos hemos visto, pero nos escribimos con regularidad. Ha sido un apoyo y una referencia constante para mí. Su obra es admirable. Sabe conjugar lo cómico con lo emotivo y lo académico y lo filosófico y lo neurótico y lo literario. Es sin duda una gran influencia a la hora de hilar tramas y crear ritmo narrativo. Hay un epígrafe suyo en la novela a modo de pequeño homenaje. Lo elegimos entre los dos.
Vayamos directamente con el libro: Narras la historia de un cartero feo feísimo y solitario, que cultiva el fetichismo sexual…
Es un desparejado sin opción a emparejarse. A él le gustaría contemplar la lencería sobre un cuerpo verdaderamente femenino, pero como esa opción es inviable acaba por ponérsela él mismo mientras se mira en un espejo. Es patético y a la vez conmovedor. Y además ese fetichismo es el motor que lo lleva a abandonar su rutinaria vida y adentrarse en los secretos de la plaza de Santa Isabel. Todo ello siguiendo además su intachable vocación de cartero, porque él pretende entregar un misterioso sobre que le han dado en un calabozo.
Hablemos del camarero y narrador de la historia: amigo de Francho, enamorado cada vez menos secreto de Hortensia.
El camarero es el verdadero astrónomo. Un tipo acostumbrado a disfrutar de la belleza del firmamento simplemente mirando a través del ocular de su telescopio. Puede ver, pero no puede tocar. Y así encara su relación con Hortensia, como si ella fuera otro objeto estelar de los que admira a través de su telecopio. Por eso es el narrador, porque observa pero casi no participa. De hecho, es el único personaje que acaba como empezó. Todos los demás sufren una metamorfosis. Todos menos él. Incluso yo mismo, que he "salido del armario" delante de amigos, familiares y compañeros de trabajo, he sufrido mi particular metamorfosis.
Hortensia es el centro de todas las atenciones. ¿Cuál es su papel? También es una activadora de historias del pasado, sobre todo con la aparición de Armando.
Hortensia es el sueño que persigue el camarero-observador, pero a cambio de dejarse observar por él, ella le cuenta una historia del pasado cargada de culpas y remordimientos. Sufre un proceso de expiación que el camarero-observador tiene que soportar con el mismo estoicismo que si estuviera contemplando la explosión de una lejana supernova o cualquier otro esplendoroso fenómeno del cosmos.
Me doy cuenta de que es difícil referirse al narrador. Lo llamamos camarero, observador, astrónomo. Y esto es así porque deliberadamente no tiene nombre. Cada lector tendrá que ponerle uno, quizá el del propio lector.
¿Cuál es tu relación con la música de Bach?
Bach es el mejor creador de melodías que conozco. Su talento es inacabable. El otro día comentaba con Daniel Gascón que alguien tendría que "remasterizar" algunas de sus melodías para destilar su esencia, dejando al lado los arreglos a veces demasiado barrocos que presentan las versiones más puristas. Es lo que hizo por ejemplo Glenn Gould con las ‘Variaciones Goldberg’. Las pasó de clave a piano y les cambió el ritmo. Eso las renovó.
¿Y con la astronomía?
Yo también soy astrónomo aficionado desde niño, lo que no sé si me convierte o no en un miembro de ‘El Club de los Estrellados’. De momento llevo calzoncillos, quién sabe si en un futuro también me pasaré a la lencería femenina. El firmamento es bello y asequible, pero poca gente conoce el nombre de las constelaciones y de las principales estrellas. Siempre me he preguntado por qué es tan importante que los niños conozcan todos los nombres de los montes y los ríos (y hasta los afluentes) del mundo y no aprendan en el colegio a diferenciar las constelaciones del firmamento, que ven cada noche de su vida sobre sus cabezas.
¿Cuál es para ti el tema de la novela: la soledad, el amor, la compasión, los secretos del pasado, la búsqueda de un lugar en el mundo?
Todos ellos. La soledad y la camaradería, el silencio y la música, la enfermedad y el pecado, el deseo sexual y el amor platónico, la orfandad y la maternidad, la rutina y la metamorfosis, la realidad y las potencias de la ficción...
¿Cómo son las novelas que te gustan, que deben tener, y que tiene esta de esas predilecciones?
Me gusta que me conmuevan anímicamente, que me exciten, me estimulen, me reclamen desde la mesilla de noche. Que me hagan estar deseando tener un rato libre para volver a ellas. Y que lo hagan además -y esto es lo más difícil porque descarta a muchas candidatas- sin perder la originalidad, la calidad literaria y lingüística. Según me dicen mis primeros lectores, El Club de los Estrellados es una novela ágil, que se lee con fluidez y además conmueve.
Has entrado por la puerta grande en el mundo de la edición, en el sello Tusquets que cumple 40 años con un soberbio y envidiable catálogo. ¿Cuál es tu estado de ánimo y tus expectativas?
Soy demasiado mayor para la euforia y demasiado joven para el escepticismo, así que me encuentro serenamente feliz, muy contento de haber debutado con Tusquets y muy aliviado de haber "salido del armario".
*Joaquín Berges acaba de debutar como novelista a los 44 años con 'El Club de los Estrellados' (Tusquets: Colección Andanzas). Hace unos días, tras leer su novela, cruzamos este diálogo. Aquí está para los interesados de este narrador sólido que tiene un mundo próximo, especialmente en esta novela, a Pedro Almodóvar.
'DOLMEN DA CORVEIRA', UN POEMA DE XOÁN ABELEIRA

DOLMEN DA CORVEIRA
Para achegarme a il
Houben de atravesar
Dúas chousas
A herba estaba tan húmida
A terra tan lenturenta
Que me enchoupei a feito
Toda a roupa
Ecoaban os chíos contra todo
O ceo aquí e aló
Como se fora il mesmo
Unha laverca multiplicada
En diferentes sons
Dentro da media lúa
Onde antano medraban os ósos
Cara á seguinte vida
Achou abeiro un palitroque
Dixital
Apenas fica nada
Diste sagrario de pedras
Repartidas agora
Polos cerrumes dos prados
Mais ó tocalas unha a unha
Agarimando os ocos
Diste ventre nupcial
Recoñecín
O pulo exacto das bestas
DOLMEN DA CORVEIRA
Para llegar a él
Tuve que atravesar
Dos prados
La hierba estaba tan húmeda
La tierra tan enfangada
Que me empapé completamente
La ropa
Resonaban los píos contra todo
El cielo aquí y allá
Como se fuese él mismo
Una alondra multiplicada
En diferentes sonidos
Dentro de la media luna
Donde antaño crecían los huesos
Hacia la siguiente vida
Halló cobijo una oscura
Digital
A penas queda nada
De este sagrario de piedras
Repartidas ahora
Por los cercados contiguos
Pero al tocarlas una a una
Acariciando las oquedades
De este vientre nupcial
Reconocí
El pulso exacto de las bestias
*Hace muy pocos días, en plena feria del Libro de Madrid, Xoán Abeleira publicada, en edición bilingüe, su libro ‘Animales animales / Animais animais’, en el sello Bartleby de Pepo Paz, editor también de la poesía completa de Sylvia Plath, que ha traducido el escritor. Abeleira, durante mi viaje, me ha hecho llegar este poema, uno de los inéditos que incorpora a su trabajado e inspirado volumen. Aquí está como un pequeño agasajo para los visitantes del blog.
ANA DA COSTA: EL BLOG DE LETRAS DE LA ESCRITORA

En este viaje a Argentina y a Perú me han ocurrido cosas curiosas. Cuando llegué a Lima había varios periodistas de diversos medios –‘El comercio’, ‘Perú 21’, ‘La República’, etc.- que me esperaban para entrevistarme. Habían leído ‘El álbum del solitario’ la mayoría y habían viajado por mi blog y habían accedido a otros textos. Aparecieron en cada medio una página completa. Y ayer mismo, una hora y media antes de la partida, el joven Gianmarco Farfán, periodista y escritor, vino a verme y me grabó otro diálogo para la radio y la prensa. Gianmarco, que había asistido a los talleres de Lima, me confesó que ni siquiera había dormido.
En Argentina, he experimentado hermosas emociones: una profesora de literatura española, Raquel, vino desde La Plata y se llevó mi libro ‘Golpes de mar’ a modo de correspondencia y de afecto a su gesto; otra, como Ana da Costa, me trajo su hermosa monografía sobre Héctor Tizón, una extensa y medida conversación que tiene momentos magistrales, especialmente su infancia, y todo lo concerniente a su exilio en España. Ana da Costa es periodista, realiza programas de libros y me ha escrito muy amablemente. Se lo pasó estupendamente. Me han escrito algunas otras compañeras.
Ana da Costa tiene un estupendo y variado blog, del que dejo aquí su enlace y del que coloco un link de acceso también. http://www.anadacosta.blogspot.com
*Esta foto es de Pepe Mateos, uno de los fotógrafos preferidos de Ana da Costa.
NOCHE DE POESÍA ERÓTICA Y RAPSODAS EN LA ALMUNIA

Anoche, en la plaza de San Juan de la Almunia de Doña Godina, se celebró el VI Festival de Poesía Erótica. Participaron en torno a una treintena de rapsodas, poetas, narradores, músicos (Alfonso Latorre al piano estuvo espléndido: tocó a Granados y Debussy) y actores en una auténtica fiesta popular de la poesía amatoria, más o menos lasciva, más o menos excitante. Al lado de poetas como Fernando Sarría, Emilio Pedro Gómez, Miguel Ángel Yusta, Javier Aguirre, Angélica Morales y otros, los integrantes del Club de Lectura de La Almunia –casi debería decir las integrantes: la mayoría son mujeres, mujeres entusiastas, mujeres que vibran con la belleza y el enigma de las palabras, mujeres que encienden el canto a la luz de la pálida luna, juglaresas…- hilvanaron una maravillosa noche con poemas populares, anónimos o de autores como Luisa Miñana, Félix Samaniego, Jesús Aguado, José Luis Gracia Mosteo, Julio Cristellys o Mario Benedetti, entre otros. Era la primera que acudía a ese encuentro, leí un relato ‘El fotógrafo y la modelo’, dedicado a Ferdinando Scianna, y un poema de Gonzalo Rojas, ‘El fornicio’, a modo de cierre, que había traído Fernando Sarría, y que es uno de nuestros poemas favoritos de este asunto, a favor de la alegría, el placer, el amor al amor, el amor a las mujeres. Fue una noche preciosa, precedida de una merienda-cena y de mucha complicidad, y seguida de una recena con postres, champán y frutas de ese delicioso paraje, que vive envuelto en la atmósfera de la multiculturalidad, la literatura y el cine.
He aquí el poema de Gonzalo Rojas:
EL FORNICIO
Te besara en la punta de las pestañas y en los pezones, te turbulentamente besara,
mi vergonzosa, en esos muslos
de individua blanca, tocara esos pies
para otro vuelo más aire que ese aire
felino de tu fragancia, te dijera española
mía, francesa mía, inglesa, ragazza,
nórdica boreal, espuma
de la diáspora del Génesis, ¿qué más
te dijera por dentro?
¿griega,
mi egipcia, romana
por el mármol?
¿fenicia,
cartaginesa, o loca, locamente andaluza
en el arco de morir
con todos los pétalos abiertos,
tensa
la cítara de Dios, en la danza
del fornicio?
Te oyera aullar,
te fuera mordiendo hasta las últimas
amapolas, mi posesa, te todavía
enloqueciera allí, en el frescor
ciego, te nadara
en la inmensidad
insaciable de la lascivia,
riera
frenético el frenesí con tus dientes, me
arrebatara el opio de tu piel hasta lo ebúrneo
de otra pureza, oyera cantar a las esferas
estallantes como Pitágoras, te
lamiera,
te olfateara como el león
a su leona,
parara el sol,
fálicamente mía,
¡te amara!
*La foto es de Ferdinando Scianna.
GIRA DEL PIANISTA JUAN FERNANDO MORENO GISTAÍN

*Juan Fernando Moreno Gistaín interpreta a Albéniz y Debussy en los Festivales Internacionales de Granada y Peralada
El pianista aragonés Juan Fernando Moreno Gistaín, nacido en Barbastro, ha sido invitado por varios festivales y programaciones de conciertos para presentar su programa compuesto por obras de Isaac Albéniz y Claude Debussy. El estreno del programa se realizó en el Teatro de Perpignan (Francia) a principios de Junio. Este fin de semana, concretamente el domingo día 5 de julio, el FEX de la 58 edición del Festival Internacional de Música y Danza de Granada acoge este programa dentro de su proyecto "Una Iberia para Albéniz".
En el mes de Agosto Juan Fernando ha sido invitado para ofrecer el único concierto de piano solista del XXII Festival Internacional Castell de Peralada. En Aragón se podrá escuchar este programa en el Festival del Foro Romano de Zaragoza el 7 de Agosto.
Esta misma semana Juan Fernando ha grabado parte de este programa para televisión, invitado por Canal Sur.
Al mismo tiempo, continúa la actividad junto a su hermano José Enrique como dúo de piano. Tras presentar en Madrid su programa Grand Duo y el concierto que ofrecieron en la Sala Sinfónica del Auditorio de Zaragoza, actualmente preparan una serie de conciertos fuera de España con el programa Inspiración Española, después de haberlo presentado en más de treinta ciclos de conciertos. La gira está patrocinada por el Gobierno de Aragón, y con la colaboración en la organización de Juventudes Musicales de España, la Fundación Eutherpe y la Asociación DICE de Viena.
BIOGRAFÍA BREVE DEL PIANISTA
Juan Fernando Moreno Gistaín nace en Barbastro. Realiza sus estudios en los Conservatorios de Zaragoza y Barcelona y en el Aula de Música de la Universidad de Alcalá de Henares, siendo galardonado con diversos premios académicos, así como en concursos nacionales. Ha recibido valiosos consejos de músicos de prestigio internacional, y mantiene una constante actividad como concertista en su faceta de solista y como dúo de piano a cuatro manos y dos pianos junto a su hermano José Enrique, invitado por numerosas instituciones y festivales. Ha grabado para el sello discográfico Albert Moraleda y para Radio Catalunya Musica, Aragón Televisión, Canal Sur, Radio Clásica de Radio Nacional de España y La 2 de Televisión Española.
*Esta foto pertenece al archivo www.acondearanda.com
PEPE GALÁN, VISTO POR XOÁN ABELEIRA

O CREADOR NO SEU OBRADOIRO
PEPE GALÁN: O FERRO REFRACTARIO
O escultor coruñés expón os seus últimos achados na Galería Atlántica
Xoán Abeleira
“Óe! -berroulle unha mañá un costaleiro a outro que aínda durmía-, sei dun que, por ben madrugar, atopou un costal!” “Xa! -retrucoulle o outro-, pero qué me dis do que o perdeu por se erguer tan cedo?” Pepe Galán foi un artista madrugador, un creador pioneiro, e, dende os anos setenta, non para de atopar costais. Os primeiros tiñan forma de cadros pois a pintura foi a fariña coa que empezou a enfornar. Pero, a partir dos anos oitenta, os cadros levedaron ata deviren nas esculturas que hoxe poboan o seu obradoiro. Da pintura á escultura. Da figuración á abstracción. Pepe Galán, no seu casco de cortén, sempre a navegar.
Abonda con cruzar ese limiar do Monte Alto coruñés para decatarse de que Galán é un loitador preocupado polo seu país, comprometido coa súa xente. Un deses “refractarios” que, consonte René Char, se negan a aceptar o prato de bazofia que lles serve a Desesperanza. As paredes do seu taller -case que de mecánico- están cubertas de carteis, recortes, fotografías, lembranzas de toda caste sobre os combates civís acontecidos na Galicia no que vai de século. Penduradas dun muro, escintilan as datas dos naufraxios de petroleiros habidos dende o 1961 ata o 2002, crise do Prestige. As mesmas que pasaron do xiz ó ferro, do ladrillo ó vidro dunha das súas últimas pezas: Mayday 03.
Ese grito, Mayday, é o título da exposición que dende o día 26 deste mes ocupa a Galería Atlántica d’A Coruña. Mayday, “día de maio”, en inglés, aínda que, en realidade, o código de emerxencia empregado na aviación e na navegación procede da expresión francesa “venez m’aider”, “veñan -ou vide- axudarme”. O tema é claro. Pero, por se non, Galán emite dende as súas pezas outros sinais parellos, en galego ou en morse. Pan-Pan, Pan-Pan, Pan-Pan. Di di di, da da da, da da da, di di di. Coma o, xa célebre, poema de Manuel Rivas: SOS, Socorro, Que afundimos! Nós sós!
O propio obradoiro semella arestora unha paisaxe despois do(s) desastre(s). Pezas pequenas e xigantescas abrollan por todas partes. “Os fitos -di Galán- do meu mapa mental”. Pois “esta é unha exposición sobre o noso territorio e a nosa memoria colectiva”. Unha fraga na que as árbores teñen traza de interrogacións. Un mar nas que as boias tanxen preguntas. “Basicamente, as obras que fago son un xeito de cuestionarme, de matinar sobre o que pasa, de entender o presente para albiscar o futuro. Se é que temos algún!” Xa que o presente só se enxerga analizando o pasado. Os por qué do pasado.
A circunferencia é o símbolo que articula Mayday. O círculo e o seu baleiro, “que para min representa non só a natureza, a unión dos puntos ou a bóveda celeste senón tamén o mar, o feito de mergullarse, con todo o que iso implica”. O círculo, o ferro. O mar -non baleiro senón cheo de mortos e de chapapote-, o cristal. Os para-brisas reciclados dos coches, “ós que cheguei a partir dos soportes de plástico que empreguei para realizar a serie pictórico-escultórica de Fendas e áncoras no vento”. A abstracción conceptual, tan característica deste creador que rexeita “dar as cousas mascadas ó público”, ó espectador activo, dialogante que el arela, “é menos hermética, se cadra, que noutros traballos meus, grazas, en parte, as letras integradas nas pezas”. NW: a sombra das siglas do noroeste -que suxeitan, a modo de patas, un destes cilindros mensaxeiros- deveñen en NM, en alusión “talvez -subliña o escultor- ó movemento de Nunca Máis”. Outra das súas “invitacións á reflexión, que non homenaxes” formula a cuestión Man, o radical de Camelle. Outra, “saúde e terra”, a da República. Outra, a que di “Bahía”, pregúntanos por qué continúan a morrer tantos mariñeiros faenando. Outra fálanos “da emigración actual, non da da posguerra; desta crise, a todos os niveis, que estamos a vivir”. Outra, “unha peza honorífica”, foi creada ex profeso para a Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica d’A Coruña, “igual cá escultura dos Mortos do Portiño”.
A min, secasí, a que máis me impresiona é unha desas “columnas infindas”, tipo Brancusi, dentro da cal penduran varios parabrisas coma porcos abertos após a matanza. Galán, abofé, fuxe de explicarme ese conxunto de imaxes tan poderosas e desalentadoras asemade, Mayday 04. Mais, á vista das sílabas que compoñen o seu brúo de alarma, eu dou en coidar na conciencia escachada dun pobo, o noso, que xa non se estima, que xa non se valora, que xa non se respecta a si mesmo.
*A foto de Pepe Galán é de Gabriel Tizón. Xan Abeleira, amorosiño, di: "lémbrate, lémbrate de poñer o seu nome". Aquí está.
BORRADORES EMITE ESTA NOCHE SU PROGRAMA 150

Borradores llega a su programa 150 con un menú esencialmente literario y con la actuación del grupo B Vocal. Se emite esta noche de domingo al lunes a la 1.20 en Aragón Televisión (97 por Canal Satélite Digital).
Borradores recibe en el plató al escritor aragonés Joaquín Berges, que acaba de debutar como novelista con ‘El club de los Estrellados’, en el sello Tusquets. Su narración narra la historia de un cartero, Francho, que se viste con lencería fina ante el espejo, de un camarero enamorado que contempla las estrellas, y de una mujer, Hortensia, que se encuentra en un momento clave de su vida. Ambos, por distintas razones, se ven mezclados en una aventura peligrosa de secuestros, de amor y de bajos fondos.
El otro invitado es el escritor y traductor Xoán Abeleira, que presenta su poemario ‘Animales Animales’, habla de su traducción de la ‘Poesía Completa’ de a Sylvia Plath, que ha dejado un impresionante y desgarrador legado literario, y del artista Man, que murió de pena tras la catástrofe del ‘Prestige’ en la Costa de la Muerte.
Borradores ofrece una entrevista-reportaje con el narrador argentino Andrés Neuman, que ha ganado el premio Alfaguara de novela con ‘El viajero del siglo’ (Alfaguara). Neuman cuenta la historia de un hombre que ha estado en muchos lugares y que decide quedarse en un pequeño pueblo, a la sombra de un organista y de una mujer audaz, hermosa e inteligente. La novela es un pretexto para analizar el siglo XIX. Alfons Cervera conversa con Ana Catalá Roca acerca de su novela ‘Esas vidas’ (Montesinos), donde rinde homenaje a su madre y a un conjunto de personajes que han hecho de la lucha el argumento de su existencia. Y Luis García Montero, Premio Nacional de Literatura, explica las claves de su novela-biografía ‘Mañana no será lo que Dios quiera’ (Alfaguara), donde aborda la peripecia vital y poética del gran poeta Ángel González, su infancia terrible, sus años de posguerra, su marcha a Nueva York o las claves de una lírica directa y cercana al lector.
Borradores también ofrece una visita al Museo del Prado y a la exposición de Joaquín Sorolla.
La actuación musical corre a cargo del grupo B Vocal, que acaba de presentar su nuevo disco: ‘Vocalitessen’. El quinteto, que está realizando una completa gira y que acaba de actuar en el Teatro Principal, interpretará dos temas: la obertura del ‘Barbero de Sevilla’ y un tema propio: ‘Hoy regreso a ti’.
*Borradores empezó a emitirse en mayo de 2006, lleva ya tres temporadas y permanecerá en antena todo el verano. Salvo en el primer programa, han actuado grupos de música en las restantes 149 emisiones. En homenaje a Joaquín Berges y a su pasión por el fetichismo, o al menos la pasión de sus personajes, coloco aquí esta foto de Jeanloup Sief.
VENCIÓ ROGER FEDERER, UN TENISTA PARA LA LEYENDA

Por palmarés, el suizo Roger Federer se convierte en el mejor jugador de tenis de todos los tiempos. Ha ganado en cinco sets a un correoso y peleón Andy Roddick, que probablemente haya hecho el mejor partido de su vida, en el estadio Wimbledon, y obtiene así quince títulos de Grand Slam y el sexto de Wimbledon. Pete Sampras, con gafas negras, asistía en primera línea a esa gesta: con el título de esta tarde, Federer, que igualó su marca de catorce grandes en Roland Garros, le supera por uno, con una importante diferencia: Sampras nunca logró ganar en Francia y Federer, aprovechando un bajón y una lesión de Rafael Nadal, su verdugo el pasado año en Wimbledon, conquistó el torneo de tierra batida semanas atrás y ahora culmina su gran sueño. Ser el mejor de los mejores.
No fue el partido más brillante de Federer, pero obtuvo casi 50 aces y mostró golpes maravillosos, excepcionales, propios de un tenista de su elegancia, de su virtuosismo y de su asombroso juego de muñeca. A veces, en algunos gestos, Federer recuerda al gran Ilia Nastasse, que también estaba en primera línea, igual que John McEnroe, que realizó tareas de comentarista y parecía desesperado por momentos, o Bjorn Borg. Federer, que pareció vulnerable, se defendió como nadie con su servicio, y aprovechó un instante de flaqueza y de cansancio de Roddick para tumbarlo. Su único ‘break’ le sirvió para conquistar el título. Roddick tuvo su oportunidad pero malbarató un 15-40. Luego, con obstinación, magníficos impactos y un primer servicio apabullante, siguió oponiéndose y plantó cara al campeón, que temblequeó, sin duda, y mostró lagunas. Con todo, en un choque a cinco sets, el último inacabable, puede ocurrir cualquier cosa y sucedió lo previsible.
Esta vez, el que lloró de amargura fue Roddick. Nunca antes había mostrado tanta alma de campeón.
GIANMARCO FARFÁN: DOS TEXTOS SOBRE EL PERÚ

MAESTROS, AMIGOS, LUCES CON PIEL
Autor: Gianmarco Farfán Cerdán
Año: 2009
Blanca Varela me sonríe todos los días con sus versos. Pero ella no lo sabe. Ni lo sospecha. Su poesía es el centro magmático del mundo, y también sus amplísimas fronteras.
Octavio Paz me enseña el camino, con su fecunda magia verbal abre trochas gigantescas en la maleza del existir. Monstruo mexicano de cielos purísimos de palabras.
Rocío Silva Santisteban me muestra su alma femenina ensangrentada y mechones de sus cabellos largos que ella misma se arranca. Sus poemas me golpean. Con furia tremenda lastiman, quiebran, y eso me gusta.
Blanca, Octavio, Rocío: amigos, compañeros de viaje, maestros, luces de piel que jamás me explicaron nada desde una alta pizarra, pero me enseñaron más que once años de querido colegio, cinco de reveladora universidad y treinta de cáustica vida.
Hablo con ellos tres, les pido consejos en silencio, me los dan desde sus páginas-ley, y procuro transitar las calles con los mismos poderosos pasos suyos. Y no puedo. Lo intento, lo intento, lo intento, mas no puedo. ¿Algún día podré?
¿O tendré que conformarme con ser el que los sigue en procesión, el que les prende inciensos, el que guarda celosamente los secretos de sus poemarios, el que besa sus luminosos pies y lame sus manos de fuego?
LIMA Y ELLA
Autor: Gianmarco Farfán Cerdán
Año: 2009
La serena chinita del salón sube al mismo colectivo que yo. Mira a todos lados, buscando un sitio vacío donde sentarse. Es la mujer más bella de la universidad. De pronto me ve, sentado en la última fila del destartalado carro, me observa fijamente unos segundos, me sonríe leve y amablemente, y encuentra un sitio para posar su belleza. Se sienta. Ahora está ahí, a pocos metros. No sabía que ella tomaba este mismo carro. Por fin, un poco de alegría matinal.
Hasta que un frenazo salvaje me hace olvidar a la chinita serena. Otro carro de transporte público quiso ganar un pasajero y le cerró el paso al colectivo donde voy. Otro demente al volante malográndome otra mañana. Otro suicida (y homicida) suelto en las pistas. Demasiados otros. Mentadas de madre se escupen y envenenan el aire, de conductor a conductor, y de cobrador a cobrador. La verdadera Lima aparece de nuevo. La ley no existe, las reglas son para zurrarse en ellas. Los pasajeros somos miserables ovejas de todos los colores que únicamente sirven para llenar el colectivo.
Pagar un nuevo sol para arruinarse el día, no es negocio. No para nosotros, sí para ellos los bestias, los asesinos.
A veces es tan fácil odiar a Lima. Sin embargo, todo cambia, todo pasa, cuando por la ventana de esta lata de sardinas andante, ves a una pareja de ancianos caminando juntos, aún enamorados, sin prisa; o cuando ves a una pequeña tomada de la mano de su madre, a punto de cruzar la pista. ¿Puede haber imagen más hermosa que una madre guiando a su hija por laberínticas calles, hacia donde sea?
Tal vez, y solamente tal vez, la imagen de cuando sube una preciosa chinita serena al carro, me sonríe, alegra mi día, y perdono cada página manchada o rota de esta caótica, agresiva y frecuentemente maldita ciudad. Mi ciudad.
Gianmarco Farfán Cerdán (Lima, 1978). Bachiller en Comunicación Social de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM). También tiene estudios de Psicología en la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP). Ha ejercido el periodismo en diversos medios de comunicación: el boletín Católica Deportes de la PUCP, Radio Santa Rosa, Radio Cadena, diario El Comercio, semanario Milenios, revista Universidad & Business, e Imedia. Además, ha sido editor el 2008 del periódico Pirca, y los años 2005 y 2006 de la revista Bar News. En el 2006 obtuvo una Mención Honrosa en el concurso de cuentos Horas de Ágora de la UNMSM. Ha publicado poemas, cuentos, reseñas y entrevistas en las revistas virtuales Destiempos (México), Letralia (Venezuela), Voces (España), y las peruanas Miríada, Bocanada, Remolinos y Sociedad Latina; así como tres poemas en la publicación impresa Punto Edu (ediciones 62 y 73) de la PUCP. Ha llevado talleres literarios con los escritores españoles Marta Rivera de la Cruz, Jordi Carrión, Agustín Fernández Mallo, Antón Castro, Javier Alonso Benito y Fernando Marías. Es miembro de la Red Mundial de Escritores en Español (REMES).
*Estos son dos de los textos del escritor y periodista Gianmarco Farfán, que redactó en las actividades del taller que se celebró en el Centro Cultural de España en Lima, dentro de las actividades de la Semana de Autor, en la que participé, invitado por Carlos Lombarte, May Rivas, Ricardo Ramón y Miguel Angel Bazán, entre otros amigos.
**He aquí una foto de un nocturno de los hermanos Vargas, los grandes fotógrafos de Perú con Courret, Martin Chambi y Baldomero Alejos.
MIGUEL ÁNGEL BERNA: 'GOYA' Y SUS FANTASMAS

El sabado, con Carmen, fui a ver ‘Goya’, el último proyecto de Miguel Angel Berna, un bailarín con una personalidad propia que nunca se conforma. Espectáculo tras espectáculo, se percibe en él un esfuerzo por la variedad, por la complejidad, un intento de acercarse cada vez más a la danza contemporánea y a la fusión de disciplinas. Es un trabajador que no se acomoda, que busca, que intenta mejorar y crecer día a día; no obstante, tiene su estilo, su carácter y eso asoma. Su ‘Goya’, dirigido por Luis Olmos, arranca de esa estampa casi espectral donde el artista, o una figura que emula al artista, está sentado. Una frase dice: “El sueño de la razón produce monstruos”. A partir de ese instante, se produce un auténtico torbellino: los monstruos, las criaturas ominosas, los delirios visitan al creador. De ahí se parte para ofrecer una mirada impresionista pero intensa por el mundo del artista: se juega con distintos grabados o de pinturas para elaborar una pieza intensa y dramática, festiva y excitante, que vendría a resumir la vida y la creación del artista. Berna encarna a Goya y lo hace a su modo: quizá bailando menos que otras veces y actuando con mayor sutileza, y adoptando modos contenidos próximos al arte contemporáneo.
Se abordan asuntos como el amor, la fiesta, los aquelarres, los duelos a garrotazos, la idea de España, se abordan los fantasmas del artista, con una apoyatura visual, mediante proyecciones, que funciona muy bien y que supone también un juego con el pintor de Fuendetodos. Hay un elemento fundamental: la música perturbadora, de inquietante subrayado, intensa y oscura, obsesiva y eminentemente contemporánea, casi atonal en ocasiones, que funciona a la perfección. Un espectáculo es una idea, arropada con multitud de elementos y perspectivas. Berna y su equipo lo tienen claro. Se trataba de crear un poema unitario. Miguel Angel Berna no está siempre en escena, quizá baile menos que en otros espectáculos, pero cuando está la función vibra, él se entrega como siempre, la puesta en escena funciona muy bien, en algunos momentos con indiscutible efectismo, y el resultado global es ambicioso porque sus bailarines –todos, y la solista Lucía Padilla- solventan el trabajo con brillantez y convicción.
Se trata de un espectáculo medido, de apenas una hora y diez minutos, un paso adelante, con varios momentos que excitaron al público: algún baile de Berna, el dúo en el duelo a garrotazos (con Chevy Muraday), algunos finales con aires de jota, pero eso quizá sea lo más espectacular, lo más esperado. La verdad es que toda la función resulta equilibrada y sugerente. En la representación del sábado, el público aplaudió a la compañía durante cerca de diez minutos. Al final, todos bailaron un aire de jota, que parecía una exigencia afectuosa más que del guión de una obra así. Resonaron desde los palcos varios ‘olés’ y ‘bravos’.
*Esta foto corresponde a Jesús Ibáñez y al periódico ’El País’.
EL TANGO DE COPI

Copi se sentó al piano, acarició un instante las teclas y respiró profundamente. Y, sin mediar nada, como en un cuento de Julio Cortázar, se arrojó al vacío de la noche, que aún paladeaba el sabor de una música de bandoneón. Cantó con hondura y desgarro el tango ‘Garganta con arena’ de Cacho Castaña como si no hubiera hecho otra cosa en toda la vida. Buenos Aires de noche huele a París, a melodía de arrabal, a furioso amor, a sorpresa. El cantante y compositor de Borja, con esa única pieza, arrancó suspiros e hizo olvidar los instantes convulsos de un país “acaso ingobernable”: la derrota de Kirchner, la dimisión de la ministra de Salud, los muertos de la gripe que se multiplican. Al día siguiente, en el Centro Cultural de España en Buenos Aires desgranó, en una entrevista improvisada, su trayectoria. Copi es uno de los ocho hijos de un tabernero de Borja, un hombre apacible que padece la enfermedad del sueño. Desde muy pronto, se vino a Zaragoza e ingresó en los Infanticos del Pilar. Volvía a su pueblo dos semanas al año, y un día lo señalaron como el hermano de Copi, aquel zagal al que le habían regalado una bicicleta. Su hermano se fue del pueblo y él se quedó con su nombre: Copi, como Fausto Coppi, el ciclista italiano que se coronó en el Tour, en el Giro y en el amor de ‘la dama blanca’. De ahí, pasaría al rock y a la música popular, y acompañaría a los Héroes del Silencio y a Enrique Bunbury durante una década. Se curtió en viajes, conciertos y experiencias, y fue creciendo hasta crear su propio estilo, su propia banda. Una mujer de La Plata, Natalia, le robó el corazón y él allá se ha ido, con la música en el cuerpo, con la emoción en el alma, dispuesto a cantarse a sí mismo y a cantar a Aníbal Troilo o a Discépolo, con esa vocación de felicidad que se expande, hacia el mundo y hacia Borja, desde Buenos Aires.
*Este artículo apareció ayer en 'Heraldo', en la sección 'Cuentos de domingo'. Esta foto fue publicada por el propio diario.
PINA BAUSCH: RECUERDO Y HOMENAJE DE PACO ORTEGA

En memoria de Pina Bausch
Por Paco ORTEGA
Nunca he sentido una emoción tan intensa como espectador teatral que aquella tarde noche del verano de 1983 en el Teatro Municipal de Avignon viendo “Kontakthof”, de Pina Bausch. Era el primero que veía de ella como coreógrafa y de su compañía afincada en Wüpertal. En realidad la sorpresa fue doble: no sabía con exactitud lo que iba a ver, y, en segundo lugar, porque lo que apareció ante mis ojos no era un gran espectáculo, sino algo diferente a todo lo que yo había visto hasta ese momento.
En la vida de un espectador de teatro hay siempre un antes y un después. Ese momento significó para mí esa intersección.
Lo fue para mí y lo fue para muchas más personas. Compartíamos un palquito Sergi Belbell y Manolo Llanes. Salimos con la mirada perdida en un horizonte interior que nos hacía reflexionar seguramente en direcciones diversas. Manolo se la quería llevar a su Festival de Granada. A Sergi le había abierto un rumbo nuevo en su incipiente carrera de escritor. A mí me cambió la vida.
No exagero. Me cambió la percepción del teatro, que ha sido mi vida. Me trastocó mi pobre idea de los géneros estancos: teatro por aquí, danza por allá, pintura por arriba, cine por debajo… Pina proponía algo que todo lo integraba. Sus actores no hablaban, pero no paraban de decir cosas. Transmitían la idea de un inmenso dramatismo existencial, de una soledad indescifrable, cuestionaban la vida en pareja, la sociedad en su conjunto.
Era un nuevo sentido del humor, en donde el absurdo y la crueldad se daban la mano. Aquello era sádico y hermoso, de una belleza intensa y desolada. Nada sería igual desde entonces, y, efectivamente, nada lo fue después de ella.
Hablé con ella unos minutos en Madrid hace dos años. Le propuse que viniera a la Expo rescatando una antigua coreografía en donde el agua era el tema protagonista. Su calendario era otro. Me saludó con unos hermosos ojos tristes y con las palmas juntas, ritualmente. Y se perdió por las calles, como en una de sus coreografías.
*Paco Ortega me envió este tras la muerte de Pina Bausch. Estaba fuera de Zaragoza y no pude abrir el correo. Lo cuelgo en mi blog: es un texto emocionante y sentido de alguien, con conocimiento, que admiraba a la bailarina y coreógrafa con auténtica sinceridad.
'ALGORA CAMPEÓN': DISCO EN RECUERDO DE SERGIO

Luis Pastor, amigo y cuñado del cantante, poeta y dinamizador cultural Sergio Algora anuncia:
Presentación del disco ‘Algora campeón’. Será el día 15 de Julio en Madrid y el 17 de Julio en Zaragoza, en el bar Bacharach de 20 a 23 horas, luego en el Candy, para el que quiera seguir la fiesta. Al disco le acompaña un libreto con fotos.
También el día 15 sale a la venta en la Fnac.
**En la foto, cinco poetas aragoneses: Angel Guinda, Manuel Vilas, Octavio Gómez Milián, Jesús Jiménez y Sergio Algora. La foto esta tomada del blog de Manuel Vilas.
‘Algora campeón’ está acompañado de un libreto con fotos de los grupos en los que tocó y con fotos que ha mandado la gente. Son 13 canciones cantadas con Costa Brava, Muy Poca Gente y el Niño Gusano.
BARBOZA / GRASA ANALIZAN, DE NUEVO, 'EL COLOSO'

Estimado amigo Antón:
Te enviamos el último estudio sobre el Coloso para ver si se termina este esperpento goyesco en el Museo del Prado, ya que tú has seguido con atención todo nuestro trabajo. Un saludo. Barboza/Grasa.
EL PRADO CONVIERTE UN NÚMERO
EN LETRA EN EL COLOSO DE GOYA
En nuestro blog http://barbozagrasa.blogspot.com ofrecemos el último estudio sobre El Coloso de Goya en el que estudiamos el número 17 que se encuentra en la zona inferior izquierda del cuadro y que el Museo del Prado lo ha convertido en letra.
Consultamos con el prestigioso profesor grafólogo D. José Guillermo Pastor, Director del Centro Sócrates, quien ha estudiado este signo y llega a la misma conclusión, de que es el número 17 y no una letra mayúscula.
Es necesario reconducir el tema de la autoría de esta obra maestra que es de El Coloso de GOYA y dejar de sembrar dudas infundadas.
*Recibo esta carta de Carlos Barboza y Teresa Grasa. Ellos sostienen, como ya hemos dicho aquí otras veces, que ‘El Coloso’ es una obra de Goya.
TARAZONA: CINE, TEATRO Y TRADUCCIÓN EN SEPTIEMBRE

XVII JORNADAS EN TORNO
A LA TRADUCCIÓN LITERARIA
Casa del Traductor de Tarazona
Dirección: Mercedes Corral
Viernes 25 de septiembre
16:00 – 20:00 h.
Seminario Menor Diocesano
(C/Obispo Hurtado nº 8)
Acogida de participantes y entrega de material
20:00 h.
Teatro Municipal Bellas Artes
Conferencia inaugural a cargo de Álvaro del Amo
21:30 h.
Descanso – Cena
Sábado 26 de septiembre
10:00 – 11:30 h.
Residencia El Cinto
El dramaturgo y su traductor:
Paloma Pedrero conversa con Pino Tierno
11:30 – 12:15 h.
Residencia El Cinto
Descanso – Café y pastas
12:00 – 13:30 h.
Residencia El Cinto
Mesa redonda: Teatro, cine y traducción
Participan: Álvaro del Amo, Anne Helène Suárez, Borja Ortiz de Gondra, Pino Tierno.
Modera: Pedro Tena
14:00 h.
Comida libre
16:30 – 18:30 h.
Escuela Oficial de Idiomas
Talleres.
Inglés
-Un clásico contemporáneo: Harold Pinter
Álvaro del Amo
-La traducción publicitaria
Cretina Valdés
Francés
-Sobre Zoo nocturno de Michel Azama
Borja Ortiz de Gondra
Español
-De la imagen a la palabra. Traducir para invidentes: prácticas de audiodescripción
Antonio Vázquez
Otras lenguas
-Traducción cinematográfica: adaptación para doblaje y subtitulación
Anne Helène Suárez
19:00 – 20:00 h.
Escuela Oficial de Idiomas
Pizarra del traductor
Panel o espacio informal de intercambio dirigido a los traductores literarios de cualquier lengua que trabajen o hayan trabajo en una obra de cualquier género (novela, teatro y poesía) y que deseen compartir, a ser posible de un modo sistemático, con otras personas interesadas su propio campo de dudas o problemas de traducción. Cuatro o cinco propuestas a lo largo de 1 hora aproximadamente.
20:15 – 21:15 h.
Espectáculo – Teatro Bellas Artes
Puentes de la palabra: poesía traducida de Oriente a Occidente
Dirección: Pilar González España
21:30 h.
Descanso – Cena
Domingo 27 de septiembre
10:00 – 12:00 h.
Escuela Oficial de Idiomas
-Continuación del taller “Un clásico contemporáneo: Harold Pinter”
-Repetición de los otros talleres
12:30 – 13: 15 h.
Residencia El Cinto
María Teresa Gallego Urrutia: Traducción o caos
13:15 – 13:45 h.
María Teresa Gallego Urrutia, vicepresidenta de Acett:
Sobre el Libro Blanco de la Traducción
14:15 h.
Hotel Brujas de Bécquer
Descanso – Comida y clausura
CRÉDITOS POR ASISTENCIA
La Universidad Complutense de Madrid y la Facultad de Traducción e Interpretación de Soria otorgarán a sus alumnos 1,5 créditos de libre elección.
La Universidad de San Jorge (Zaragoza) otorgará un crédito en ECTS a los alumnos del grado en TCI.
Para más información sobre los ponentes y la matrícula, consulte nuestra página web: www.casadeltraductor.com. La refrescante foto es de Ben Heys.
ESTA NOCHE SE ESTRENA EL NUEVO CLIC!

Aragón Televisión estrena hoy martes una de sus novedades de verano. El programa Clic! regresa al canal autonómico con un nuevo formato y horario. A partir del 8 de julio, la actualidad de los escenarios y las pantallas de nuestra Comunidad tendrán su hueco en la franja del late night.
A lo largo de 50 minutos, este espacio mostrará la cara más insospechada de los artistas que nos visiten, los mejores momentos de nuestros festivales de música o también lo más destacado de los estrenos de cine. El nuevo Clic! pretende convertirse en la guía de ocio que ayude a los aragoneses a disfrutar del verano en Aragón.
Clic! se emite el martes 7 de julio a las 01:30 horas.
*La nota corresponde al gabinete de comunicación de Aragón Televisión. Sus presentadoras son Virginia Martínez y Patricia Imaz, a las que vemos en la imagen en moto.
WILLIAM PALOMINO: SOBRE LOS FOTÓGRAFOS PERUANOS

Me escribe, desde Lima, William Palomino, que asistió a los dos talleres de escritura en el Centro Cultural de España en Lima y a la conferencia que impartí en compañía de José Güich. Dice:
“Sabiendo tu interés fotográfico, te remito los datos de otro gran fotógrafo peruano, el huancavelicano Baldomero Alejos (1902-1976), quien además retocaba sus imágenes con métodos sencillos. El fotógrafo José Falcón se encargó de la curación en el año 1996 para la muestra ‘Retoques’ en la Universidad de Harvard y en la Casa de América Latina de París. Este fotógrafo descubierto realizó 20 placas y 40 mil fotos tamaño carnet. Sus inicios desde 1924, con un estilo a lo Eugéne Courret, ha sido comparado con Martín Chambi.
Otro, como te mencioné en tu última presentación, fotógrafo y poeta, José María Eguren, presenta fotografías en miniatura hechas con una camarita que construyó él mismo”.
*Una obra de Baldomero Alejos.
ARRANCA LA PIRINEOS SUR EN SU XVIII EDICIÓN

Pirineos Sur arranca mañana
con una gran fiesta-concierto por sus 18 años
El nuevo auditorio se inaugura la noche del jueves con 17 Hippies y Shantel & Bucovina Club Orkestar
El XVIII Pirineos Sur, Festival Internacional de las Culturas, arranca este jueves, 9 de julio, con una gran fiesta-concierto para celebrar su mayoría de edad. Los artistas invitados serán los alemanes, “17 Hippies” y “Shantel & Bucovina Club Orkestar”. Para que todo el mundo participe de esta gran celebración, la entrada de este primer concierto de Pirineos Sur 2009 será de 10 euros en taquilla, y 9, anticipada. La actuación servirá, además, para inaugurar el nuevo auditorio de Lanuza, en el que se han invertido, en la primera fase, unos 2 millones de euros.
Con el concierto del jueves comienza una brillante edición de Pirineos Sur que, organizado por la Diputación Provincial de Huesca, irá descubriendo, hasta el próximo 26 de julio, las músicas del “Atlántico negro”, de la mano de un amplio y excelente elenco de grandes personalidades de la música como Mariannne Faithfull, Maceo Parker, Pablo Milanés, Omara Portuondo, Cirkus featuring Neneh Cherry o Mariza. Serán en total 17 noches de conciertos y 21 propuestas paralelas, entre talleres, conciertos familiares, actividades infantiles y pasacalles, además de los Mercados del Mundo y el Espacio Intermón Oxfán.
“17 Hippies” comenzaron a tocar en 1995, destacándose desde el primer momento por ofrecer un cóctel musical mundial; un viaje alrededor de Europa, Asia y América, destilando muchos géneros musicales. Las influencias de sus músicos van desde el pop-rock hasta la música clásica, pasando por el jazz. Esta diversidad se refleja en la variedad de instrumentos que tocan: acordeón, trombón, trompeta, violines, violonchelo, flautas, mandolina, ukelele… “17 Hippies” sabe transmitir lo insólito de manera ligera y alegre. Captan el ritmo y el sonido de su ciudad, Berlín, para ir creando a partir de ahí canciones constantemente nuevas.
Su noveno trabajo, “El Dorado”, es el tercer álbum grabado en estudio. Con ánimo festivo y recolector, se fueron metiendo en el bolsillo la música gipsy y el klezmer del Este, el café parisino e incluso el baile cajún de Luisiana. Después de 15 años y 1.500 conciertos en 20 países, el elenco invariado de 13 músicos que componen los “17 Hippies” ha establecido su estilo inconfundible: una fiesta constante ideal para comenzar el XVIII Pirineos Sur.
“Shantel & Bucovina Club Orkestar” está encabezado por Stefan Hantel, conocido como Shantel. Es un productor y músico alemán de raíces rumanas que ha exportado a todo el mundo el balkan beat. En su estilo mezcla la música popular de los Balcanes con la electrónica más actual, la tradición del Este europeo con los sonidos contemporáneos del Oeste, consiguiendo un sonido único lleno de alegría que empuja al baile y a la fiesta. Su primer disco solista, “Disko Partizani” (2007), recibió varios premios incluyendo el “BBC World Music Award”; es el sonido de la nueva Europa, centrado en el corazón del viejo continente e incorporando vibrantes influencias de los Balcanes, Oriente Próximo, Grecia, Turquía y más allá.
Shantel se acompaña en el escenario por la “Bucovina Club Orkestar”, una auténtica fiesta, un jolgorio de excelentes músicos de origen gitano que tocan instrumentos tradicionales como trompetas, acordeón o violín, mezclados con ritmos electrónicos. Un soplo de aire fresco en el panorama electrónico europeo y una excelente invitación a participar en la fiesta de 18 cumpleaños de Pirineos Sur.
Nuevo auditorio
Con el concierto de mañana se inaugura el nuevo auditorio de Lanuza, un espacio creado a 500 metros del anterior que amplía el espacio, la comodidad y seguridad que hasta la fecha existía en el auditorio de Lanuza. Construido al estilo de los anfiteatros romanos, cuenta con un aforo máximo de 4.500 personas, pudiéndose sentar en un graderío fijo 2.800. El coste de esta primera fase es de unos 2 millones de euros, sufragados en un 75% por la Diputación Provincial de Huesca y el 25% restante, por el Ayuntamiento de Sallent de Gállego.
Entre las mejoras que ofrece el nuevo auditorio cabe destacar una mejora del acceso al recito. Se han construido dos entradas diferenciadas, una para peatones y otra para vehículos y personal autorizado. Además, se ha ampliado y asfaltado la zona de aparcamiento y se ha habilitado un acceso especial para personas discapacitadas. También se ha ampliado la superficie destinada a carpas, manteniendo un servicio de restaurante de barra en la zona superior y dos de menores dimensiones para bebidas. Igualmente se ha creado un espacio para la prensa y otro reservado a Vips.
*Esta información pertenece al gabinete de prensa del Festival que dirige Luis Calvo. En la foto promocional, Mariza, la nueva reina del fado.
INSTANTÁNEAS DEL EVOCADOR BUENOS AIRES

Patricia Jacquet, que asistió a los talleres de Buenos Aires, me envía esta foto preciosa del barrio de La Boca, con un mural del gran pintor Quinquela Martín, el gran artista del mar, del puerto y del barrio de la Boca.
'LUZ DE HIELO' DE FLAVIA COMPANY, AL CINE EN 2010

Recibo carta de la escritora y traductora Flavia Company, con una hermosa noticia: su novela ‘Luz de Hielo’ será trasladada al cine por Silvia Quer y producción de Antón Reixa y su equipo. Este es el texto-cuento que Flavia ha publicado en su blog.
Esta es una de esas historias que parece más un cuento de hadas que la dura realidad.
Hace algunos años, concretamente cuando corría el 2000, la directora Silvia Quer me telefoneó para decirme que le gustaría adaptar al cine mi novela Luz de Hielo. Quedamos, nos tomamos unas cervezas y decidimos emprender juntas la escritura del guión, cosa que hicimos de inmediato y sin ninguna clase de descanso o tregua. Nos fuimos a Pepa Paper, compramos una libreta tamaño folio, de tapas rojas y con hojas blancas, sin pauta, y en ella fuimos escribiendo la primera versión -y pegando los sobres de té que consumíamos, las servilletas de la pizzería en que nos alimentábamos a cualquier hora y demás (incluso una piel de esa fruta china llamada lichi). Un día u otro terminamos la octava versión. Después de eso... había que vendérsela a un productor. Ni Silvia ni yo somos grandes vendedoras, para qué engañarnos. A nosotras, que nos echen lo creativo... y ya.
Quedó el proyecto en el cajón, a la espera de nuevos tiempos, de que nos apareciera la virtud vendedora como un grano o de que, de pronto, alguien llamara a nuestras puertas diciendo: queremos un hijo vuestro.
No ha sido así.... pero... el azar, esa maravillosa explicación de la vida, ha dado al fin con la manera de hacer nuestro sueño realidad.
El pasado mes de setiembre el poeta Luis García Jambrina me llamó -fue un asalto casi- con pocos días de tiempo para invitarme al Encuentro de Escritores en Verines (Asturias) que, ese año, reunía a escritores y cineastas. Faltaban apenas quince días para el encuentro, debía prepararme una charla, encontrar el modo de hablar de mi abuela -en Verines siempre hablo de mi abuela; la nombraron abuela honorífica del Encuentro-... pero acepté. Le dije a Luis, sí, voy. Y fui.
Y en Verines conocí al fantástico director y productor Antón Reixa. Os digo que es una persona singular entre las singulares. Me encantó su ironía, su sentido del humor y su sensibilidad -llegamos a perpetrar juntos, en grupo con algunos otros, incluso un asesinato que habría beneficiado a la humanidad, pero desistimos por falta de iniciativa criminal-. Comí en la mesa de Antón algunas veces y al final, un día, le dije: "Lo que tendrías que hacer es leerte el guión de Luz de Hielo. Seguro que te gustaría." Y me dijo: "Mándamelo".
Y se lo mandé en cuanto llegué a Barcelona. Y quince días después me dijo: "Está bien el guión, pero ahora mismo estamos saturados de proyectos". Y le contesté: "¿Pero de veras te gusta el guión? Es que yo quiero que lo produzcas tú. Así que no me importa esperar". Y contestó: "En serio me gusta". Y esperamos.
Justo el 23 de febrero pasado, día en que presentaba yo en Barcelona mi libro de cuentos "Con la soga al cuello", poco antes de irme para el acto, recibí un mail de Antón en que me decía que sí, que veía que el guión valía la pena y que estaba dispuesto a intentarlo.
Llamé a Silvia, que estaba con gripe, y se curó de golpe.
Poco después Antón Reixa (Productora Filmanova) había hablado con Tono Folguera y Toni Marín (Productora Cromosoma), quienes leyeron también el guión y pensaron que, en efecto, ahí había una buena peli. Vivan los tres "Tonis".
Y algunos meses después, llega esa foto que encabeza la entrada de hoy: contratos firmados. Silvia Quer dirigirá la película -qué lujo, amigos y amigas-, y bueno... esto muestra cómo la gente que debe encontrarse... tarde o temprano se encuentra, ¿no?
Comparto con vosotros y vosotras mi alegría. Tengo ganas de ver esa película, muchas ganas. Se rodará en 2010. Iremos a verla, ¿no?
*La foto es de Carlos Saura.
DISCURSOS EN TORNO AL CUERPO EN TARAZONA

“El velo es una señal con la que la mujer
delimita la vida privada de la pública”
- La historiadora Manuela Marín analiza “Las mujeres en Al-Andalus” en la primera jornada de los “Discursos en torno al cuerpo en la Edad Media y el Renacimiento”, organizados por la Fundación Tarazona Monumental y la Universidad de Zaragoza
- Este curso de verano, con 66 alumnos, el de mayor participación de este año de la Universidad de Zaragoza
Por Helga MARTÍNEZ
Desde hoy y hasta el viernes, 11 profesionales y 66 alumnos estudiarán la historia del Cuerpo Humano en la Edad Media y el Renacimiento y analizarán el concepto de belleza de la época. El encuentro tiene lugar en el curso de verano “Discursos en torno al cuerpo en la Edad Media y el Renacimiento”, organizado por la Fundación Tarazona Monumental y la Universidad de Zaragoza.
Como indica María del Carmen García, codirectora junto a Jesús Criado, “se trata de un encuentro interdisciplinar, ya que se va a profundizar en el tema principal desde el arte, la literatura, la ciencia, la medicina o el derecho, tanto desde el punto de vista cristiano como desde el islámico”. De hecho, la cita ha unido a estudiantes de Historia con alumnos de Enfermería y Medicina.
En la jornada inaugural se han tratado temas como “Conocer sin ver: el cuerpo humano en la medicina medieval” o “Las mujeres de Al-Andalus, adornar el cuerpo, ocultar el adorno”. En esta conferencia, la historiadora Manuela Marín (arabista del CSIC) ha explicado “cómo se gobierna el cuerpo de la mujer islámica medieval, cómo se adorna y después se cubre para restringir el acceso a él”. Marín ha apuntado que “en la actualidad, se ve extraño, pero se trata de una tradición no solo religiosa sino también social. Las cristianas antiguamente también se velaban, aunque con el tiempo se han descubierto”.
Manuela Marín ha querido restar importancia al “conflicto social actual” al explicar que “el velo es una señal con la que la mujer delimita la vida privada de la pública; constituye un símbolo que existe desde hace siglos, aunque los conflictos en algunos países lo han hecho visible ahora”. La investigadora del CSIC ha afirmado que “en la época medieval la mujer islámica se cuidaba mucho, se adornaba, pero sólo lo mostraba a su marido y a su familia”. La historiadora ha confirmado que “llevar velo en la Edad Media era general también en las mujeres cristianas, aunque la tradición se ha adaptado con el paso del tiempo”.
Una visión actualizada de "Las tres Gracias"
Coincidiendo con este curso sobre los “Discursos en torno al cuerpo en la Edad Media y el Renacimiento”, el festival Tarazona-Foto inaugura este miércoles la muestra “Cuerpo a cuerpo”, fruto de la colaboración entre ambas entidades. Según explica el director del certamen, José Latova, “la idea surgió con los directores del curso, los profesores de Historia María del Carmen García y Jesús Criado: planteamos que sería atractivo que fotógrafos contemporáneos reinterpretaran cuadros clásicos”.
Así, se propuso a nueve fotógrafos nacionales (cinco independientes y un grupo de cuatro) reinterpretar doce obras, entre las que figuran “La Anunciación ” de Fray Angélico, “Las tres gracias” de Rubens o “Adán y Eva expulsados del Paraíso” de Masaccio, y ellos dieron su visión actualizada del cuerpo humano. La exposición, que permanecerá abierta en la sede de Tarazona-Foto hasta el 2 de agosto, reúne las obras clásicas con las imágenes, “de técnica libre y con visiones modernas y diferentes de la pintura seleccionada”, matiza Latova.
Finalmente, la muestra está compuesta por once imágenes de Ciuco Gutiérrez, Luis Malibrán, Rafael Liaño, María Luján, Beatriz Martínez y el grupo “Tú la llevas” (formado por Arantxa Boyero, Lourdes Carcedo, Lucía Morate y María Platero). Para José Latova, “el resultado es muy interesante ya que todos los artistas se mueven en el clasicismo de mirar el cuerpo humano como lo hacían los pintores de la época, con la intención de analizarlo desde la línea de misterios eternos de la vida, la maternidad o la muerte”. Además, con esta exposición se celebra el 20 aniversario de Tarazona-Foto.
FICHA TÉCNICA “CUERPO A CUERPO”
Lugar: Sala de Exposiciones TARAZONA FOTO (C/ Virgen del Río, s/n, Tarazona)
Fechas: 8 de julio - 2 de agosto
Horario: Martes-sábado de 18 a 20 horas. Domingos y festivos de 12 a 14 horas. Lunes cerrado.
AUTORES:
Ciuco Gutiérrez
Luis Malibrán
Rafael Liaño
María Luján
Beatriz Martínez
Grupo TÚ LA LLEVAS (formado por Arantxa Boyero, Lourdes Carcedo, Lucía Morate, María Platero)
Toda la información sobre los cursos puede ser consultada en www.tarazonamonumental.es. Esta foto es de Ciuco Gutiérrez.
NOTAS DE LECTURA: TAPIA, BERGES, VEGA Y SIMMONS

El rey del abismo
David Tapia Martín. Aetas. Barcelona, 2009. 302 páginas.
David Tapia (Zaragoza, 1982) es un diseñador enamorado del género negro, tanto en el cine como en la novela. Admirador de Ellroy, Leonard o Connelly, entre otros, se estrena con una novela que respira meticulosidad, conocimiento e interés por el comportamiento criminal. La agente especial del FBI Jazz Harriett, acompañada de otro agente, Ray Hinojosa, y de la forense Carla Gemini, intenta descubrir las claves y las tramas ocultas de al menos cuatro asesinatos en serie, realizados con sangre fría y una violencia casi inconcebible. La acción se desarrolla en Los Ángeles y David Tapia muestra conocer bien los mecanismos terribles del crimen y los secretos de la investigación, en la línea de CSIC, y los usos del ADN.
El club de los estrellados
Joaquín Berges. Tusquets. Barcelona, 2009. 272 páginas.
Joaquín Berges (Zaragoza, 1965) ingresa en la literatura por la puerta grande. Corresponsal de David Logde y escritor oculto durante años, debuta con un libro lleno de sutileza y de acción, de personajes y de ironía, que se derrama hacia el esperpento, la comedia y el drama, como una película de Almodóvar. Narra la historia del cartero Francho, que ajusta la lencería femenina a su esbelto cuerpo, de un camarero y de una mujer, Hortensia, que se enfrenta a un pasado lleno de enigmas y a una enfermedad. Un sobre, que Francho recibe en una noche accidental en la cárcel, activa una compleja y amena historia en la que intervienen el amor y el sexo, los bajos fondos, la música de Bach y la astronomía.
¿Y si pongo una palabra?
Antonio Vega. Demipage: Poesía. Madrid, 2009.84 páginas.
No sabemos si Antonio Vega llegó a ver este libro antes de que la Parca pusiera fin a su incesante desafío a la enfermedad y a la vida. Dice el prologuista Benjamín Prado que Vega, cantante y compositor, escribía canciones como himnos y que en ellas hay “versos memorables”. Demipage recoge 27 letras en un volumen donde se juega con la tipografía, con la puesta en página, con el desplazamiento de los títulos. No estamos seguros de si eso aporta algo novedoso a unos temas conocidos, que rezuman intensidad, misterio, búsqueda, hermosas imágenes y un fondo de dolor y de aventura. Ante este volumen, sobrio en su portada, cabe decir, de nuevo: “El concierto va a empezar”. El concierto y, con él, la elegía.
La soledad de Charles Dickens
Dan Simmons. Trad. de Ana Herrera. Roca. Barcelona, 2009. 872 páginas.
Si el lector busca un novelón un tanto libresco, lleno de temas y tramas, una narración inagotable de época, bien podría ser ‘La soledad de Charles Dickens’. De entrada, arranca con un detalle esencial: quien cuenta la acción es el novelista y “jugador empedernido” Wilkie Collins, el autor de ‘La piedra lunar’. Todo parte de un accidente de una locomotora que ocurrió el 9 de junio de 1865. A bordo iba Dickens, con su joven amante y con la madre de ésta, y esa “catástrofe” acabará con “su paz mental, su salud” y “con su cordura”. El texto refiere los últimos cinco años de la vida de Dickens, presididos por el crimen, el opio, los callejones sombríos y un personaje obsesivo y real, llamado Drood.
*Esta foto de una hermosa Lee Miller corresponde a George Hoyningen-Huene.
ANTONIO ALTARRIBA PUBLICA 'EL ARTE DE VOLAR'

Kim ilustra una novela gráfica que recorre el convulso siglo XX, desde la dictadura de Primo de Rivera hasta la Transición, pasando por la Guerra Civil, el exilio, el nazismo y la amarga posguerra
Antonio Altarriba (Zaragoza, 1952) es escritor, guionista de proyectos fotográficos con su compañera Pilar Albajar, autor de ‘La España del tebeo’ (2001), y un gran estudioso de Tintín y su mundo, como demostró en ‘Tintín y el loto rosa’ (Edicions del Ponent, 2007), que despertó más de alguna polémica por atreverse a iniciar al héroe de Hergé en el sexo. Ha colaborado en numerosas ocasiones con dibujantes, artistas e ilustradores, entre ellos Luis Royo. Hace unos días, en Edicions del Ponent aparecía la novela gráfica ‘El arte de volar’, ilustrada por Kim, donde Antonio Altarriba narra la historia de su padre, que decidió suicidarse a los 90 años. Antes de tomar esa decisión, que había aplazado en varias ocasiones, redactó “un fajo de cuartillas de sus memorias”; abatido por una depresión, llegó a pedirle a su hijo que lo ayudase a morir. Dice el escritor y guionista: “La depresión no es consecuencia de la enajenación sino de una lucidez trágica. Llega un momento en que la muerte es la única solución, el único alivio. Entendía que mi padre quisiera suicidarse y me pesa enormemente no haberle ayudado”.
Antonio Altarriba padre pertenecía a una generación que “vivió los vaivenes del agitado siglo XX”. Fue niño y adolescente con la dictadura de Primo de Rivera, joven con la II República, escapó en un principio de la Guerra Civil y acabó incorporándose al ejército republicano, conoció y padeció el exilio y la Segunda Guerra Mundial, su madurez coincidió con el franquismo y su vejez con la democracia. Antonio lo define “como un idealista, un entusiasta de espíritu optimista y alegre que cantaba muy bien las jotas”. Después de la Segunda Guerra Mundial logró regresar a Zaragoza, donde la vida tampoco le sonrió.
Con esta peripecia, las memorias y los recuerdos que su padre le contaba, Antonio Altarriba escribió el guión de su cómic, de la novela gráfica ‘El arte de volar’, que ya ha recibido numerosos elogios. El libro narra el acto fatal del anciano, que se encontraba en una residencia de Lardero, y luego se organiza como un largo ‘flash back’. Antonio Altarriba y Kim siguen su vida, y añaden alguna que otra fabulación: imaginan sus primeros amores, recrean incluso algún detalle sexual posterior en Francia, con la joven Madeleine, y en España con Concha, que tramaba una venganza contra su rico marido, y se permiten la licencia de hacerlo participar en la batalla de Teruel y en la de Belchite. “Mi padre –dice Antonio- no estuvo en ninguno de los dos sitios, he incluido ese detalle para dar una visión más completa de cómo se desarrolló la guerra. Sí se jugó la vida pasándose al bando republicano y sí estuvo en la batalla del Ebro”. El hombre que puso fin a su existencia solía recordar que los mejores días de su vida fueron los meses que pasó en las colectividades del Bajo Aragón y su estancia en la granja francesa de los Boyer, mientras los nazis arrasaban Europa. Antonio asume, en ese largo ‘flash back’, la voz de su padre que parece recordar su existencia mientras cae al vacío. Esa es una de las metáforas del conjunto, y de ahí nace el título.
Antonio Altarriba, catedrático de literatura francesa en la Universidad del País Vasco, elogia el trabajo del dibujante Kim. Define su obra como “expresiva, plástica y muy documentada. Para mí es una de los grandes dibujantes del cómic español y en ‘El arte de volar’ lo demuestra plenamente”. El libro tiene muchos momentos enternecedores: Antonio Altarriba padre nació en Peñaflor, quería hacerse conductor de coches y allí empezó a fraguarse su derrota: embrujado por un Hispano Suiza, vio como su mejor amigo lo ponía en marcha y se estrellaba. Quizá nunca pudiera olvidar aquella desgracia y allí empezaba una compleja relación de amor y odio con su villa natal. Todo ello está admirablemente narrado, sin complejos y con gran amenidad, en un libro que se lee como una novela, como una autobiografía y como una mirada hacia el convulso siglo XX.
*Portada del volumen que ha editado Edicions de Ponent, que dirige Paco Camarasa.
TERESA WILMS MONTS: EVOCACIÓN Y TEXTOS

TERESA WILMS
BELZEBUTH
Mi alma, celeste columna de humo, se eleva hacia
la bóveda azul.
Levantados en imploración mis brazos, forman la puerta
de alabastro de un templo.
Mis ojos extáticos, fijos en el misterio, son dos lámparas
de zafiro en cuyo fondo arde el amor divino.
Una sombra pasa eclipsando mi oración, es una sombra
de oro empenachado de llamas alocadas.
Sombra hermosa que sonríe oblicua, acariciando los sedosos
bucles de larga cabellera luminosa.
Es una sombra que mira con un mirar de abismo,
en cuyo borde se abren flores rojas de pecado.
Se llama Belzebuth, me lo ha susurrado en la cavidad
de la oreja, produciéndome calor y frío.
Se han helado mis labios.
Mi corazón se ha vuelto rojo de rubí y un ardor de fragua
me quema el pecho.
Belzebuth. Ha pasado Belzebuth, desviando mi oración
azul hacia la negrura aterciopelada de su alma rebelde.
Los pilares de mis brazos se han vuelto humanos, pierden
su forma vertical, extendiéndose con temblores de pasión.
Las lámparas de mis ojos destellan fulgores verdes encendidos
de amor, culpables y queriendo ofrecerse a Dios; siguen
ansiosos la sombra de oro envuelta en el torbellino refulgente
de fuego eterno.
Belzebuth, arcángel del mal, por qué turbar el alma
que se torna a Dios, el alma que había olvidado las fantásticas
bellezas del pecado original.
Belzebuth, mi novio, mi perdición...
FRAGMENTOS DE SU DIARIO
Madrid (enero 1920)
¡Me muero! Al decirlo no experimento emoción alguna, por el contrario, me inclino curiosamente a contemplar el hecho como si se tratase de un desconocido.
Si tuviera la capacidad de estudiar el fenómeno, podría asegurar que es mi conciencia la que ha desaparecido debilitando mis sensaciones corporales, hasta hacerme creer que el cuerpo sólo vive por recuerdo.
No hay médico en el mundo que diagnostique mi mal; histeria, dicen unos, otros hiperestesia. Palabras, palabras, ellas abundan en la ciencia.
Al escribir estas páginas una fuerza sobrenatural me ordena que imprima en ellas un nombre. ¡No, no lo diré, me da miedo!
Cuando aparece este nombre en mi círculo nebuloso, se levantan mis manos con lentitud profética y fulguran bajo la noche con estremecimientos sagrados.
¿Me muero estando ya muerta, o será mi vida muerte eterna...?
Madrid
Extraño mal que me roe, sin herir el cuerpo va cavando subterráneos en el interior con garras imperceptibles y suaves.
¡Me muero!
París
Quiero reposar en la tierra solamente envuelta en una sábana o si es posible en un pedazo de tierra de la fosa común...
Dejo a mis hijas Elisa y Sylvia todas mis buenas intenciones, es lo único que poseo y mi único tesoro.
*Los textos de Teresa Wilms, así como la foto de la poeta, recostada, aparecieron en ‘Teresa Wilms Mont. Un canto de libertad’ y ‘Libro del camino’, obras completas que de esta autora que preparó para Grijalbo y Randon House Mondadori, 1993 a 2009, la estudiosa Ruth González-Vergara. Amablemente me escribe y recuerda este detalle. Gracias. Estos textos aparecen en otro lugar del blog, sin esta referencia que pongo aquí con sumo gusto.
ESTAMPAS DE VERANO / 1

Inicio aquí una serie de estampas veraniegas, de imágenes de playa y de mar: cuerpos, atmósferas, poemas, sueños. Esta tarde he estado un instante en Antígona y cayó en mis manos un libro, con su propia voz, de Gonzalo Rojas (1917), editado por la Residencia de Estudiantes. No estoy seguro de si estaba este poema, pero me ha gustado, se adapta bien a la serie de lecturas y sugerencias que voy a ir colocando día tras días. RETRATO DE MUJER *La foto, de 1929, es de George Hoyningen-Huene.
Siempre estará la noche, mujer, para mirarte cara a cara,
sola en tu espejo, libre de marido, desnuda
con la exacta y terrible realidad del gran vértigo
que te destruye. Siempre vas a tener tu noche y tu cuchillo,
y el frívolo teléfono para escuchar mi adiós de un solo tajo.
Te juré no escribirte; por eso estoy llamándote en el aire
para decirte nada, como dice el vacío: nada, nada,
sino lo mismo y siempre lo mismo de lo mismo
que nunca me oyes, eso que nunca me entiendes nunca,
aunque las venas te arden de eso que estoy diciendo.
Ponte el vestido rojo que le viene a tu boca y a tu sangre,
y quémame en el último cigarrillo del miedo
al gran amor, y vete descalza por el aire que viniste
con la herida visible de tu belleza. Lástima
de la que llora y llora en la tormenta.
No te me mueras. Voy a pintarte tu rostro en un relámpago
tal como eres: dos ojos para ver lo visible y lo invisible,
una nariz de arcángel y una boca de animal, y una sonrisa
que me perdona, y algo sagrado y sin edad que vuela en tu frente,
mujer, y me estremece, porque tu rostro es rostro del Espíritu.
Vienes y vas, y adoras al mar que te arrebata con su espuma,
y te quedas como inmóvil, oyendo que te llamo en el abismo
de la noche, y me besas lo mismo que una ola.
Enigma fuiste. Enigma serás. No volarás
conmigo. Aquí mujer, te dejo tu figura.
ENRIQUE CEBRIÁN ESCRIBE DE ARAGÓN Y EL MAR

LLAMPUGA
A Íñigo Linares y Jordi Calvís
Por Enrique CEBRIÁN
Ahora que lo veo con sus velas abiertas sobre el Mediterráneo, frente a las costas de Sirualas, y recuerdo que hace poco su quilla cortaba las aguas frías del pantano de Búbal, no puedo evitar pensar en ese viaje, desde Aragón al mar, y en todas las historias y deseos, en todos los poetas, que imaginaron ese sueño antes de que el Llampuga lo hiciese, a su manera, realidad.
Siempre me ha parecido fascinante la relación de Aragón, especialmente de Zaragoza, con el mar. Es el relato del abandonado que nunca superó la huida de la amada. O quizás sea más, quizás sea el delirio tormentoso de quien llora la pérdida de lo que nunca tuvo. Puede que hace millones de años hubiera el mar en este páramo, puede que la última gota dejara, antes de secarse para siempre, un aroma perpetuo, una nostalgia eterna a cuyo dictado, como una maldición bíblica, hubiéramos de someternos todos aquellos a los que el azar nos trajera a nacer o a vivir en esta tierra.
Javier Delgado, en su espléndido poemario Zaragoza Marina (Colección “Poemas”, Zaragoza, 1982), adopta esa óptica del abandono: aquí es una femenina Zaragoza la que se queda sola después de la visita de su amante marino. Sus versos iniciales son adelanto de una catástrofe disfrazada de belleza: “No conoces el mar / (los libros dicen que sube la marea / dos veces cada día) / ni conoces la tarde enfebrecida / de gritos de gaviotas. / Confundirías el ruido de las olas: / no sabrías oír de cada una / un retazo distinto de tu historia. / No naciste para traducir / el canto de las caracolas”. Hace poco reaparecía este raro pero famoso libro en una magnífica edición verdaderamente recomendable, con ilustraciones de Jorge Gay y prólogo de Mainer (Prames, Zaragoza, 2005).
Ha de admitirse que no deja de resultar curioso que estos secarrales hayan parido a hombres como el científico Martín Cortés de Albacar, natural de Bujaraloz, autor en el siglo XVI de un Arte de navegar que fue libro de texto en toda Europa y que conoció numerosas ediciones; o como Pedro Porter y Casanate, marino nacido en Zaragoza en el siglo XVII y que fue explorador de California y gobernador de Chile; u Odón de Buen, a propósito del cual hemos de confesar que hace falta echarle imaginación para creerse que al hijo del sastre de Zuera le dé por convertirse, a finales del siglo XIX y principios del XX, en el padre de la oceanografía española. Un contemporáneo de Porter, el cronista real y cronista de la Corona de Aragón Diego José Dormer, afirmaba en sus Discursos histórico-políticos de 1684 (y no era el único en sostener ideas como ésta) que sería oportuno para Aragón el tener un puerto de mar: Vinaroz, Benicarló, Los Alfaques o hasta Pasajes eran algunas de las posibilidades que Dormer mencionaba. Lo cuenta José Luis Melero en Los libros de la Guerra (Rolde de Estudios Aragoneses, Zaragoza, 2006). Y en el mismo lugar se recuerda cómo en algunas obras literarias y en ciertas solicitudes de ayuntamientos en los años treinta se pedía una salida al mar para Aragón, o para Zaragoza concretamente, en pago generalmente –se decía– a la fidelidad de la ciudad al movimiento nacional. Sin necesidad de tener que ser fiel a cosas tan poco merecedoras de tal sentimiento, uno puede observar, paseándose en verano por ciertas localidades costeras, principalmente por Salou-Cambrils, que muy probablemente nos encontremos ya ante un sueño alcanzado.
Si esto último puede todavía no ser compartido por todos (algún escrupuloso purista quedará…), lo que no presenta dudas es que Aragón, en su historia, tuvo mar. Y lo tuvo hasta el punto de hacer afirmar a Roger de Lauria en el siglo XIII que, no ya un barco, sino ni siquiera un pez había en el Mediterráneo que osase moverse por sus aguas sin llevar en la cola las cuatro barras de Aragón. Confieso que desconozco la exactitud del dato, pero hace poco decía Joaquín Carbonell que hasta siete fueron las veces que Aragón tuvo mar. Lo creeremos así, pero, aunque se hubiera equivocado, habrá que perdonar siempre a quien escribió y compuso, allá en los setenta, Me gustaría darte el mar, una hermosísima canción de amor a la tierra y una hermosísima canción de amor sin mayores precisiones, de amor sin más.
Lo de haber tenido mar en el pasado es uno de los asuntos de una divertida entrada en el blog del periodista y escritor Sergio del Molino en la que, tras recordar que el embalse de Mequinenza recibe el excesivo nombre de Mar de Aragón o que al Ebro, a su paso por Zaragoza, le han crecido playas, podemos leer: “No, Aragón no se sacude esa nostalgia. A Aragón le gustaría tener todavía cuarteles de almogávares y un Museo Naval en el paseo de la Independencia”. Del Molino resume muy bien la situación cuando habla de Aragón y su “incurable e infantil nostalgia marinera, absolutamente injustificable, pero encantadora” (http://sergiodelmolino.blogia.com/2006/111001-nostalgia-de-mar.php). Al parisino gusto por las playas fluviales, ha de añadirse la transformación que, en general, han vivido las orillas del Ebro con motivo de la Exposición Internacional de Zaragoza 2008, la cual ha dado pie al número 6 de la revista Aragón en Portada (julio de 2009) a hablar incluso, ahí es nada, de “la costa zaragozana”.
Aparte del caso de Carbonell, hay presencia marina en la música de Héroes del Silencio, de Más Birras, de Ángel Petisme o de Amaral. Y, cómo no, en diversas canciones de José Antonio Labordeta, entre las cuales destaca su Zarajota Blues, tema que ha interpretado y grabado junto a Joaquín Sabina y en el que se recitan unos versos en los que, tras llamar a Zaragoza cosas como “madrastra” y “madre inútil”, le lanza esta pregunta: “Vieja tumba crecida a mis espaldas, / ¿a qué hora abandonas el mundo / para huir con nosotros hacia la hermosa mar / tan dulce y tan lejana?”. Labordeta es asimismo autor de un libro misceláneo, Tierra sin mar (Xordica, Zaragoza, 1995), en el que se dan cita los recuerdos personales y el análisis socio-político de la realidad aragonesa. Labordeta –que vio el mar por primera vez, aguas besadas por el Cabo de Salou, a los veintitrés años desde lo alto del Campamento de Milicias Universitarias de Castillejos– cuenta cómo hasta entonces su mar personal fue la Plaza de Lanuza y el Mercado Central, con su trasiego.
Si seguimos en el ámbito de la literatura, nos viene rápido a la mente el conjunto de poemas de He roto el mar, escrito por Manuel M. Forega (CSIC, Madrid, 1987; 2ª edición corregida y ampliada en Prensas Universitarias de Zaragoza, Zaragoza, 1993). Un libro robado a la vida y a los libros, con esa vastedad precisa (valga el oxímoron) que tiene el idioma de este autor.
Y no podemos olvidarnos de Antón Castro y de ese diccionario al revés que es el libro Zaragoza, de la Z a la A (DPZ, Zaragoza, 2003), en el que participa precisamente escribiendo la entrada “Mar” (esto ya de por sí chocante en un libro dedicado a Zaragoza y su provincia) y contando que llegó a la capital de Aragón en su busca; lo cual, viniendo de Galicia, no deja de tener mérito. Sin embargo, el libro en el que definitivamente lleva a cabo su declaración de amor marina es Golpes de mar (Destino, Barcelona, 2006), que toma precisamente su título de una canción de Petisme, y que es considerado por su autor el libro de su vida. En su más reciente Fotografías veladas (Xordica, Zaragoza, 2008) vuelven a aparecer, entre otras, dos de sus pasiones: Zaragoza y el mar.
Podríamos seguir. Probablemente se queden en el tintero que no uso otras muchas referencias. En cualquier caso, estas líneas en ningún momento han pretendido, pese a lo que pudiera parecer, convertirse en un catálogo exhaustivo de la relación de amor-desamor mantenida entre Aragón y Zaragoza y el mar. Creo además recordar ahora que Félix Romeo ya escribió algo parecido en su columna “Las Naturales” de Heraldo Domingo. O quizás lo soñé.
Como digo, esto no es un listado definitivo y exacto. Ni lo pretende tampoco. Se trata tan sólo de recuerdos venidos a mi mente mientras, sentado en la playa de Sirualas, veo a lo lejos navegar al Llampuga. Comienza el verano y es probable que algunos de ustedes, desafiando al secano, al asfalto y a la crisis, se acerquen un instante a la orilla del mar y que lo hagan guiados por la nostalgia de un sueño. Si tienen entonces la suerte de alzar la vista y ver este velero que es un sueño hecho realidad, envíen un saludo a sus tripulantes; ellos, desde el mar, abrirán una lata de cerveza a su salud, brindarán por ustedes y les desearán –como hago yo ahora– un muy feliz verano.
*El narrador y poeta Enrique Cebrián me manda este texto sobre Aragón y el mar y los sueños marinos. Me encaja perfectamente en la nueva serie que he abierto, ‘Estampas de verano’, y además le agradezco ese recordatorio de algunos libros míos vinculados con el mar. La fotografía es anónima y norteamericana.
SANYA RICHARDS: REINA DEL GOLDEN LEAGUE DE ROMA

Ya ha vuelto el atletismo al verano. Iba a ir mañana a Arteixo-A Coruña a buscar a mi madre, pero al final, por un enfriamiento y otras cosas incómodas, he decidido dejarlo para la semana que viene. Tenía mucho trabajo para el fin de semana, pero así he podido aplazarlo suavemente: estoy preparando un artículo sobre Ricardo del Arco y la fotografía para el lunes.
Me he tomado un instante de relax y me asomé a la Golden League de Roma: he visto fallar en Yelena Isinbayeva en 4.95, he visto fallar a Irving Saladino (campeón del mundo y campeón olímpico) ante Dwight Phillips, un clásico, en una bonita prueba de salto de longitud (por ahora no hay recambio de Carl Lewis, Mike Powell e Iván Pedroso), y me he quedado con una preciosa carrera de 400 metros, donde Sanya Richards, probablemente una de las mejores corredoras de la categoría (lleva 36 carreras invicta en esas pruebas de la Golden League), venció a Allyson Felix, desconocida como en Pekín, y a la esperanzadora Libania Grenot, una espectacular italiana, por ahora más hermosa que buena atleta. Al menos, hoy, se desfondó. Los últimos cien metros de Sanya fueron realmente preciosos: parecían un huracán o la hermana mayor de Usain Bolt.
En 1500, Higuero y Casado estuvieron bien, entre el sexto y el décimo, y Mayte Martínez volvió por sus fueros: pareció que iba a ganar en 800, pero al final quedó tercera. Los comentaristas recordaron una y otra vez que no estaban las seis mejores del mundo: con todo, Mayte es una maravillosa competidora que se ha resucitado a sí misma, tras diversas lesiones. Posee un gran sentido competitivo, se coloca estupendamente, y en ejecuta unos últimos 50 metros estupendos. La carrera de 800 es, por lo regular, bellísima.
ARAGONESES EN LA RESIDENCIA DE ESTUDIANTES

Una violinista, un historiador y una química son, a propuesta del comité de selección, los beneficiarios de las tres becas del Gobierno de Aragón para la Residencia de Estudiantes de Madrid, unas ayudas que les permitirán desarrollar sus estudios y acabar sus tesis doctorales.
El pasado miércoles se reunió el comité de selección para entrevistar a los candidatos finalistas y analizar sus proyectos. El comité, presidido por el viceconsejero de Educación, Cultura y Deporte, Juan José Vázquez, estaba formado por el director general de Cultura, Ramón Miranda; la directora de la Residencia de Estudiantes, Alicia Gómez-Navarro; José Luis Borau, escritor, director, productor de cine y académico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando; José-Carlos Mainer, catedrático de Literatura Española de la Universidad de Zaragoza, y Luis Oro, catedrático de Química inorgánica de la Universidad de Zaragoza.
A propuesta de este comité, la candidata seleccionada en el apartado de creadores y artistas es Alma Olite Gorraiz, que con esta ayuda podrá concluir sus estudios de violín en la Escuela Superior de Música Reina Sofía de Madrid. (Alma Olite es una estupenda violinista que actuó no hace muchos meses en ‘Borradores’ y ofreció un espléndido concierto en el Audiorama de Zaragoza. Lleva ya algunos años en la Residencia, y le han acondicionado un espacio para ella, para sus ensayos. Tiene un inmenso talento.)
En el apartado de Ciencias Sociales y Humanidades, ha sido Ángel Alcalde Fernández el candidato elegido. Este joven realizará su tesis doctoral sobre ‘Los excombatientes franquistas. La experiencia de guerra del fascismo español y la delegación nacional de excombatientes (1936.1965)’.
Carmen Barba González-Albo es la candidata seleccionada en el apartado de Naturaleza y Tecnología y su objetivo es realizar su tesis doctoral sobre ‘Obtención de enantiómeros puros a escala preparativa a partir de mezclas multicomponentes utilizando cromatografía en lecho móvil simulado con fluidos supercríticos’. [Carmen lleva algunos cursos en la Residencia, donde coincide, entre otros, con el poeta y ensayista Juan Marqués, que ultima su tesis doctoral].
Ésta es la cuarta edición de estas becas después del convenio de colaboración firmado, en 2006, entre el Gobierno de Aragón y la Residencia de Estudiantes de Madrid, fundación creada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y que realiza, entre sus variadas actividades culturales, estancias en la residencia de investigadores, artistas y otros profesionales, de los campos más diversos, procedentes de todo el mundo.
El Departamento de Educación, Cultura y Deporte se encarga de la dotación económica de las becas y la Residencia de Estudiantes presta los servicios de alojamiento y manutención.
*En la foto, Alma Olite, la violinista nacida en Pamplona y formada y educada en Zaragoza. El grueso del texto pertenece al gabinete de prensa del Gobierno de Aragón; he añadido algunos detalles. Conozco a Alma Olite y he conocido también a Carmen Barba. Los compañeros de Alma en la Residencia acudieron en su mayoría al concierto del Auditorio.
OUKA LEELE: DOS POEMAS

Hace unos días, decía Barbara Allende Gil de Biedma (Madrid, 1957) que no se sentía identificada cuando la calificaban como fotógrafa. Es una excelente fotógrafa, sin duda, Premio Nacional de Fotografía. Hace algunos meses vi su exposición ‘Ouka Leele inédita’ y me pareció la mejor de las suyas, una de las más sorprendentes, una de las más fascinantes, tenía algo de retrospectiva, de cuaderno secreto, de álbum de fotos ocultas. Esta foto, de desnudo con trucha, pertenece a esa muestra.
No obstante, Bárbara Allende-Ouka Leele también es poeta. Ha publicado varios poemarios, fue galardonada en el certamen de ‘Cuentos de miedo’ que convoca Olifante, y estos días aparece ‘Este libro arde entre mis manos’ (Huerga & Fierro), un volumen que toca los temas esenciales de la vida con un aire leve, casi como una danza de luz y de sensaciones, poemas sobre la vida, el amor, la maternidad y el nacimiento, sobre las palabras y sus dones, sobre la naturaleza y sus sones, sobre cómo brota la poesía del interior y se desmelena en un dulce desorden.
Copio aquí dos poemas breves:
Mis pies flotaban
al andar entre una y otra
tenía que escoger una
y escogí ésta:
Amor,
claro,
¿cuál si no?
que dicha con dicha
crea la dicha
de quien la escucha.
*El texto va acompañado de un dibujo donde se ve que el pie pisa ‘palabras’, ‘palabra’ o ‘palabrita’.
Amor
me atrevo a decir
a los cuatro vientos
esperando que el eco
se encargue
de lo que resta,
y como nunca resta
pero sí siempre suma,
se multiplica su efecto
y lo hace perfecto.
JOSÉ ANTONIO CONDE: TRES POEMAS A MUJERES

3 / ESTAMPAS DE LA PLAYA
Olifante cumple en 1979 treinta años dedicados a la poesía. Trinidad Ruiz-Marcellán inició su colección con unas cartas entre Luis Cernuda y Eugénio de Andrade, y desde entonces ha publicado a autores de todas las latitudes con belleza, elegancia y sobriedad.
Uno de los últimos títulos es ‘El ángulo y la llaga’ de José Antonio Conde (Sierra de Luna, Zaragoza, 1961), que lleva una solapa de la joven poeta Almudena Vidorreta. Es un poemario cuyas composiciones tienen todas nombres de mujer, y están dedicadas a mujeres como Delmira Agustini, Salomé, Gerda Taro, Elvira de Hidalgo, Gloria Swanson, Delia del Carril (la mujer de Neruda que encontró una carta de amor y traición) o Casta Álvarez, además de muchas mujeres anónimas, o no tan anónimas, a las que el autor ama, respeta, admira o sencillamente rinde homenaje.
Copio aquí dos poemas:
GLORIA MAY…
Máscara y silencio, se rueda.
El primer plano en la mirada,
los dioses se inclinan en el espejo.
Dos tomas del cisne
para agrupar el icono
que va hundiendo sus labios
en el crepúsculo.
Por última vez,
máscara y silencio, se rueda.
Gesto virtuoso, sin color en los celos.
Al fondo…, se oye un beso.
GERDA
Algo para guarda en la caída, en la mancha insaciable del negativo, algoo que sucede en la geografía del odio y olfatea todas las esquinas del miedo.
Tal vez, las flores abatidas, la prisa de la pólvora en los incultos, sea hielo y esparto, heridas cerca del perdón y piedad en la metralla.
En el tiempo, la reflex sostiene el sacrificio.
DELMIRA
El último amor, el que guarda la simetría del roce en el abismo, calla entre los labios.
El último amor, el que me conduce por los bazares del cuerpo, se pierde justo donde brota la orquídea.
El último amor, aquel epíteto íntimo sobre el cuerpo, permanece al acecho como dos alas negros.
A la pasión le sobran puñales.
El ángulo y la llaga. José Antonio Conde. Solapa de Almudena Vidorreta. Olifante, Ediciones de Poesía. Tarazona, 2009. 60 páginas. En la foto marino, un retrato de Gloria Swanson hacia 1917.
LAS NOVIAS, BORAU, LÓPEZ BANZO... EN BORRADORES

El programa Borradores continuará todo el verano en pantalla. Este es el menú de este domingo; la emisión es hacia la una de la mañana. A veces, suele empezar un poco antes de lo que está anunciado.
El grupo Las Novias, en versión acústica, presenta en Borradores su nuevo disco, ‘Ego’, producido por Los Niños del Brasil y editado por Factoría de Autor. Óskar Díez, a la guitarra, y el vocalista Toño Leza, interpretan dos temas de esta banda ampliamente reconocida en Zaragoza.
Acuden al plató de Borradores, el intérprete e investigador Eduardo López Banzo, director del grupo Al Ayre Español, galardonado en 2004 con el Premio Nacional de la Música. López Banzo recorre los grandes proyectos de una compañía que ha pasado de la música antigua al Barroco y que ha interpretado óperas tan conocidas como el ‘Amadigi di Gaula’ de Häendel y que realiza constantes conciertos en algunos de los lugares más emblemáticos de la música culta. El otro invitado al estudio es la periodista y escritora Margarita Barbáchano, que acaba de publicar su nueva novela, ‘La piscina azul’ (Mira editores), donde relata la historia de un escritor y profesor, Matías, con distintas mujeres: amantes, compañeras de trabajo, novias actuales e incluso una joven huérfana, que acabará por transformar su vida.
Borradores ofrece distintos reportajes: visita, en las salas de la Diputación de Huesca, la exposición ‘Furtivos’ sobre la película de José Luis Borau, y el ambiente intelectual, artístico, político y cinematográfico en la que se gestó esa obra que ya tenía un antecedente en el corto ‘En el río’. Además, desde la galería Aragonesa del Arte, ofrece un recorrido por un singular proyecto de artistas y escritores: ‘Afinidades’, donde conviven María Buil e Ismael Grasa, Enrique Larroy y Manuel Vilas, Gonzalo Tena y Alejandro Ratia, Fernando Sinaga y Jesús Jiménez, y Lina Vila y Félix Romeo. Además, el artista zaragozano Fernando Sinaga, afincado en Salamanca, habla de su doble proyecto: ‘Pantallas espectrales sobre el Ebro’, cuyos bocetos y primeras realizaciones se exponen en los sótanos del Paraninfo, y cuya obra pública se ha instalado a orillas del Ebro.
El escritor Javier Yanes, autor de ‘El señor de las llanuras’, recomienda en ‘Letras para la vida’, el relato de Ernest Hemingway, ‘La nieve del Kilimanjaro’.
*Esta foto es del fotógrato neorrealista italinao Federico Patellani.
VICENTE PASCUAL: VEINTE AÑOS DE PINTURA EN SOLITARIO

Vicente Pascual
1989 / 2008
Opusculum
Inauguración
Miércoles 29 de julio, 2009
Palacio de Sástago
Esta exposición retrospectiva presenta la trayectoria del artista aragonés de proyección internacional Vicente Pascual desde 1989 (año que marca el fin de La Hermandad Pictórica), hasta el año de su temprana muerte. En Opusculum, 108 piezas emblemáticas enuncian el desarrollo de la práctica artística de este pintor que asumió planteamientos platónicos muy olvidados en las corrientes hegemónicas del arte contemporáneo, y cuya obra se caracterizó por la influencia del misticismo oriental y por las referencias cromáticas a los paisajes austeros de su tierra natal.
Vicente inició su práctica creativa con el trabajo en posters con un fuerte contenido político-crítico, y enseguida formó con su hermano Ángel “La Hermandad Pictórica” (1972-1988). En 1975, tras una larga estancia en Pushkar, Rajhastan, el artista descubrió los escritos de Frithjof Schuon y Ananda K. Coomaraswamy, cuya perspectiva filosófica perennialista influyó de forma definitiva en su concepto del arte, posicionándole fuera del pensamiento postmoderno dominante.
En 1992, tras más de una década trabajando en Campanet, a los pies de la Tramuntana mallorquina, Vicente trasladó su estudio a los Estados Unidos —en Bloomington, Indiana, al inicio, y Washington, DC, después— donde su obra fue objeto de una severa transformación, reduciendo su forma a geometrías fundamentales y el color a su expresión más austera. A mediados de 2003 Vicente regresó a España, instalando su estudio primero en Tarazona, cerca del Moncayo, donde comenzó a compaginar la práctica plástica con la poética; en 2006, ya diagnosticado con un cáncer en estado muy avanzado se trasladó a Utebo, a las orillas del Río Ebro, donde murió el 25 de septiembre de 2008, cinco días después de cumplir 53 años.
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Comisarias: Cira Pascual Marquina, Profesora de la Universidad Bolivariana de Venezuela, y comisaria de proyectos como "Exhibiting US Imperialism and War" (Gwangju Biennale, Corea del Sur, 2006) y “At the Mercy of Others: The Politics of Care” (Whitney Museum, 2005); María Luisa Cancela Ramírez de Arellano, Directora del Museo Pablo Serrano y comisaria de numerosas exposiciones desde Goya hasta Serrano.
Catálogo con ensayos de: Antón Castro, Santiago Olmo, Alejandro Ratia, Fernado Huici, María Escribano, Rosa Gutierrez, Angel Guinda, José Corredor-Matheos y otros.
*Cira Marquina Pascual me envía esta nota sobre la exposición de su padre, Vicente Pascual Rodrigo, que se inaugurará el próximo 29 de julio en el palacio de Sástago. Con esta noticia, también va esta foto: Vicente Pascual bajo la noche constelada.
ENRIQUE CEBRIÁN: TRES POEMAS DE 'RECAÍDA'

AGENDA
¡Oh, sí! ¡Trazamos tantos planes…!
Consumimos auroras a la espera
de no sé qué festejos anhelados,
focos y parusías
se estrellaban al pie de la autopista
rotos a doscientos kilómetros por hora.
Aún no nadaban en mi semen los espermatozoides
que te harían fecunda
y ya habíamos escogido
los nombres de toda nuestra tribu, la casa junto al mar
en la que envejecer como dos sabios,
la piedra de las lápidas.
Mientras los días morían tibios y malgastados,
tú y yo nos afanábamos à la recherche du temps futur.
30 DE OCTUBRE
Para María,
este regalo de cumpleaños.
Los años te han sentado muy bien,
hoy te has levantado
especialmente guapa,
te digo mientras desayunamos
–tostadas y dos cafés con leche
antes del trabajo–.
Tú sonríes a mitad de camino
entre la nostalgia y la alegría,
reconociendo la juventud serena
de tu rostro en el espejo,
los sueños de tu infancia
ya cumplidos,
los que aún faltan por cumplir.
Amar tanto la vida presenta,
en ocasiones, sus servidumbres duras,
sus peajes incómodos,
los atascos camino del trabajo
cruzando por las venas
de esta ciudad llena de zetas
cuyo nombre, a veces, nos cuesta pronunciar.
Cuando se tranquilicen
los semáforos,
me invitarás a cenar en ese restaurante
que tanto nos gusta,
te desafinaré una canción de cumpleaños
mientras soplas feliz las velas
de los deseos que aún faltan por venir.
*Enrique Cebrián Zazurca ha sido ganador del Premio de Literatura Joven que convoca el Instituto Aragonés de la Juventud con un proyecto de treinta textos en prosa, titulado ‘Espuma en los zapatos’: notas de viaje y de lectura, poemas en prosa, aforismos, relatos. El segundo premio (y no primer accésit como había escrito antes) fue para Octavio Gómez Milián y Juan Luis Saldaña, que compaginan la literatura con los medios de comunicación y con la música. Y el propio Enrique logró otro accésit por un conjunto de poemas, que agrupa con el título ‘Recaída’. El día 9 de agosto, Enrique será uno de los invitados de Borradores, junto a Carlos Forcadell, que recuerda la vida, la obra y el magisterio de Juan José Carreras, Faemino y Cansado, Dani García-Nieto y la cantante Zahara, entre otros. He aquí tres poemas de ‘Recaída’ de Enrique Cebrián (Zaragoza, 1978). Un volumen publica sus textos y el de otros finalistas y seleccionados. Esta foto de Norma Shearer es de Edward Steichen.
JAVIER RUIBAL ACTUARÁ EL VIERNES EN TÍTERES ARBOLÉ

CONCIERTO DE JAVIER RUIBAL, ESTE VIERNES (17 julio)
En Arbolé, dentro del Ciclo "Música en Verano", a las 22 horas
Queridos amigos,
El Teatro Arbolé de Zaragoza ofrecerá este viernes, 17 de julio a las 22 horas, para el público juvenil y adulto un concierto del cantautor Javier Ruibal, dentro del ciclo Música en Verano y enmarcado en los Festivales del Ebro. Precio de la entrada: 15 euros. Bonificada: 12 euros. Teléfono de reserva de entradas: 976 734466.
Javier Ruibal (El Puerto de Santa María, 1955) es cantante, guitarrista y compositor. Es un buscador de aromas, un perseguidor de la fábula y el ensueño. Retratista de perfiles, paisajista al mismo tiempo, importan el personaje y el paraje exótico que le rodea. Cantar con la voz remota que resuena en la memoria, ecos sefardíes junto a la toná y la zambra, oriente y occidente, ayer y hoy, armonía del futuro, alquimia del presente. Sus fuentes, lo familiar en su infancia; del flamenco, los cantes de ida y vuelta, tanguillos y bulerías; del rock, la vieja escuela; del jazz, el ejemplo, la actitud y la lealtad con la música. De las letras españolas, los hermosos poetas del veintisiete y la poesía con alas. De las letras americanas, los cantores del Caribe y el realismo fantástico. De lo popular, el humor; y de su tierra natal, la alegría. Su propósito, divertir y... acaso emocionar.
Gracias y un saludo.
Ana Rioja - Gabinete de Prensa
Teatro Arbolé
Teléfono: 615 252804
*Recibo esta nota de la escritora y periodista Ana Rioja, que anuncia el concierto de uno de mis músicos más queridos en Títeres Arbolé: Javier Ruibal, al que conocí hace ahora 20 años en un ciclo de conciertos que organizaba Labordeta. Luego coincidimos en varios lugares (por ejemplo en SOS), pero Javier tuvo un detalle precioso: presenté en El Puerto de Santa María mi libro ‘Los seres imposibles’ y él cantó dos canciones a capella. Fue una tarde maravillosa, rodeada de amigos, iluminada con su voz del sur. Hace poco, en Buenos Aires, distintos amigos, especialmente la escritora Mercedes Álvarez, me decía que es uno de los cantantes que más le gusta, que le encantaría que fuese a encantar allí. Javier Ruibal es el cantante de la pasiones y de las mujeres del sur. Acabo de cambiar de ordenador, se me murió el anterior, y aún no sé cómo ajustar las letras. Uso una garamond 12 ahora, pero intentaré ajustarla para que no queden tan grandes las letras. Esta foto pertenece a Ana y al gabinete de comunicación de Títeres Arbolé.
RICARDO DEL ARCO Y SUS FOTOGRAFÍAS DE HUESCA

El cronista visual de los tesoros de Huesca
La Diputación de Huesca y la CAI publican las fotos del cronista e historiador Ricardo del Arco (1888-1955), un defensor del patrimonio
Ricardo del Arco llegó a Huesca en mayo de 1908 y pronto iba a convertirse “en el cronista e historiador más destacado”. Una de las facetas menos conocidas de él era la de su condición de fotógrafo: el volumen ‘Ricardo del Arco. Fotografías de historia y arte 1914-1924’ (Diputación de Huesca / CAI), con textos de Carlos Garcés y Maite Abaurre, supone toda una revelación y una confirmación de que él usó la fotografía, desde muy pronto, como un instrumento de conocimiento y de difusión cultural.
Nacido en Granada en 1888, a los cinco años se trasladó a Tarragona, donde su padre Ángel del Arco fue elegido director del museo de la ciudad; se licenció en Letras en Valencia y de inmediato opositó al Cuerpo de Archiveros. Obtuvo plaza en la Huesca “milenaria y rica en archivos”, donde se hizo cargo del “archivo de Hacienda”, que tenía agregado también el del Ayuntamiento, según narra Carlos Garcés en una completa reseña de los primeros quince años que Del Arco pasó en la que iba a ser la ciudad de su vida. Ese periodo inicial, que él sitúa entre 1908 y 1924, lo resume con tres palabras: “Vida, estudio y trabajo”, vocablos que, en realidad, definen toda su existencia. Del Arco falleció en 1955, tras ser arrollado por un coche en la plaza de Navarra.
Del Arco usaba lentes circulares, sombrero e iba tocado de lazo. Poco días de después de tomar posesión de su nuevo cargo ya escribía en ‘El Diario de Hueca’, y muy pronto iba a publicar libros y monografías y artículos de casi todo: en 1910, firmaba con Luciano Labastida la ‘Guía artística y monumental de Huesca y su provincia”; tres años después, con idéntico colaborador, ‘El Alto Aragón monumental y pintoresco’. Para entonces ya había contraído matrimonio con Luisa Fortuño y ya había sido nombrado cronista de la ciudad. Dos detalles biográficos más, entre los muchos que aporta Carlos Garcés, recuerdan que era profesor de instituto desde 1914 y director de la Biblioteca Pública desde 1915. En 1920, fue el organizador del II Congreso de Historia de la Corona de Aragón.
En cierto modo, Ricardo del Arco fue un pionero del excursionismo, un apasionado del turismo y un defensor a ultranza de las ‘Bellezas del Alto Aragón’, término que usó el fotógrafo Lucien Briet, al que Huesca le rindió un homenaje en 1922. Quizá lo que no se conocía de Del Arco con tanta precisión era su condición de fotógrafo: hace poco se incorporaban a la ‘Memoria Gráfica del Alto Aragón’ de la Fototeca de Huesca más de mil piezas, en placas de cristal y en negativos. Del Arco usaba al menos dos cámaras y se tomaba su tiempo en realizar sus fotos: el libro confirma su apasionada tarea en la Comisión Provincial de Monumentos históricos y artísticos de Huesca.
Esa “incansable labor en pro de Aragón”, que le supuso la concesión de la Medalla de Oro del Ayuntamiento de Zaragoza en 1924, lo llevó a recorrer las iglesias de Santiago de Agüero, San Miguel de Foces, Ordesa, los monasterios de San Victorián y el de San Juan de la Peña, al que acudió con otros excursionistas en 1920 y al año siguiente, a caballo y en medio de una gran nevada. Manuel Casanova, que sería director de HERALDO, firmó una crónica con “agua, truenos horrísonos y relámpagos cegadores”. También estuvo en Roda de Isábena, en el monasterio de Sijena, en Sena, en Fraga, Monzón, Binéfar o Tamarite de Litera. Su afición al traje regional, que compartió con su gran amigo Ramón Acín, lo llevó a realizar fotos en Aínsa, Ansó, Hecho Gistaín y Fraga, donde realizó un álbum completo del vestuario, del casco urbano, de la vida popular, y no solo eso: organizó una Exposición del Traje Regional en Madrid en 1925. Al fotógrafo Del Arco le interesaba todo: las plazas públicas, las calles, los edificios civiles, los retratos de grupo, los monumentos, las procesiones, los retablos, las panorámicas, entre las que destacan las del castillo de Montearagón, las de Nueno y las de Bielsa, el inventario general del patrimonio. Sus fotos muestran cuánto se ha perdido y, a veces, lo que se ha mejorado. Del Arco colaboró con estupendos profesionales de la ciudad como Ildefonso San Agustín, Ricardo Compairé o Fidel Oltra, entre otros, pero él no les iba a la zaga: era observador, tenía buen gusto, componía con elegancia y era paciente. Se esforzaba en captar el misterio de la luz al servicio de los tesoros de una provincia que hizo suya durante casi medio siglo.
MARCHAMALO Y MERLINO: ADVERBIOS DE LETRAS*

Me gustan las palabras. Me gusta bajar por la mañana a comprarlas y elegirlas, una a una, como si fueran albaricoques maduros.
Nunca se sabe qué palabras van a necesitarse a lo largo del día. Nunca se sabe cuáles sacar de casa en la mochila, o llevar en la maleta, de viaje. Cuántos adjetivos –blanco, oloroso, fértil–, cuántos verbos y cómo conjugarlos: te quiero, conduzco, abriendo, he estado, supuse… Cuántos artículos indefinidos. Cuántas preposiciones. Me gustan las palabras. Me gusta atesorarlas, pero también dejarlas escapar, a veces, como si no fueran mías. Neblina pesa tan poco, es tan inerte, que basta con mover los labios para que la mínima racha de viento se la lleve.
Hay decenas de miles de palabras. O más. Palabras construidas en chapa, esqueje; o con madera, tacón; palabras recortadas en papel cebolla, sílfide o liminar; y palabras bastas como una tela vieja: lomera, bayeta, batanar… Dice John Berger, el escritor, que hay palabras que hay que masticar, como si tuvieran nervios: duplicar, irreversible. Palabras que se te hacen una bola, como el filete de un mal comedor: sacramento, pigmentación, geoestratégico… Y hay otras que se te deshacen en la boca, como los versos de un poeta romántico: titilar, libélula…
A mí me ha gustado siempre ulular. Y no me gusta, nada o casi nada, abencerraje. Me gusta merengue, y detesto canaleta. Me gusta decir bucle, y odio decir tajada.
Mi amigo Luis Mateo Díez, con quien me encontraba alguna mañana, alto y delgado, transversal como un quijote, en el bar La Escalinata, en la Plaza Mayor de Madrid, me contó que a él la palabra que menos le gusta es escrófula. Nunca he sabido exactamente lo que significa pero es una palabra horrible. Escrófula. Las palabras de los médicos siempre suenan fatal, a diagnóstico terminal, a desahucio: mesenterio, linfático, tumefacto…
Sin embargo son bonitas las de los oculistas: iris, pupila, miope. Otra palabra que no me gusta nada es espetar. Suena a mecanismo explosivo: espetó. A granada de mano: coges la palabra, la sujetas con fuerza en la mano, quitas el pasador con los dientes, la arrojas lo más lejos posible, te proteges y esperas. Uno, dos, tres, cuatro….
No se ha oído porque la he tirado lejos. Pero desengáñate: ha espetado.
*Los escritores Jesús Marchamalo y Mario Merlino –además, traductor de Antonio Lobo Antunes- acaban de publicar en Eclipsados, fuera de colección, un libro realmente divertido y repleto de talento: ‘No hay adverbio que te venga bien’, que fue también una conferencia en los encuentros de Arenas de San Pedro. El volumen lleva ilustraciones de Isidro Ferrer, y parece un diálogo entre dos enamorados de las palabras, del lenguaje, de la ficción y de la escritura propia y ajena, Merlino y Marchamalo, que tanto monta. Este es el primer capítulo del libro, todo un primor. La foto es Cecilia de Val.
AUTORRETRATO DEL ESCRITOR JAVIER QUIÑONES

Ya hace tiempo que no tengo el favor de los
dioses y que alargo inútilmente mis años.
Virgilio, Eneida, Libro II, v. 633.
He llegado, tras de no pocas adversidades,
a la edad madura de mi vida,
de modo que se hace preciso escribir
algunos versos que hablen de mí.
Cuando mis ojos despertaron a la luz,
era tiempo de edificios derruidos en Europa
y de guerras duramente perdidas en España.
Mi infancia es la memoria del agua,
varada en el Mar Menor y su ribera,
y de las aladas calles de la Ciudad del Aire,
secreta y lejana, improbable como el paraíso.
Fue mi juventud un destino itinerante,
soledad de ciudades apenas entrevistas,
de inviernos ateridos en tierra adentro,
de veranos largos y cálidos frente al mar.
Yo también, como casi todos, he vivido
algunas historias que me duele recordar.
Mas he conocido la plenitud del amor
que desbarata las sombras y la dicha
de haber amado intensamente y el gozo
de prolongar el amor en otras miradas
que pertenecen a otra edad, a otro tiempo,
a un incierto futuro que ya no será mío.
Ni me gusta el mundo en que vivo
ni el tiempo que me ha tocado vivir.
Con los años he ido perdiendo,
irremisiblemente, la fe en los demás.
Me gustaría escribir que soy libre y feliz,
pero me lo impide la agónica mirada
de los niños que se mueren de hambre.
En el fondo de mi corazón enajenado,
a despecho de la miseria y la injusticia,
aletea indeleble el vuelo de la esperanza.
La memoria sustenta siempre mi escritura
y la melancolía de los sueños imposibles,
desarbolados en el árido combate
contra la dureza altiva de la vida.
Lo que más me gusta es escribir
y leer lo que otros han escrito,
siempre que me resulte dulce y útil.
Es probable que también mi voluntad
sucumbiera en una noche de luna,
mas hace ya tiempo que perdí el favor
de los dioses y alargo, en vano, mis años.
Para cuando llegue el final del sueño,
que no tenga la luz color de cementerio
ni se estremezca el viento de la tarde,
que me lleven lentamente las sombras
y que naufrague mi voz, desmoronada y sola,
en el oscuro mar de la calma y el olvido.
Nota. Mi libro de escolaridad, “Estudios de Bachillerato. Libro de calificación escolar”, se abre el 30 de marzo de 1964 en el Instituto Nacional de Enseñanza Media “Isaac Peral” de Cartagena. Durante el curso 1963/1964 estudié el preparatorio en el colegio “Ruiz de Alda” de la Ciudad del Aire. Mi profesor, único para todas las materias, fue Don Eliseo. Con fecha 30 de mayo de 1964, esto es, sin haber cumplido aún los diez años, me examiné en el instituto de Cartagena “Isaac Peral”, por libre, en la prueba de “Ingreso en el Bachillerato Elemental” y obtuve la calificación de “Admitido (8)”, según reza en el libro de escolaridad con fecha 30 de mayo de 1964. La foto que acompaña este autorretrato es la que figura en la primera página de ese Libro de escolaridad. Cuando me la hicieron, me faltaban tres meses para cumplir diez años. Sobre el cabello, que acabé perdiendo, se advierten las huellas de la grapa que adjuntaba la foto al mencionado documento escolar.
*Me encantan los autorretratos, esa preciosa serie que desarrolla en su blog Fernando Valls. Encuentro en el de mi amigo y admirado Javier Quiñones este suyo y lo traigo aquí. Me encanta además este retrato en verso, aunque me descorazona un poco ese fondo de pesimismo.
EUSEBIO AGUILERA DEBUTA CON 'MANANTIAL DE FUEGO'

TUS LABIOS
Tus labios son
la flor de un sueño,
guardado en mis manos abiertas,
bañadas por la blanca luna
y el reflejo dorado de tus cabellos,
en las noches preñadas de pasión
donde sólo el rumor de tu ser
acalla los gritos perdidos de la luz.
Tus labios son
paraíso de los sueños
que los duendes guardan
en los bosques secretos del amor,
allí, donde sólo llegan
-vagabundos en las tinieblas del placer-
Tu amor y mis sueños.
T O D O
Esperar que la mañana brote
rompiendo el hielo cristalino del alba,
que la luz posea con rayo mortecino
a la noche fugitiva,
que el cielo se desgarre
en un soplo vital sobre las nubes,
que el fuego purifique
en inmolación letal la tierra,
que el tiempo se pierda
en los laberintos del recuerdo,
todo es esencia del ser,
se pálpito cruje
como árbol moribundo
que el alba besó postrero,
mientras tu existencia,
tu recuerdo,
tu latir,
habita en el último poro de mí ser,
que se ahoga en el mar perpetuo del deseo.
B E B E R É
Beberé de tus besos
porque el agua que brota
de las entrañas de la tierra rota
entre las oscuras rocas
no sacia mi sed eterna.
Beberé de tus besos
en la noche oculta,
en la mañana desnuda,
en la sobriedad de la nada.
Buscaré vasijas sagradas
para guardar tus besos
y que no se pierdan
en las profundidades frías
de los pozos sombríos
de los olvidos marchitos y ajados
de la soledad mía.
*Eusebio Aguilera alterna su trabajo de ingeniero en la General Motors con la poesía. Acaba de publicar su primer poemario: ‘Manantial de fuego’, y me envía tres de sus poemas. La foto es de Ellen Kooi.
VALERIE MRÉJEN: 'EL AGRIO', UN LIBRO ESPLÉNDIDO

Hoy he leído ‘El agrio’ (Periférica, el sello de Julián Rodríguez) de Valérie Mréjen y me ha encantado. Es un libro realmente espectacular, una historia de amor entre una muchacha, la que cuenta la historia de modo fragmentario, como si fuesen imágenes o instantes de una películas, y Bruno, un hombre raro, excéntrico, de vida oculta, proclive al extrañamiento, al engaño, a la indiferencia, a la arrogancia. Hace películas, reflexiona sobre lo cotidiano, usa una cámara Leica, es capaz de ir a ver ‘La joven de la perla’ de repente y desparece como por arte de magia. No le gusta besar en público a su novia; es más que probable que tengas otras amantes y no sabe apreciar los gestos de cariño. O eso parece. Es un libro rápido, maravillosamente escrito y traducido, que te deja casi sin aliento. Es la vida de alguien que ama con locura y no enciende la llama del deseo o del amor en el objeto de su pasión, aunque hay mucho más.
Valerie Mréjen además es artista plástica y próximamente expondrá en Barcelona. Había logrado un gran éxito con su libro ‘El Abuelo’. Este es aun más corto, pero es una demostración de la sabiduría narrativa. Esta foto es de Stephanie Solinas, creo.
DÉBORAH VUKUŠIĆ: UNA NIÑA ENTRE ESCOMBROS

LA BATALLA DE DÉBORAH VUKUŠIĆ
O UNA NIÑA ENTRE ESCOMBROS
Una gallega croata reanima el ambiente literario con su primer libro
Xoán ABELEIRA
Corre el aire por Madrid. Por el Barrio de Lavapiés. En el bar Tapas y Fotos, abarrotado hasta los goznes, reina un cierto ambiente beat. Esta noche se han reunido allí trece confabuladores que afirman practicar una poesía alternativa, al margen de premios y prebendas. Cada quince minutos, dos nuevas ráfagas de versos corrosivos, “neorrabiosos”. Interesantes todos. Más bien por sus temáticas que por sus estilos. Menos modernos, quizás, que los del viejo Arthur Rimbaud cuyo rostro ondea en una camiseta: I’m a fucking poet. El cotarro se anima. Jaleos y vítores, juegos y canciones se entremezclan con el vaho de los alcoholes y el humo de las blandas. Sin embargo, todo el mundo parece estar aguardando lo mismo: que suenen las doce y salga al escenario improvisado la principal impulsora del evento. Una mujer nacida en Ourense y criada en Vigo. “Me llamo déborah vukušić/ soy dos mitades/ mitad gallega y mitad croata/ tengo 26 años/ 23 de mayo de 1979/ salgo a la luz// déborah en hebreo/ ‘abeja’/ vukušić en croata/ uši: ‘orejas’/ vuk: ‘lobo’// abeja con orejas de lobo.”
Es un manifiesto que todos conocen. Muchos lectores, muchos oyentes ya. Es el inicio de Guerra de identidad, el primer libro, como tal, de una escritora, actriz, guionista, directora… que tiene alborotado el ambiente in español. Y al verla interactuar así, en carne viva, los versos de ese fenómeno literario que en menos de un año ha alcanzado su segunda edición revisada y ampliada con un nuevo poemario (Cuaderno de batallas) se comprende la razón. Pues esta mujer animal, mitad abeja, mitad loba, es condenadamente buena. Escandalosamente peligrosa para aquellos que se niegan a ceder su poltrona.
Vukušić (pronunciado vúcusich, “como malković, como mijatović”, dice ella en su video irónico de promoción) comenzó a escribir “en Galicia, desde niña, una suerte de vómitos, aunque hace poco destruí todo aquel material, para mí ya de desecho”. Resumir su trayectoria no es fácil, y eso que apenas ha despegado. Digamos que a los dieciocho años se fue a Alcalá de Henares a estudiar Filología Hispánica, carrera que completó en Estados Unidos y Francia. Digamos que a los veintiún ingresó en la RESAD para convertirse en la extraordinaria actriz que es ahora y trabajar en cine, teatro y televisión. Digamos que en La Abadía “hice un cursillo con Ana Vallés, y fue en él, a partir de improvisaciones personales, cuando empezaron a nacer los textos de Guerra de identidad”. Dos antologías, Poesía Capital y 23 Pandoras, terminaron de lanzarla. Y desde entonces sin tregua. Ahora va a publicar “un nuevo poemario, Perversiones y ternuras”, y a participar en “otra antología titulada La manera de recogerse el pelo: Generación Blogger”, que da cuenta de este movimiento en el que ella se reconoce.
Vukušić interpreta perfectamente en cuatro idiomas, incluidos el gallego y el castellano, en los que habla y escribe. Tal vez por su propia naturaleza, tal vez por su propia herida (de la cual habla en su libro, con la guerra de Yugoslavia y la ruptura de su familia como telón de fondo), vive a autobús, más que a caballo, entre España y Galicia, entre una cultura y otra, fundiendo y fundiéndose en ambas. De hecho, Guerra de identidad está trufado de referencias a su “madre gallega/ de poder/ de mando”, a la que ella adora, así como a la lengua, a la música, al folklore que mamó de ella. El verano pasado Vukušić concibió, dirigió y presentó un magazín en Localia; hace unos días participó en una serie de la TVG, y ahora intenta “filmar un guión basado en relatos de Álvaro Cunqueiro”.
La “poesía de la conciencia, de la no-ficción” que esta compoñedora de sí exuda por los cuatro costados aspira “a una verdad limpia, directa, sin retórica de ningún tipo”. Apartarse “lo máximo posible de esas reglas academicistas” que ella conoce tan bien. “No busco palabras grandilocuentes sino corrosivas, en el sentido de que sean capaces de erosionar los prejuicios y las mentiras, las máscaras y las armaduras. Que la punta del iceberg se vea por fuera, sí, pero que las aguas sean lo suficientemente transparentes como para que también se divise el fondo.”
Nadie se pone de acuerdo acerca de qué diablos practica esta mujer, ni siquiera ella misma: “Yo no escribo poesía.” Como ella, sus textos son dos mitades: mitad líricos, mitad dramáticos. De ahí su admiración por autores como Anne Sexton o Bertolt Brecht, Federico García Lorca o Heiner Müller. De ahí, asimismo, la fuerza que contienen y con la que te atrapan sin remedio. Aun así, no es lo mismo leerlos en soledad que escuchárselos a ella, sentirlos en su voz. Sus monólogos, sus exorcismos, sus conjuros, todos los fragmentos inclasificables de ese diario de guerra interior, todos los despojos de aquella niña que asistió al desmoronamiento de su mundo, son auténticos, no hay duda. Pero el engado de esta croata gallega, de esta gallega croata reside en otro lugar. La verdadera obra de Déborah Vukušić es ella, Déborah Vukušić: la abeja y la loba en acción.
*Este artículo pertenece es un reportaje, que ha publicado ‘El País-Galicia’, del escritor y poeta Xoán Abeleira. La foto la tomó el poeta ante el Centro Dramático Nacional, en Madrid.
NOTAS DE LECTURA

El agrio
Valérie Mréjen. Traducción de Sonia Hernández. Periférica. Cáceres, 2009. 90 páginas.
He aquí un libro delicioso y no precisamente feliz. Con un ritmo vertiginoso y fragmentario, la escritora francesa, nacida en París en 1969, cuenta la historia de amor de una joven hacia un tipo extraño, entre arrogante y excéntrico. Con aparente distanciamiento, habla de sus sueños respecto a él, de las traiciones, de los silencios y de la vana tentativa de ser correspondida por alguien que lleva una Leica, que rueda raras películas, que parece estar siempre en otra parte, con otra mujer, viajando a ver ‘La joven de la perla’, encerrado en un cine o dispuesto a discutir y pensar sobre lo cotidiano. En cuanto se llega al final, se desea volver al principio. Es estupendo.
En las montañas de Holanda
Cees Nooteboom. Trad. de Felip Lorda. Siruela. Madrid, 2009. 152 páginas.
El once de agosto de 1984, Cees Nooteboom ponía punto y final a esta novela que tiene como narrador al inspector de carreteras, de Zaragoza, Alfonso Tiburón de Mendoza. Es él, que ha estudiado en Delft, quien cuenta la historia de Kay y Lucía, dos artistas de circo que podrían haber salido del relato ‘La Reina de las Nieves’ de Andersen. A él lo secuestran y ella emprende un viaje de búsqueda que es, ante todo, una reflexión sobre la literatura, los cuentos de hadas, el mito, las odiseas de la vida y la idea de la perfección absoluta del amor que viven los bellos jóvenes, quebrada de golpe por un inesperado suceso. Tiburón de Mendoza, apasionado por Platón, tiene un deseo: ser escritor. Y aquí, palabra a palabra, historia a historia, edifica todo un universo literario de ilusionismo y aventura.
Mil caballos
Robierto Piumini. Traducción de Helena Lozano. Siruela. Madrid, 2009. 144 páginas
Este es un espléndido libro para niños de todas las edades. Para todos los lectores. Es un tratado sobre la imaginación, forjado con historias de caballos. Aquí se cuenta la historia de cómo Neptuno cambia de color la piel de un équido: de negro a blanco; de cómo Alejandro doma a un caballo intratable, Bucéfalo, que lo acompañará en sus batallas; de cómo un caballo salvaje pintado ante la fachada de una casa cobra vida y huye hacia el llano, o de cómo el niño autista Diego halla consuelo y solaz a lomos de Ascuas. También se habla del unicornio, una suerte de animal sagrado, del caballo de Troya, etc. Este es un volumen mágico, repleto de sueños, de leyenda y de auténtica poesía.
Marcos Mostaza tres
Daniel Nesquens. Dibujos de Claudia Ranucci. Anaya, 2009. 110 páginas.
Tercera entrega de esta serie protagonizada por el joven Marcos, zaragocista hasta la médula. En esta ocasión, el relato arranca con la antigua fascinación de los molinillos de café de su madre. Pronto nos enteramos de acaba de caer del cielo un tornillo, no se sabe si es de un cohete, de un avión o del Discovery, de que Hanif ha escrito dos líneas de una historia de ciencia ficción, que lleva por título provisional ‘Lechuga 222’, o de que Lenin, el azote del vecindario, vuelve a las suyas. Nesquens hace dialogar a sus personajes, se fija en los pequeños detalles, vuelve a usar el email para enriquecer el curso de la historia. En sus historias siempre asoma el barniz surrealista de lo cotidiano.
*La foto es de Miss Aniela.
LOS ARTISTAS DEL CUARTO ESPACIO: SILVÁN, LOZANO, LETTO...

Cristina Silván ha sido la ganadora del concurso de pintura Isabel de Portugal que se expone en el Cuarto Espacio. Se trata de una pintora que encarna el rigor, la sobriedad y la elegancia de la geometría; quizá su obra acuse una cierta frialdad, pero posee calidad, gusto, refinamiento y pasión la belleza. Actualmente está becada en la Casa de Velázquez. Un retrato de Eduardo Lozano, muy matérico, de pincelada suelta y laboriosa, ha recibido una mención de honor. Capta los gestos y la personalidad de Luis Buñuel, a la manera de los vanguardistas alemanes. Otra mención ha sido para José Moñu y su ‘Despedida de solteros’, que posee sentido plástico y una gran fuerza expresiva.
El joven Yann Letto, músico y artista plástico, recibió el premio al artista menor de 30 años por una pieza de gran fuerza, ‘Viva África’, que es una obra mestiza que utiliza distintas estéticas estéticas de la cultura popular.
La exposición es rotunda y variada. El gran formato global de las obras, 18, le confiere una personalidad especial al conjunto. Ahí están varios de los artistas jóvenes más prometedores: José Ramón Magallón, Álvaro Díaz-Palacios, Javier Joven, Sarah Shackleton, Juan Zurita, etc. Artistas que poseen energía, talento, curiosidad y auténtica vocación por el viejo oficio de pintar. Quizá sea una de las mejores exposiciones del premio Isabel de Portugal en mucho tiempo y, sin duda, una de las que ensalza la pintura.
VALÉRIE MRÉJEN: 'MI ABUELO'

Se me había pasado ‘Mi abuelo’ (Periférica, Cáceres) de Valérie Mréjen, la autora de ‘El agrio’. Esta noche no he podido dormir demasiado bien y lo he leído de un tirón: una historia familiar, escrita como el ‘Yo me acuerdo’ de Georges Perec. La autora, con escasos trazos, va conformando un auténtico friso familiar, un álbum de secretos y de detalles, de pequeñas peripecias de amor y desamor, gestos, las comidas familiares, los amantes contingentes, la compleja maraña de relaciones entre los tíos y tías, los abuelos y sus amores, los padres y sus amantes, los hermanos y sus juegos, las rarezas, la tentación incestuosa.
Hay momentos maravillosos. Y todo, con esos destellos, con esas frases de dos o tres líneas, va ahormándose en un espléndido retrato de familiar, en el que es tan poderoso lo que se ve, lo que se dice, como lo que se intuye, como lo que se imagino, lo puramente entrevisto.
Me ha gustado especialmente esta revelación:
“Había un olor especial a tierra mojada o a maleza que yo identificaba con el olor a orugas aplastadas. En cuanto me llega a la nariz, puntualizaba: ‘Huele a oruga aplastada”.
Y esta anécdota:
“Antes de abrir una agencia inmobiliaria con escaparate a la calle, mi padre tenía su despacho en la calle de la Victoire.
En el mismo piso vivía una prostituta. La mujer de uno de los clientes de la prostituta había pintado con rotulador las paredes del hueco de la escalera. Ponía ‘la puta en el segundo’, ‘la puta es aquí’, con flechas que indicaban el recorrido”.
Estas frases revelan también cómo está escrito el libro: como un breviario, como un manual de fogonazos breves, como recuerdos impresionistas (“Mi padre nos pellizcaba a mejilla dando un tironcito, y se llevaba la punta de los dedos a los labios”).
Pese a todo, creo que me ha gustado más ‘El agrio’.
*La foto es de Mclain D. Swift.
FRED VARGAS: UN DIÁLOGO CON SOLEDAD ALCAIDE EN GIJÓN

Soledad ALCAIDE / Gijón. [El País. Edición de hoy]
Fred Vargas está en Gijón. La estrella invitada de la Semana Negra es esta escritora francesa un poco extravagante, que no se prodiga en público, que apenas concede entrevistas y que anda siempre muy ocupada. Su vida se divide entre su actividad política -lleva años abanderando la inocencia de su amigo Cesare Battisti, encarcelado en Brasil pendiente de su extradición a Italia por un crimen que dice que no cometió-, y su actividad profesional como arqueozoóloga.
"Todos mis amigos me habían hablado de la Semana Negra, pero hace cinco años que no voy a ferias de libros. He estado tan metida en mi investigación sobre la gripe A que no tenía la cabeza para hablar de mis historias literarias", explica esta escritora, menuda, tímida, que no aparenta los 57 años que tiene. Además, confiesa, hasta hace muy poco tenía terror a los aviones. Y ha sido precisamente su actividad política la que le ha obligado a superarla. "He volado 44 veces a Brasil", asegura.
Luego está Paco Ignacio Taibo II. El escritor mexicano, originario de Gijón, es el director de la Semana Negra, pero casualmente es el referente literario de Battisti. La persona por la que se lanzó a la escritura. "Le he pedido a Taibo que me escriba una nota para llevársela a la cárcel", cuenta Vargas. "Será muy importante para él llevarle unas líneas de la persona que lo ha hecho escritor".
La otra razón por la que Vargas ha elegido Gijón es la idiosincrasia de la Semana Negra, un encuentro literario ecléctico donde se sucede la charla con la lectura de poemas, la presentación de libros y, por las noches, la juerga entre escritores. "Me horripila firmar libros por una cuestión de timidez", afirma la novelista. "No me importa hacer un debate delante de mucha gente, pero delante de una persona que no conozco me pongo roja, me dan ganas de huir", insiste. "Y de la Semana Negra me habían hablado tanto... Tenía ganas de ver el lado festivo".
Mientras da cuenta de unas croquetas de foie, la especialidad del restaurante Ciudadela, donde Manuel Vázquez Montalbán venía a comer cuando visitaba la feria literaria, hecho que no le ha pasado inadvertido, Vargas insiste en su timidez enfermiza. Hasta el punto de que, dice, se alegra de que los escritores no sean a menudo reconocidos en la calle. Y cuenta que, unos minutos antes de la comida, una mujer la paró: "¿Es usted Fred Vargas?", le dijo. "Normalmente, no", contestó ella.
A la hora de elegir la comida, no se atreve a probar el vino y pide un plato ligero: Carne con verduras y patatas asadas. Porque la noche anterior fue a cenar con sus editoras y Taibo. "Cenamos, bebimos, cantamos... Nos acostamos muy tarde", cuenta. Así que pide cola light.
Mientras llegan los platos, Vargas, que tiene unas manos finas, huesudas, con un sencillo anillo, hace dibujos para explicar sus afirmaciones y mira directamente a los ojos. Es metódica, como buena investigadora. Habla despacio y, de vez en cuando la interrumpe su amigo Edmond Boudoin, dibujante de cómics, con el que ha escrito una novela gráfica al alimón, y que la conoce perfectamente. Él es el culpable de que Vargas publicara -"Me presentó a mi editorial", explica ella- y una de las personas que la convenció para ir a Gijón. La conoce bien y sólo la interrumpe para precisar por qué hace las cosas.
El encuentro de Vargas con la novela negra fue un poco por rebeldía a su padre. "Mi trayectoria como lectora ha tenido cierta decadencia, porque mi padre, que era un surrealista, me hizo leer de pequeña a los grandes clásicos, toda la literatura del siglo XVII al XIX. Me puso la cabeza como un bombo con la gran literatura, porque denostaba la novela policiaca", relata. Así que ella la leyó a escondidas.
"Al principio, los ingleses. No reniego de Agatha Christie ni, sobre todo, de Sherlock Holmes", dice. Luego su hermana gemela, Jo -culpable de que adoptara el seudónimo de Vargas, porque ella, que es pintora, comenzó a utilizarlo antes, como homenaje al personaje de Ava Gardner en La condesa descalza, María Vargas-, la introdujo en los autores americanos. Y vieron juntas el cine negro de Hollywood. Su hermana es una referencia vital. Tanto que aprovecha para enviarle un sms de camino a la sesión de fotos en el puerto marítimo de Gijón.
Vargas defiende constantemente el género negro. Asegura que es la literatura "más arcaica", pues tiene la misma estructura que las grandes epopeyas clásicas. "Pero en la tradición francesa, si haces una novela ligera, para distraer, eso no se considera literatura", se queja. La escritora francesa también defiende la técnica. Sostiene que su flaqueza es la falta de imaginación y que siempre escribe la misma novela. "Libro tras libro, objetivamente, hay una historia, pero detrás no cuento nada. Tengo la impresión de que no escribo historias mías, sino que me limito a transcribir las de otros. No pretendo dar un mensaje", afirma. Y reconoce su incapacidad para trasladar a la literatura su activismo político. "No sé por qué, pero no me sale", afirma.
Fred Vargas publica en octubre Un lugar incierto (Siruela), su última novela en España. En ella aparece de nuevo el comisario Adamsberg y recupera el mito del vampiro clásico. "No es por provocación, pero no me molesta hacer novelas leídas por todas las categorías sociales, que sean fáciles de leer. Es que procuro hacerlas más fáciles. Me gusta que mis novelas sean populares", defiende.
*Cada día me interesa más la novela policíaca, la novela negra. ‘El País’ publica esta estupenda entrevista de Soledad Alcaide con la escritora francesa Fred Vargas. De inmediato me voy a zambullir en su nueva novela. La foto es de Daniel Mordzinski, el gran fotógrafo de los escritores.
BRENDA ASCOZ: UN POEMA DE 'ECORCHÉ'

Hace algunas semanas, la escritora Brenda Ascoz (Torrejón de Ardoz, Madrid, 1974) publica su segundo poemario. El primero fue ‘En Ajeno’ (Chorrito de plata, 2007), y ahora es ‘Ecorché’ (Eclipsados, el sello que dirige Ignacio Escuín), un libro sobre el cuerpo y el otro, la simetría, la mirada desde la ventana, algunas experiencias amorosas e isleñas, el desarraigo y la búsqueda incesante de un lugar en el mundo, en la noche y en los sueños. Uno de los textos que más me han gustado es este:
En un exilio voluntario.
Una isla es el mejor
lugar para hacerlo.
Exiliarse en la bruma de una apuesta
por la reinvención de la memoria.
Aquí, ¿la luna es la misma?
no lo es
la luz que filtra, no
las nubes que la abrazan.
Los ojos que se pierden en ella, no,
no son los mismos.
Mudar de paisaje, cerrar los oídos,
ignorar las voces que, obsesivas,
nos atacan sin tregua.
Exiliarse abrir las pupilas
que otros vientos
nos modelen la mirada.
*Esta foto veraniega es de Julia Fullerton-Batten.
CARLOS ARDOHAIN: UN POEMA SOBRE DE CHIRICO

EL PINTOR
Giorgio el misterioso
antes de transformarse
en Giorgio el oscuro
arrojó las claves del silencio
en la tela vistió los maniquíes
del dolor que provoca
la ausencia del deseo
contradiciendo a Buda
antes de contradecirse
a sí mismo buscando ser
clásico en su anacronismo
en cualquier plaza vacía
subrayada por el humo del tren
hay enigmas eternos
que se deslizan huyendo
por el declive vertiginoso
que separa la luz de la sombra
por la arista que hiere de soledad
a los objetos y al hombre
que no está.
CARLOS ARDOHAIN
*Esta mañana al abrir el correo me encuentro con este mensaje: con este poema dedicado al pintor metafísico, luego clasicista, Giorgio de Chirico, que pasó de una pintura que revolucionó su tiempo y mezcló surrealismo y metafísica, hacia un arte más vinculado con el pasado grecolatino, de atmósferas más académicas. Carlos Ardohain tiene un estupendo blog dedicado sobre todo a la poesía. http://tancarloscomoyo.blogia.com.
ESTAMPAS DE LA PLAYA: MUNKACSI Y CONCHA MÉNDEZ

Durante mi estancia en Lima, la poeta May Rivas y el calígrafo Miguel Ángel Bazán me regalaron una antología muy interesante de Eduardo Chirinos, ‘Rosa Polipétala. Artefactos modernos en la poesía española de vanguardia (1918-1931)’, donde hay extraordinarios poemas sobre automóviles, trenes y tranvías, aeroplanos, el teléfono, el cine o la música, y por supuesto los deportes. De natación, ideal para esta estación, podría ser este de Concha Méndez, que fue durante algunos años la novia de Luis Buñuel, y luego se casaría con Manuel Altolaguirre.
BAÑISTAS
Horizonte. Espumas.
Azules fríos.
Salteando olas
torsos radiantes
en líricas danzas
y acrobacias.
Aquella danzarina
del bañador verde…
aquel gimnasta…
Las olas íntegras
son el mejor columpio.
Concha Méndez (Surtidor. Poesías, 1928)
*La ilustración de este texto corresponde al gran fotógrafo Martin Munkacsi, al que siempre le apasionaron los deportes. Fue uno de los grandes fotógrafos de su tiempo. Nació en Hungría en 1896 y falleció en Nueva York, Estados Unidos, sufrió un infarto viendo un partido de fútbol en 1963.
CASANOVA, DELGADO, BERNA, LA TRAVIATA... BORRADORES

El realizador Emilio Casanova es uno de los invitados al programa “Borradores” de este domingo. Emilio Casanova es el director de la serie ‘Estampas’, un álbum de personajes aragoneses que emite Aragón TV. Se pasan dos de las piezas del proyecto: la de María Moliner, la mujer que escribió un diccionario, y la del realizador Segundo de Chomón. El otro invitado al estudio es el bibliotecario y escritor Javier Delgado, quien presentará sus dos últimos libros: la novela ‘Tierra de nadie’ (Xordica) y el poemario ‘Animamorte’ (PUZ: La Gruta de las palabras).
“Borradores” ofrecerá un reportaje sobre el montaje de ‘La Traviata’ de Verdi, en la que participaron alrededor de 250 personas. Es un proyecto concebido desde el Auditorio por Miguel Ángel Tapia, Luis Merchán, Juan Luis Martínez y Andrés Ibiricu, entre otros.
Se conversará con el bailarín Miguel Ángel Berna, acerca de la experiencia del espectáculo ‘Goya’, que se estrenó en la Expo y que acaba de permanecer durante dos semanas en el Teatro Principal con un gran éxito de público.
También se visitará el Taller Literario que imparte Julio Espinosa a orillas del Ebro. Carlota Muñoz hablará con el escritor y profesor chileno y los alumnos leerán algunos de sus textos. Además, el equipo de “Borradores” se trasladará hasta el Paraninfo, para conocer la exposición ‘España 1900’, donde se exponen obras de Joaquín Sorolla, el joven Dalí, Eliseu Meifrén, Zuloaga y Anglada Camarasa, entre otros
La actuación musical en “Borradores” corre a cargo del músico argentino Nico Cassinelli, afincado en Zaragoza desde hace un par de años. Nico acaba de presentar su disco ‘Noticias de acá’, donde rinde homenaje a Zaragoza en varios temas.
**En la foto, el espectacular ’Paisaje nocturno’ de Eliseu Meifrén.
“Borradores” se emite el domingo a las 00:55 horas.
ÁNGEL OLGOSO Y SUS RELATOS

Antonio Serrano Cueto escribe de ‘Los demonios del lugar’ de uno de los grandes cuentistas españoles: Ángel Olgoso.
Acabo de terminar la lectura de Los demonios del lugar (Almuzara, 2007), el libro de relatos con que Ángel Olgoso ganó el I Premio Internacional de Terror Villa de Maracena. De Olgoso sólo conocía algunos relatos sueltos, pero había leído elogios por doquiera, los más cercanos por boca de mi amiga, la escritora Ángeles Prieto Barba. Ha sido una lectura endemoniada, como prometía el título del libro, porque desde el principio se me han llevado los diablos a ese lugar y no me han permitido descanso entre cuento y cuento. Gigantes que miman y enamoran a sus presas, difuntos que reciben con los ojos abiertos la primera paletada de tierra sobre su tumba, seres deformes que reniegan de su condición de deshechos de la naturaleza, demonios que pueblan las tormentas, rayos que fustigan el cuerpo de un niño como una maldición ingénita, el tiempo detenido en un ascensor, cráneos que ruedan por la pista de una bolera, un preso que intenta comprender el complejo espacio geométrico de su celda, un solo rostro que se quita numerosas máscaras superpuestas en una fiesta de carnaval, las manos cercenadas de un herrero que siguen forjando espadas en el secreto de la noche, un viajero que descubre en una cabaña que el mundo se sostuvo y sostiene en palafitos... Poe, Kafka, Borges, Cortázar...Todo un disfrute para los amantes del cuento fantástico, con el mérito añadido de una escritura espléndida, plagada de imágenes de atinado impacto visual, jalonada de adjetivaciones que se van sucediendo en una cadena de disposición milimétrica en la que poco o nada sobra. No siempre el género del relato fantástico se acompaña, como aquí, de un lenguaje rico y pulcro, de un estilo depurado que hace las delicias del lector que busca algo más que un oscuro portento en un cruce de caminos o una metamorfosis kafkiana frente a los fantasmas de un espejo. Estos demonios que he leído son seductores, tanto, que me apresuro a abrir otras puertas del universo literario de Olgoso.
MUJERES DESNUDAS BAJO
IMPERMEABLES MOJADOS
Ángel OLGOSO
Por primera vez Irina no acudió a nuestra cita de los
miércoles en la habitación treinta y cinco del hotel Basilea.
Inexplicablemente, no me avisó ni respondió luego a
mis llamadas. No acertaba a comprender por qué ella
—siempre tan puntual, tan cuidadosa, casi protocolaria—
había escamoteado ese encuentro. Durante días me
detuve a considerar la posibilidad de una enfermedad, de
un accidente, de una trampa, de una absurda venganza a la
que no hallaba sentido, tal vez significaba un preámbulo de
renuncia y separación. Este hecho imprevisible, doloroso,
me angustió hasta el punto de sentirme vacío, expulsado
de mi propia vida —la genuina, la que se fraguaba con la
dulzura de lo ilícito, con el palpitante ritual de nuestras
infi delidades— y arrojado de nuevo al insidioso adocenamiento
de mi vida cotidiana. Creía inarrebatables nuestra
absoluta intimidad, nuestro lenguaje confi dencial espolvoreando
los oídos, el corazón, los teléfonos, los muebles,
las esquinas, nuestro deseo itinerante que se saciaba etapa
a etapa desde hacía meses, nuestra ternura y gestos aprendidos
que sabíamos hijos del puro instinto y la vorágine,
nuestros cuatro días al mes de lluvia tibia, de sacudidas
de placer desbordante. Recé a dioses estrambóticos para
que la devolvieran a mi lado. Sentía una furiosa nostalgia
de su limpia melena color terracota, de sus labios un poco
belfos pero jugosos, de las grandes ciruelas escarchadas de
sus pezones, de su andar pausado, de la elegancia de sus
gestos amalgamada con la de su ropa.
Es el miércoles siguiente y espero a Irina en el anonimato
de la habitación treinta y cinco. Durante un tiempo
que presumo muy largo, con pasos circulares y un ramo de
zinnias en la mano, no abordo razones ni tomo determinación
alguna, sólo espero. Cuando Irina llama a la puerta
—habrá olvidado la llave— la hago pasar, absolviéndola
tácitamente, y beso su boca entreabierta y la abrazo y me
refugio en su cuerpo como un ciervo herido que buscara
menta para restañar sus desgarraduras. En la cama revuelta,
bajo la estampa de los mamelucos abriendo fuego con sus
espingardas, desbocado sobre Irina, creo percibir nuevamente
a sus recovecos abriéndose como nenúfares en un
lago de piel.
Pero hoy Irina parece envuelta en un velo de distancia
que no sé a qué atribuir. A un tiempo ávida y abstraída,
reducida al mutismo, de ademanes mecánicos y desabridos
y ojos dolientes. Con cada empellón, con cada espoleo,
siento como si nos bañásemos en un oscuro río, braceando
más y más profundo. No gime, no borbotea murmullos
de amor, apenas se oye su respiración. Y su desnudez,
que de ordinario tiene algo de nutria húmeda y lustrosa,
ofrece el aspecto de los cañaverales marchitos y la luna de
invierno. Una sensación extraña va ascendiendo desde el
fondo de mi mente entre ecos y golpeteos que resuenan en
mis sentidos, persuadiéndolos, intoxicándolos lentamente
de estupor y miedo. En la trabazón de nuestros cuerpos, la
presencia de Irina, su tacto, resultan irreales como nuestra
propia voz cuando nos llega a través de los huesos del
cráneo o por mediación de una máquina. Ella, de alguna
manera transubstanciada, no intenta en ningún momento
esconder la afl icción que asoma a sus ojos mora pálido,
esa especie de cicatriz de cualquier modo inocultable, ese
augurio irreversible, ese vislumbre aterrador. Me demoro
besando su cabello extendido, que esta tarde no es sino
una diadema de élitros de escarabajo, y cuando acaricio
sus mejillas —sin atreverme a desviar la mirada— obtengo
repentinamente evidencia de la rara y viscosa frialdad de
su piel, de su cualidad cerúlea, cadavérica.
De ‘Los demonios del lugar’. Ángel Olgoso. Almuzara, 2007. La foto es de August Sander.
HA MUERTO FRANK McCOURT

Fallece el escritor Frank McCourt,
autor de Las cenizas de Ángela
Por Maite CUADROS
Resumir en unas líneas lo que significa Frank McCourt para Ediciones Maeva es una tarea difícil y complicada.
La historia de la publicación en España de Las cenizas de Ángela comienza en septiembre de 1996 cuando leímos una crítica en The New York Times sobre el libro, era un caso muy curioso. Frank McCourt había estado trabajando durante más de treinta años como profesor de escritura creativa y aunque siempre estaba tomando notas en un cuaderno y dedicaba todos sus veranos a un eterno borrador sobre sus memorias en Irlanda, no fue capaz de encontrar su propia voz, directa, natural y honesta, y escribir ese conmovedor libro que es Las cenizas de Ángela, hasta que se retiró, cumplidos los sesenta y cinco años.
Cuando Sandra Bruna, entonces en la agencia Mercedes Casanovas me envió el libro, inmediatamente nos enamoramos de él. A partir de ese momento, los acontecimientos se precipitaron: en abril de 1997 Frank McCourt recibió el premio Pulitzer y en los meses siguientes el Premio Nacional de los Críticos, el de The Angeles Times y el Abby. En octubre de 1997 por fin llegó el momento de la publicación en España de Las cenizas de Ángela. Aunque el éxito en Estados Unidos había sido increíble, nos imaginábamos que no resultaría demasiado fácil convencer a nuestros lectores (como así fue al principio) de la fascinante atracción de unas durísimas memorias sobre una familia irlandesa. Había que intentar transmitir la profunda humanidad y humor que latían en cada una de sus páginas.
La edición española de Las cenizas de Ángela fue acogida con enorme simpatía por la mayoría de las librerías, pero pocos estaban convencidos de sus posibilidades de venta. Sin embargo, lentamente, la ternura, el sentido del humor y la honestidad de Frank McCourt fueron atrapando a los lectores y a lo largo de los meses siguientes presenciamos cómo se convirtió en uno de los libros más vendidos del año. Muy pronto todo el mundo se regalaba y se prestaba ejemplares de Las cenizas de Ángela; los lectores lloraban y reían con la odisea de supervivencia de los McCourt.
Las cenizas de Ángela ha sido publicado en 27 países, traducido a 17 lenguas y se han vendido 17 millones de ejemplares en todo el mundo, pero España ha sido el país en el que más éxito ha tenido después de Estados Unidos. La eterna sonrisa y la amable ironía del autor calaron profundamente entre los lectores españoles durante sus tres visitas a nuestro país. Recuerdo con especial fuerza el día de su presentación de Lo es, su tercer libro, en la FNAC en julio del 2000, tras el terrible atentado de la calle Carmen. El director de la FNAC le pidió a Frank que reabriera 'simbólicamente' la puerta después de permanecer cerrado tres días. Una vez más, su sonrisa consiguió hacernos olvidar el motivo del acto.
A pesar del enorme éxito de sus libros, todos publicados en Maeva (Las cenizas de Ángela, El profesor, Lo es y Ángela y el niño Jesús) Frank ha continuado siendo el mismo hombre humilde y cariñoso que había sido toda su vida. Era imposible resistirse a su generosidad y simpatía.
En una ocasión confesó en una entrevista que si en su familia no hubieran tenido sentido del humor se habrían muerto. Durante su infancia se animaba pensando que algún día se reiría de sus desdichas. Pero, como él mismo reconocía, nunca pudo imaginar la repercusión mundial de sus libros ni la felicidad de los quince últimos años de su vida.
Maite Cuadros
Ediciones Maeva
*Laura Russo, de prensa de Maeva, me envía este artículo de Maite Cuadros, editora del sello Maeva, donde glosa la vida y la obra y la personalidad de Frank McCourt, que acaba de fallecer.
EL MONCAYO RECORDARÁ A MIGUEL HERNÁNDEZ EN AGOSTO

*El VIII Festival Internacional de Poesía Moncayo, que organizan Trinidad Ruiz-Marcellán y Marcelo Reyes, tendrá este año como protagonista a Miguel Hernández, del que en 2010 se cumple el centenario de su nacimiento en Orihuela, Alicante, en cuya casa estuve hace muy poco tiempo, en una visita a mi cuñada Isabel Gascón y a mi cuñado José Antonio Ortuño. El Festival se celebrará en Tarazona, Litago y el monasterio de Veruela. Cuenta con presencias novedades, como esa conferencia de Agustín Sánchez Vidal, y con numerosos colaboradores de Olifante que cumple ahora 30 años como Ángel Guinda, el poeta por excelencia del sello, Manuel Forega, Miguel Mena, Alime Hüme, la narradora Luisa Gómez Gascón o Luigi Máraez, entre otros. Olifante ha sabido convertir el Moncayo en territorio de poesía contemporánea, en un espacio de cita estival.
PROGRAMA
El rayo incesante de Miguel Hernández
Miguel Hernández contempla el Moncayo cien años después de haber nacido. El poeta que se dejó llevar, arrastrar y esparcir por esos vientos fértiles del pueblo llenos de autenticidad, sencillez y sabiduría natural, llega a nuestros campos, a nuestras casas y a nuestras conciencias para quedarse y recordarnos que el amor, la solidaridad y la poesía son útiles, mucho más en tiempos de crisis.
Con agradecido reconocimiento, le abrimos de par en par nuestro corazón para sembrar en él su talento poético, sensibilidad, compromiso y acción revolucionaria.
Trinidad Ruiz Marcellán
Olifante. Ediciones de Poesía
21 Agosto, Tarazona
19.00 h :: Conservatorio de Música
- Intervención de Dña. Julia Pascual, Concejala de Cultura del Ayuntamiento de Tarazona.
- Conferencia a cargo del poeta Ángel Guinda sobre "Utilidad de la poesía en tiempos de crisis".
- Proyección de textos de Miguel Hernández y Arte de las Tierras del Moncayo, de Ana Alcaraz.
- Lectura de poemas de Miguel Hernández a cargo de los poetas: Taller Literario de Luisa Gómez.
- Actuación de la cantante Angi Ruiz Forés y la pianista Ana Segura.
- BookCrossing
27 de Agosto, Litago
19.00 h :: Ayuntamiento
- Inauguración.
- La pregonera Teresa Gallego anuncia el inicio del Festival.
- Bienvenida del Sr. Alcalde D. Pedro Herrero.
- Palabras del Ilustre Sr. D. Pedro Feliciano Tabuenca, Diputado Delegado del Monasterio de Veruela.
- Charla a cargo del poeta Ángel Guinda sobre Miguel Hernández.
- Actuación de la bailarina Isabel Pérez.
- Interpretación de El Acebo del Moncayo y A Borina Moncaína.
28 de agosto, Monasterio de Veruela
- Todo el día: Book Crossing en el Monasterio
11.00 h :: Museo del Vino
- Intervención de D. Gregorio García Chueca, Presidente de la Denominación de Origen "Campo de Borja"
- Lectura de poetas presentada por Manuel M. Forega:
- Brenda Ascoz
- Casimiro de Brito
- Gonzalo Escarpa
- Cesc Fortuny
- Dolan Mor
- Marian Raméntol
18.30 h :: Iglesia
Presenta: Miguel Mena
- Danza aérea con Emmaluna.
- Presentación de la edición del Festival y lectura de poemas de poetas invitados*.
- Concierto de Púa por Noelia Pellicer, acompañada al piano por Oier Arce Sancho.
- Lectura de poemas de Miguel Hernández en diferentes idiomas.
- Intervención musical del Grupo de Cámara del Conservatorio de Música de Tarazona ( Teresa Gil, Patricia Villada y Kike Reyes).
- Intervención de Agustín Sánchez Vidal, Catedrático de la Universidad de Zaragoza.
- Actuación de la pianista turca, Âlime Hüma.
19.30 h :: Iglesia
· Actuación de El Silbo Vulnerado.
·
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*Lectura: Pilar Castro, Sofía Salvador, Claire Dupois, Susana Gómez Redondo, Victoria Puig, Arantza Semprúm, Luisa Gómez, Guadalupe Aznar, Mª José Andreu, Mª Victoria Diez, Mercedes Maizal, Milagros Morales, Robertson Cáceres, Ana Alcaraz, Javier Alfaro, José Manuel Aznar, Reyes y Guillén, David Francisco y Luigi Maráez.
Homenaje a Miguel Hernández | |
Colección Papeles de Trasmoz, con poemas de:
|
SANTIAGO GASCÓN PASEA, A BORDO, ENTRE BALLENAS

Santiago Gascón, el autor del espléndido libro de relatos ‘Manila’ (Xordica), me escribió anoche desde Canadá:
Llevo 3 semanas en Canadá, fuimos en un barquico durante 4 horas por el golfo de Maine (Nova Scotia) y durante horas las ballenas nos acompañaron nadando a un metro de nuestro cascarón... Si hubieran querido nos habrían pulverizado de un coletazo, pero fueron amigables y se limitaron a ducharnos. Te adjunto foto realizada por la más joven del grupo (Paloma Delgado), yo estaba tan emocionado que prefería verlas con mis ojos y no a través de mi cámara…
*Aquí está una foto de la joven Paloma Delgado.
MARIANO IBEAS: UN POEMA A LA NOCHE

ANOCHECE
Dedicado a Antón Castro
Anochece siempre
demasiado pronto,
siempre falta luz,
llega presto la sombra
a visitarme
debo forzar
mis ojos ya cansados,
para seguir la línea oscura
sobre el papel en blanco
debo apartar las sombras
con la mano
--como quien retira de la mesa
las migas de pan
del resto de la cena--
y se diluyen
y se van
se desdibujan
las palabras
temblando en el vacío
hasta desaparecer.
*Desde su refugio en el Pirineo el profesor, blogger y poeta Mariano Ibeas me dedica este poema sobre la noche que llega en los Pirineos. Aquí en Garrapinillos, en medio del campo, vivo de una manera especial la noche, estrellada casi siempre. A veces, el medio del silencio se escapa un ruido de aviones. Este cuadro de George Frederic Watts se titula 'Hope' (La esperanza), es una obra simbolista que se conserva en la Tate Gallery de Londres.
LA CAJA NEGRA DEL TEATRO ARBOLÉ

Ha pasado algo más de un año desde que Zaragoza se convirtiera en una de las capitales de verano del mundo. Ver los cartílagos desventrados al sol de los pabellones agita la melancolía. Por ahora, hechas algunas salvedades, el recinto tiene algo de lugar fantasmagórico que ha perdido a sus remeros y a sus pingüinos. El Ebro sube y baja, lodoso, más acompañado que nunca: los enamorados musitan palabras de amor, palabras y besos. El Parque del Agua se despliega como una tierra de promisión, repleta de oasis, sombras y playas. Dentro de él está el Teatro Arbolé: un espacio espléndido, una caja negra de resonancias donde caben todas las disciplinas: el teatro, los títeres, la música, el vídeo. Los sueños. Uno de sus responsables, Esteban Villarrocha, dice que desde su entrada se contemplan los mejores atardeceres de Zaragoza: atardeceres de fuego, fogonazos de luz que pintan pájaros sobre los árboles. La sala, de pequeño formato, es espléndida: tiene talleres, una estupenda librería de teatro y músicas del mundo, un pequeño local de ensayo, diversas estancias y los camerinos. Al menos, doce familias viven de ese proyecto, que ha costado 1.660.000 euros, que paga la compañía de Iñaqui Juárez: Arbolé sigue por aquí y por allá con su destino de titiriteros ambulantes. Es un espacio alternativo, plural, rebosante de ideas: una de las últimas es incorporar en el amplio pasillo de acceso una pequeña sala de exposiciones en donde la artista Isabel Biscarri presenta un trabajo muy sugerente. El viernes actuaba allí Javier Ruibal, acompañado a la voz y al piano por Laura Furci Moratti; ofrecieron un recital inolvidable, ebrio de mestizaje y de hondura, toda una isla de sensualidad y de belleza caliente. Luego, salías a la medianoche: algunas luces y otras tonadas se extendían por la ribera contra los aullidos del cierzo. *Hace unos días cambié de ordenador y desde entonces se me desajusten todos los tipos. Siempre utilizo Garamond, antes 16, ahora 12, y aún así salen como salen. Lo lamento de veras. Sinceramente no sé como reparar ese desaguisado. Mil disculpas a los que os asomáis aquí de cuando en cuando. Este artículo apareció el domingo en la sección 'Cuentos de domingo'. Aquí están Laura Furci y Javier Ruibal.
JUAN PERRO VUELVE: NOCHE DE FELICIDAD EN CASA

Noche de felicidad en casa
Ha regresado Juan Perro, el alter ego de Santiago Auserón (Zaragoza, 1954), ese músico ambulante que se alimenta de las músicas de Cuba y del Caribe, de los sonidos negros de Nueva Orleans, de la samba y de la salsa. Juan Perro cuenta historias, canta a las mujeres, evoca a Compay Segundo o a los soneros arcaicos, busca el swing y juega una y otra vez con su voz de trovador, de cantante urbano que vuelve sus ojos hacia el hontanar rítmico de las primeras melodías y los sones del mundo.
Juan Perro es un heterónimo y un empeño personal que va más allá de cualquier impostura: con este personaje, Auserón busca ensanchar al roquero de Radio Futura, busca la complejidad en la composición, en las letras y en la actuación misma. En su regreso al Teatro Principal, Juan Perro volvió con fuerza y versatilidad, más divertido y lúdico que nunca, dispuesto a entregarse a sus paisanos, “a sus hermanos del Gancho”. Se acompañó de una banda de tres músicos cubanos, muy talentosos, de esos que saben hacer gozar al público, que entienden que un recital es una fiesta y un ritual, y que tienden un bosque de complicidades sonoras con el vocalista. Juan Perro aludió a Federico Nietzsche y recordó, en su retorno a la raíz, que “todo placer quiere la eternidad”.
En esa búsqueda se lanzó a tumba abierta, espléndido de voz, capaz de varios y sorprendentes registros, muchos de ellos humorísticos, dispuesto a bailar y contagiar su felicidad, dispuesto a soltar un manojo de propuestas, conocidas e inéditas, que encendieron la noche. El público le regaló su admiración de inmediato, y la música transcurrió como un río: apacible por instantes, mágica y alegre, turbulenta a veces, fastuosa, siempre con un ritmo envolvente. Juan Perro se sentía seguro, en la voz y en la guitarra, en sus clásicos, ‘El carro’, ‘Charla del pescado’, ‘No más lágrimas’, ‘El cigarrito’, y estuvo soberbio con los nuevos temas, que ajusta en sus directos, como ‘Río negro’, 'Poco talento', o ‘Dolores’, una de las piezas más celebradas.
Juan Perro realizó uno de esos conciertos donde todo funciona a las mil maravillas: el cantante se siente inspirado y a gusto con su propia exuberancia. Mostró ese arsenal de temas, de líneas de trabajo y de vibración que caracterizan su investigación y su pasión por la música. Y se extendió ampliamente en los ‘bises’. Creo que nunca lo he visto mejor: él, sospecho, se sintió más que nunca profeta en su tierra.
Vuelve Juan Perro. Banda: Juan Perro (guitarra y vocalista), Norberto Rodríguez (guitarra), Ronald Morán (contrabajo) y Moisés Porro (percusión). Sábado, 18. Teatro Principal. Casi lleno. [La foto pertenece a http://www.lahuellasonora.com]
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ENRIQUE DE HÉRIZ: DIÁLOGO SOBRE MAGIA Y CEGUERA

El escritor publica 'Manual de la oscuridad', la histoira de Víctor Losa, 'el mago más célebre del mundo que se quedó ciego', una historia que también revisa la historia de la magia en el siglo XIX
Enrique de Hériz (Barcelona, 1964) ha sido editor, es traductor de Noah Gordon y ha tenido un impresionante éxito con su novela ‘Mentira’ (Edhasa, 2004). Cuando la estaba acabando, pasaba con cierta frecuencia ante una tienda muy sugerente: El rey de la Magia, de Barcelona. Le atraía aquel espacio, su misterio, y pensó que había un inequívoco paralelismo entre el mago y el escritor, entre la magia y la ficción. Dice: “Tanto el espectador como el lector saben que hay truco, pero si se produce el milagro de la comunicación y del deslumbramiento, el uno como el otro se quedan boquiabiertos, fascinados, conmovidos”.
Otro día, al pasar por ese mismo lugar, vio que se iba a impartir, a lo largo de varios meses, un curso de magia o de ilusionismo. De Hériz se apuntó. Como solo se inscribió él y un joven de doce años, se modificó el plan, se realizó un curso acelerado y el escritor aprendió algunos secretos. “No puedo presumir. Soy un mago malísimo, pero el profesor me contagió el entusiasmo visceral, la pasión por la magia. Me orientó y me dijo qué momento de la magia es el más fascinante, qué movimientos había, etc.”. Así fue brotando la historia y los personajes de ‘Manual de la oscuridad’ (Edhasa, 2009), un libro de 560 páginas que ha presentado esta semana en Zaragoza. Narra la historia de Víctor Losa, que llega a ser el mejor mago del mundo, ayudado por su preceptor Mario Galván, y que luego entra en una profunda crisis derivada de su pérdida de visión. La novela recrea la magia del siglo XIX, a través de personajes como Hoffmann y su ‘Modern Magic’, Maskelyne, Harry Kellar y otros, que viven un período en que ilusionismo y ciencia avanzan de la mano.
“No soy un escritor que planifique los libros, que haga esquemas previos. Desde el primer momento tuve claro que el mago iba a quedarse ciego, y la documentación de esa parte sí que fue brutal. Contacté con una persona de la ONCE, y yo empecé a tomar notas y más notas. De repente, me dijo: ‘No, no. Vamos a la calle’. Me puso un antifaz y me mandó a la calle. Iba con ella, por supuesto, pero me obligaba a tomar contacto físico con las cosas, a superar dificultades, a captar sonidos y olores. Tuve muy claro desde el principio que mi mago iba a quedarse ciego”. Añade el escritor: “Yo escribo ‘a ciegas’ siempre. Quiero decir que parto de una situación conflictiva, y mis libros avanzan porque investigo e intento contestarme a cada paso ‘Y ahora qué’. Mi trabajo de novelista consiste en preguntarme las suficientes veces ‘y ahora qué’ y en responder con coherencia y eficacia”.
‘Manual de la oscuridad’ empieza con una imagen: un mago célebre en medio de la escalera que acaba de quedarse ciego. Y desde ahí, “el lector sabe lo mismo que el escritor, odio esas malas novelas con truco que se sacan de la manga un pretexto o un objeto determinante del que no se había hablado antes”. La novela consta de dos partes: la primera se centra en la construcción de un mago y su educación sentimental, que discurre a la par de varias historias vinculadas con la magia del siglo XIX, y el relato de la ceguera, ese momento en que Víctor Losa tendrá dos cómplices que le ayudan en su viaje entre tinieblas: la prostituta Irina y Alicia, la mujer que todo lo sabe sobre la oscuridad. “Yo creo que la novela aborda la muy humana facultad de ponerse en el lugar del otro. Alicia lo intenta una y otra vez, y le muestra a Víctor Losa el modo de reinventarse con sentido del humor e imaginación”.
Como el mago ciego, el novelista es alguien que indaga en la luz y en la sombra en su búsqueda de una senda para la ficción.
*Esta foto de Enrique de Hériz pertenece a los fondos de la Agencia Efe. Este texto aparecía ayer en 'Heraldo de Aragón'.
SERGIO DEL MOLINO: LOS ALEMANES DEL CAMERÚN

Recibo esta carta de Sergio del Molino con la noticia de su nuevo, que es un trabajo de investigación sobre los alemanes del Camerún que recalaron en Zaragoza:
Hola, Antón:
Me acaban de mandar la portada del libro de los alemanes, que saldrá en septiembre y presentaremos en octubre. Ha quedado con un punto bizarro que me encanta. La foto es un retrato de grupo de unos alemanes del Camerún en Zaragoza en 1916. El segundo por la izquierda es Paul Bieger, uno de los protagonistas del libro, y el chaval negro al que obligan a estar de pie es su criado camerunés, Nsango. La foto me la ha cedido su nieto, Pablo Bieger.
NOTA DE CONTRAPORTADA En mayo de 1916 llegaron a Zaragoza 347 internados alemanes procedentes de Camerún. No eran muchos, pero llamaban la atención una barbaridad. Esos germanos, civiles y soldados, pusieron la ciudad patas arriba durante un tiempo y, al terminar la Gran Guerra, muchos consiguieron esquivar la orden de repatriación y se quedaron en el país. Fueron el germen de una colonia alemana muy influyente y unida por lazos de sangre, amistad y dinero con las élites de Zaragoza. En Soldados en el jardín de la paz, Sergio del Molino rastrea parte de su historia por las calles de la capital aragonesa.
NOTAS DE LECTURA: NÉSPOLO, FERRERO, BARBA, MIÑANA

Siete maneras de matar a un gato
Matías Néspolo. Los libros del lince. Barcelona, 2009. 218 páginas.
En esta novela todo impone: empezando por esa imagen de los niños que conviven con el abismo en un alambre de un pilar de hormigón. El argentino Matías Néspolo (Buenos Aires, 1975) bien podría haberse inspirado en ‘Los olvidados’ de Buñuel o en ‘Ciudad de Dios’ de Meireles para trazar una vida en los suburbios. Narra la historia de dos muchachos, el Chueco y el Gringo, que aceleran su crecimiento matando gatos “por las buenas o a la brava” y viviendo sórdidas aventuras. En manos del Chueco cae una pistola, y eso le va a convertir en un cacique de la infamia, y el Gringo descubre el amor, el sexo y las aventuras de ‘Moby Dick’, y con ello quizá una forma de eludir la delincuencia.
El beso de la sirena negra
Siruela. Serie Policiaca. Madrid, 2009. 162 páginas.
Debuta el experimentado Jesús Ferrero, el mismo que deslumbró con ‘Belver Yin’ o ‘El efecto Doppler’, en la novela negra con una historia perturbadora, que participa del ángulo oscuro de la mente y de la sordidez. En cierto modo, podría decirse que ‘El beso de la sirena negra’ también es un ejercicio de literatura fantástica. La investigadora Ágata Blanc es contratada por una aristócrata para saber dónde está su hija Alize. Esa búsqueda la conducirá a París y a un territorio peligroso que tiene mucho que ver con los terribles secretos de familia, el crimen, la turbiedad e incluso la atracción lésbica. El relato no siempre sigue el cauce de lo real: a veces camina por una libresca inverosimilitud.
100 españoles y el sexo
David Barba. Plaza & Janés. Barcelona, 2009. 826 páginas.
David Barba ha realizado un centenar de entrevistas para conocer la revolución sexual que ha vivido España desde la posguerra hasta nuestros días. El libro está bien estructurado y abarca temas como las suecas, la represión, el destape, la homosexualidad, la pornografía, la prostitución o el cibersexo. Algunos diálogos con conmovedores: el de Manolo Escobar, a quien le pedían cinco segundos de amor para tener un hijo suyo; el de Alfredo Landa, que encarna la represión más feroz; las dos historias de iniciación con putas de Marcos Ana, nada más salir de la cárcel, y Luis García Berlanda, con “una puta coja”. También hay frivolidades: la sobrina de Rouco dice que su tío ha tenido relaciones sexuales.
Las esquinas de la Luna
Luisa Miñana. Eclipsados. Zaragoza, 2009. 56 páginas.
De Luisa Miñana conocíamos la novela ‘Pan de oro’ y un libro misceláneo de relatos, poemas, ensayos y fotos que apareció en la red: ‘La arquitectura de tus huesos’. Publica ‘Las esquinas de la luna’, poemas que hablan de la soledad, del amor, de la convivencia, de los sueños que no acaban de cumplirse pero que resulta bonito soñarlos. Habla, en verso libre, de una mujer varada en sí misma y en el desamor, que oye la radio, que viaja, que contempla la luna, que sueña las caricias, que increpa al amado. Y no solo eso: en ese tránsito más bien intimista y un tanto doliente, también hay lugar para la evocación en Ibiza, junto al faro, y para disfrutar de la pintura de Leonardo Da Vinci.
EXCURSIÓN A PIRINEOS SUR EN LANUZA Y SALLENT

Ayer por la mañana, tras hablar con Ainhoa Camino, me fui a Formigal. Tenía una comida y una entrevista con el director de Pirineos Sur, Luis Calvo. Me gusta mucho salir hacia el corazón de las montañas con tranquilidad, con tiempo: habíamos quedado a las tres y salí de Zaragoza hacia las doce y cuarto. En el coche, además de la voz de David Marqueta y de Mónica Farré, llevaba ‘La piel de Sara’ de Javier Ruibal y el último disco de Marianne Faifhfull, entre otros. Ruibal me dedicó ese álbum poco después del nacimiento de mi hija Sara. Me dijo: “La canción que da título al disco cuenta la historia de una prostituta pero es una historia tierna”. Narra la vida de un mujer, con ojos de color candela y esas cinturas que hacen enloquecer a su paso (como suele ocurrir con las mujeres de las canciones de Ruibal: pienso en ‘La reina de África’), que recibe a los maduros y a los escolares, y tiene una historia de amor con el joven hijo del comisario. Eso sonaba aquí y allá, camino de Almudévar, y de nuevo al pasar por el Monrepós, donde sucedió eso que nunca deseas: un camión de muchas toneladas te sigue los pasos y parece que de un momento a otro se te va a empotrar en los descensos vertiginosos o incluso en el túnel donde te piden ir a 40 y eres incapaz con esa sombra detrás. Sospecho que recibiré alguna multa y habré perdido algún punto.
Cuando dejas atrás Sabiñánigo y tomas la dirección de Biescas ya se impone, por completo, la grandiosidad pirenaica: ese país de montañas y de celajes. Me encanta Formigal: creo que nunca lo había visto así, como ahora, despojado de nieve. Los montes parecían praderas tamizadas de luz, praderas peinadas por una suave brisa de cumbres, abismos y roquedales que pugnan en un arduo tránsito entre el llano y el cielo. Por allí andaba José Luis Cortés, que esperaba a Omara Portuondo, la gran y menuda dama cubana, esa mujer de cristal y rabia a la que oí cantar en el Teatro Nacional de La Habana en el verano de 1997: dedicaba sus temas a los amigos de Matanzas, de Trinidad, de Camagüey, de Cienfuegos, de Santiago o de Cumanayagua, un lugar con castillo y perpetua luna que certifica la existencia del realismo mágico. Entonó ‘La Era está pariendo un corazón’, y el mundo pareció desplomarse en el corazón del teatro. Qué garganta de luz y de bambú. José Luis estaba muy contento, y me dijo algo bonito: “Luis Calvo siempre cuenta con nosotros para trabajar. Es de los pocos que cuenta con los managers de la tierra, y eso hay que agradecérselo”.
Por Formigal, en esa mar de músicos de distintos lugares del mundo (vi a un senegalés que aún llevaba el ritmo en el cuerpo tras la parranda de la noche anterior), estaba Gonzalo de la Figuera, que elogió el proyecto de Biella Nuey y un grupo de músicos de Casablanca, “para mí ha sido la gran apuesta del festival, algo maravilloso, que ha funcionado espléndidamente, y tengo la sensación de que lo han valorado más fuera que dentro”. Gonzalo es un asiduo de Pirineos: vive allí su pasión por los sones de la tierra, por la convivencia de músicas y de músicos. Gonzalo es letrista, músico y crítico musical de 'Heraldo de Aragón'. Conoce como nadie las mágicas noches de Sallent de Gállego y las del pantano de Lanuza, que es un lugar realmente espectacular. Uno de los músicos calificó ese escenario como el mejor al aire libre de la tierra. En la comida, se habló de todo. Estuvimos Luis Calvo, el director del festival, el viajero incansable, el buscador de músicas, líneas de investigación y de compromisos con otros certámenes; Ainhoa Camino, una donostiarra que ha convertido a Jaca en su casa, desde la que imparte lecciones de cariño y de periodismo en compañía de Juan Gavasa; Montse, la compañera de Luis, traductora, free lance del universo de la música y del cine (está muy vinculada al Festival de Huesca desde hace años), y lectora apasionada de Jesús Moncada, que es su escritor favorito y del que dice que posee un hermoso y complejo y fascinante catalán, Gonzalo y yo. Hablamos de todo: de los grandes conciertos, de Aragón, de música, radio y televisión, de política, de numerosos intérpretes, de amigos como Isidro Ferrer, Pepe Escriche y Alberto Sánchez, e incluso de fútbol. O de los lugares del mundo donde Luis y Montse habían visto, en el canal satélite, programas como ‘El reservado’ o ‘Borradores’, entre otros.
Fue una estupenda tertulia. Luego hicimos la entrevista, muy cerca del periodista musical que es Rubén Caravaca, el hombre que lo sabe casi todo del festival y de la música. Y bajamos a hacer fotos, que tomaría Marta Marco, en Sallent de Gállego, en el puente, y luego en el escenario de Lanuza. Me encantó el escenario y el montaje de Sallent, los puestos del mercadillo, los restaurantes de casi todos los lugares, la alegría de la gente, la camaradería, el clima de convivencia y de trasvase de emociones, la solidaridad y la atmósfera multirracial. Me gustó ese ámbito: la proximidad de las colinas, las casas, me gustó mucho estar en la tierra de Fermín Arrudi, uno de mis personajes más queridos del Aragón del siglo XX.
Mientras esperaba las fotos de Marta Marco, me encontré con la fotógrafa Pilar Hurtado, el crítico musical y escritor Javier Losilla, y su nena Alba, rubia y preciosa, completamente empadrada. Javier está muy bien, cariñoso como siempre, es un estupendo amigo desde hace casi veinticinco años: coincidimos en ‘El día’ y ‘El Periódico de Aragón’; es un asiduo de Pirineos Sur y uno de los habituales de sus espléndidos catálogos, cuyo motivo diseñó Isidro Ferrer y luego él y otros artistas han ido realizado variaciones a lo largo de las 18 ediciones.
Amenazaba tormenta de verano. El tiempo no ha favorecido las actuaciones. Hablamos de Compay Segundo, de Manu Dibango, de Youssou N’Dour, de Ismael Lema, de formaciones de mil y un lugares, de Marianne Faithfull, que ofreció un espléndido concierto, de la ilustradora Sonia Pulido, que hizo el cartel del Festival de Cine de Huesca de 2009. Poco antes de la despedida, volvieron a asomar a la conversación escritores catalanes y aragoneses: Jesús Moncada de nuevo, y sus traducciones en el mundo, Mercè Rodoreda, Pere Calders, Manuel de Pedrolo, etc.
Salí a las nueve de la noche. Tuve un viaje tranquilo. Con Marianne Faithfull, con muchos otros. De repente, me enteré de que España era transformada grotescamente, hacia los insoportables tonos del humo y del negro en verano, por el fuego. Mi suegra y mis cuñados y mis sobrinos habían tenido que marchar de Ejulve, el incendio avanzaba por Majalinos y por La Zoma y por Aliaga, y obligó a desalojar las viviendas. Llegué a las doce de la noche y aquí estaban todos, en casa, cerca de la piscina, bajo el cielo constelado, contando su inesperada fuga. Mi cuñado José Antonio fue el único que tuvo tiempo de preparar su ropa interior. Él, que sueña que vuela y no aterriza nunca y que se acompaña de una máquina ruidosa de oxígeno. José Antonio Ortuño, mi concuñado de Orihuela (Alicante), como a él le gusta decir. “Tú eres mi concuñado”.
*Instantánea del concierto de Biella Nuei y Azawan, con Luis Miguel Bajén en primer término (no conozco el nombre de vocalista marroquí). La foto es de Marta Marco, fotógrafa del Festival con Pilar Hurtado.
LAS OTRAS MUJERES DE FERNANDO VALLS

Ayer recibí una cariñosa nota de Fernando Valls, el profesor y editor que se ha especializado en narrativa española, especialmente en el cuento. Es un gran apasionado a las fotos, y me invitó a que visitase su blog para contemplar unas espléndidas instantáneas de Natalia Vodionova, a la que retrató tiempo atrás la gran Annie Leibovitz. Copio aquí una de las fotos de Fernando, un gran enamorado de la belleza femenina, un gran enamorado de la belleza sin más.

Estoy en Barcelona con Aloma en el hotel Ciutat Vella en la calle Tallers. Andaremos por aquí hasta el viernes. Me ha escrito Roberto Abizanda y me dice que ya se ha reparado parte del fallo del servidor. Ha cambiado la configuración de la página, pero pronto recuperaré la normalidad.
Anoche, el Paseo de Gracia me pareció precioso y lleno de vida. Estuvimos en la casa Batlló, ante la Pedrera, dejándonos ir por el placer de caminar por esta ciudad tan hermosa.
*La espectacular Casa Batllo de noche. La visión, la beldad y el ingenio poético de Antoni Gaudi.
ADIÓS A SOL ALAMEDA, CONVERSADORA

Desde hace más de veinte año colecciono todos los suplementos de 'El País Semanal'. Me han acompañado de mudanza en mudanza, como un viejo ajuar, como ese fondo de armario donde siempre encuentras lecturas, temas, personajes y fotografías que quieres volver a ver. Entre esos suplementos hay algo que amo especialmente: las entrevistas en profundidad. Las entrevistas de Rosa Montero, que luego recogió en varios libros, las entrevistas de Sol Alameda, una periodista a la que siempre he admirado por su discreción, por su humanidad, por su intensidad sigilosa y por su elegancia. A diferencia de Rosa Montero, que parecía formar parte de la entrevista, juzgar con severidad en ocasiones, con idolatría en otras, y conste que eso también me gusta (vean la entrevista, amasada con antipatía inmediata, que le hizo a Montserrat Caballé), Sol Alameda preguntaba y preguntaba y preguntaba, con la certeza de que el mejor retrato psicológico nacía de las propias palabras del entrevistado: de lo que decía, de lo que callaba, de lo que ocultaba, aunque sus entrevistas también solían tener un retrato inicial de contexto, casi una etopeya. Fallecía hace unos días Sol Alameda. Leo la necrológica de Nuria Escur en 'La Vanguardia', leí otras, leí la de Fernando Trueba, la de Juan Cruz, de la Gabriela Cañas, la de Carmen Pérez-Lanzac, que contaba una anécdota que me pareció muy divertida. Le dijo que le gustaría acompañarla a una de sus entrevistas; Sol contestó: “No. De ninguna manera. No se lo permito ni a mi hija”. Nuria Escur también reproduce esta anécdota, aunque no cita a Carmen Pérez-Lanzac. Dice, por cierto: “Para Alameda la entrevista no fue nunca un mero trámite o un intercambio de información a la búsqueda de un titular. Era un verdadero ritual, una puesta en escena que merecía, al menos, la garantía de la privacidad”. Conozco a Emilio Martínez Lázaro, coincidí con él en algunos de sus rodajes (siempre recordaré el de 'La buena vida' de David Trueba), visitó 'Borradores' con Ignacio Martínez de Pisón. Desde aquí a él y sus amigos, a los amigos de Sol Alameda, que nos daba sencillas e intensas lecciones de periodismo, les envío un abrazo. Hay seres maravillosos que te esclarecen la vida aunque nunca llegues a conocerlo. Con Sol Alameda siempre tuve la sensación de que era esa maestra cálida que enseñaba a diario y a la que nunca llegarías a conocer. En el bajo de mi casa, están casi sus 'Obras completas'.
*Encuentro esta puesta de sol sobre el mar, y aquí queda como homenaje a Sol Alamedad, la maestra de la conversación.
CRISTINA FERNÁNDEZ CUBAS: UN CUENTO

Ayer, Aloma y yo comimos, en José Luis, con Ignacio Martínez de Pisón, Enrique Vila-Matas, su musa y destinataria de sus libros, Paula de Parma, en otros tiempos Paula Massot, y con Cristina Fernández-Cubas. He escrito varias veces que Cristina influyó mucho en mis inicios, con dos libros deliciosos y turbadores: 'Mi hermana Elba' y 'Los altillos de Brumal'. Nos habíamos visto hace poco en Zaragoza, cuando Cristina recibió el premio Cálamo por el conjunto de sus cuentos, que publicó Tusquets, y le grabamos una entrevista para Borradores. A Aloma le hacía mucha ilusión conocer a Vila-Matas, estuvo muy cerca de él en París pero al final no se vieron (cosa que ambos lamentaron mucho), a Paula y a Cristina. Paula de Parma compró un pequeño libro de Cristina, 'El vendedor de sombras. El viaje', que ha publicado esa activa y apasionada editora que es Diana Zaforteza, en el sello de Alfabia. Aloma también compró un ejemplar, y yo copio esta mañana el más breve de los dos relatos que contiene: 'El viaje', una obra sencilla, mágica, que posee la humanidad y la tersura de los buenos relatos de Cristina.
EL VIAJE
Un día la madre de una amiga me contó una curiosa anécdota. Estábamos en su casa, en barrio antiguo de Palma de Mallorca, y desde el balcón interior, que daba a un pequeño jardín, se alcanzaba a ver la fachada del vecino convento de clausura. La madre de mi amigo solía visitar a la abadesa; le llevaba helados para la comunidad y conversaban durante horas a través de una celosía. Estábamos ya en una época en que las reglas de clausura eran menos estrictas de lo que fueron antaño, y nada impedía que la abadesa, si así lo hubiera deseado, interrumpiera más de una opinión su encierro y saliera al mundo. Pero ella se negaba en redondo. Llevaba casi treinta años entre aquellas cuatro paredes y las llamadas del exterior no le interesaban lo más mínimo. Pero eso la señora de la casa creyó que estaba soñando cuando una mañana sonó el timbre y una silueta oscura se dibujó al trasluz en el marco de la puerta. “Si no le importa”, dijo la abadesa tras los saludos de rigor, “me gustaría ver el convento desde fuera”. Y después, en el mismo balcón en el que fue narrada la historia se quedó unos minutos en silencio. “Es muy bonito”, concluyó. Y, con la misma alegría con la que había llamado a la puerta, se despidió y regresó al convento. Creo que no ha vuelto a salir, pero eso ahora no importa. El viaje de la abadesa me sigue pareciendo, como entonces, uno de los viajes más largos de los que tengo noticia.
El vendedor de sombras. El viaje. Cristina Fernández Cubas. Alfabia: Cuadernos Alfabia. Barcelona, 2009. 28 páginas. (Tomo esta foto de Cristina y sus grandes ojos azules, ojos de mar desarbolado, del blog de Fernando Valls y su nalocos. Fernando es el prologuista de la edición de sus cuentos en Tusquets.)
NOTAS DE LECTURA

Un médico rural y otros relatos pequeños
Franz Kafka. Trad. de Pablo Grosschmid. Impedimenta. Madrid, 2009.150 páginas.
Enrique Redel fue escritor antes que de editor. Un día decidió centrarse solo en el rescate y en la producción de libros ajenos. Tras varias experiencias ha fundado el sello Impedimenta, donde igual publica a Stanislaw Lem que a Franz Kafka (1883-1924). Ahora publica una nueva traducción de ‘Un médico rural…’ del gran escritor checo; en realidad se trata de dos libros de relatos breves: el ya citado y ‘Percepciones’, donde se encuentran algunas obras maestras del autor de ‘La metamorfosis’ como ‘Informe para una Academia’ o esa perla hiperbreve que es ‘El deseo de ser piel roja’. Los cuentos, redactados bajo el impulso de su amor por Felice Bauer, incluyen fotografías e incluso una carta de amor.
Leonardo da Vinci: obstinado rigor
Teresa Garbí. DVD: Narrativa. Barcelona, 2009. 170 páginas.
Teresa Garbí es una estupenda escritora nacida en Zaragoza y residente en Valencia. ‘Leonardo da Vinci: obstinado rigor’ es una novela acerca de la conquista de la belleza y de la sabiduría. La narradora, con calma y transparencia, acompaña al niño, al joven, al sabio artista en su peregrinaje por Florencia y por Milán, por Venecia, por Roma y por Francia, primero de la mano de Verrocchio y luego de su inefable genialidad. El libro mezcla la narratividad, el embeleso hacia la creación y hacia una época, con sabrosas reflexiones artísticas –“Un pintor es lo que sea capaz de sentir con sus ojos y sus oídos”- y el retrato de una compleja personalidad que afirma: “La pintura es la poesía que se ve”.
La familia Wittgenstein
Alexander Waugh. Trad. de Gerard Páez. Lumen. Barcelona, 2009. 486 páginas.
Este es un libro admirable: un fresco de vida, de aventuras, de historias espeluznantes, de personajes puramente novelescos. Son los Wittgenstein. El padre, Karl, era un industrial millonario, apasionado por la cultura, y a la vez inhumano y déspota hacia sus hijos. Tres de ellos, por diferentes motivos, se suicidaron. Los Wittgenstein vivieron el esplendor de la Viena legendaria de Musil, Roth o Klimt, entre otros. Otro hijo, el pianista Paul, se quedó mancó y continuó su carrera musical. El filósofo Ludwig fue compañero de pupitre de Adolfo Hitler y acabaría siendo uno de los grandes pensadores de la modernidad. ‘Los Wittgenstein’ rebosa erudición, detalles y conflictos casi tormentosos.
El ángulo y la llama
José Antonio Conde. Olifante. Tarazona, 2009. 72 páginas.
José Antonio Conde (Sierra de Luna, Zaragoza, 1961) es un poeta exigente que también pinta. Cada uno de sus libros es un paso adelante, un ejercicio de riesgo. ‘El ángulo y la llaga’ es una experiencia infrecuente: es un poemario protagonizado por mujeres célebres y anónimas; entre las primeras, figuran Gerda Taro, Teresa de Jesús, Casta Álvarez, Delmira Agustini o Gloria Swanson; entre las segundas hay judías, peregrinas, mujeres que acabaron sus días en un campo de concentración. A cada criatura le corresponden dos textos: un retrato metafórico, un juego de espejos y de imágenes, y una apostilla complementaria, a veces real, biográfica, y otras veces puramente de ficción y poética.
*Esta foto corresponde a Nickolas Muray: es un retrato de Gloria Swanson, realizado hacia 1922.
ENRIQUE VILA-MATAS Y SOPHIE CALLE

Enrique Vila-Matas está muy feliz. Está dándole los últimos retoques a su novela 'Dublinesca', que parte de un poema de Philip Larlin y es una novela muy narrativa, quizá de las más narrativas de las suyas, y transcurre en buena parte en Dublín. Por ahora, Enrique no quiere contar mucho más por ahora. Esta novela supondrá su ingreso en Seix-Barral. Con Enrique, tan cariñoso y tierno como siempre, hablamos de Sophie Calle, la fotógrafa que suele decirle “Que Dios te ampare”, que es el equivalente a lo que yo siempre le digo, al menos desde hace veinte años:”Cúidate mucho”. Para Enrique, para Sophie Calle, para los asiduos del blog, esta estupenda foto de Sophie Calle, retratada por Craig McDean. Es la foto de la fotógrafa retratada.